♥ Aquelarre ♥ Chankai [Exo]

23.

El tiempo podía llegar a ser tan veloz como un vampiro. Sonreía enormemente mientras caminaba fuera de su habitación, miró a la sala que no era ocupada por los hermanos Lee como siempre, sino por MinSeok y Jongdae, quienes estaban envueltos en su propia burbuja. Era un ambiente amoroso que les pertenecía únicamente a ellos, se habían arreglado bastante bien y las discusiones se habían detenido, era casi como solían ser antes.

—Hola— saludó con alegría.

Ambos se giraron, saliendo de su burbuja para sonreírle y saludarlo con normalidad, siguió su camino hacia la cocina. Se veían tan felices juntos a pesar de la gran diferencia entre sus pensamientos, era prácticamente un abismo que los separaba pero no era un problema. Su primo solía ayudarlo a salir y Jongdae simplemente se mantenía a raya, MinSeok no le decía acerca de sus planes con Jongin y su pareja no le preguntaba al respecto.

—Mamá Jin— saludó aún más feliz.

—Jongin, ¿vienes por algo de beber?— preguntó, ofreciéndole un vaso de vidrio.

Aceptó el objeto mientras asentía, sonrió viendo como su vaso se llenaba poco a poco por el líquido carmesí que tanto amaba tomar, Jin sirvió un vaso para sí mismo después de terminar de llenar el del menor. Chocaron sus vasos con una sonrisa divertida como si se tratará de un brindis, era agradable y delicioso, la sangre se terminó y sonrisas satisfechas aparecieron en su lugar.

—¿Saldrás hoy?— Jin preguntó mientras lavaba los vasos.

—No, ¿por qué?— estaba curioso.

—¿Quieres salir conmigo?— sonrió pícaramente.

—¿Ah?— no sabía que responder.

—No sé que estés pensando o creyendo...— comentó divertido —Pero te invito a salir porque sé que JungMyeon tiene reunión como líder de clan y no estará por algunos días— explicó riendo al final.

Incluso Jin era capaz de hacer que se avergonzará, desvío la mirada aún escuchando la risa de su mayor, no sabía que actuar como su madre también incluía la parte de avergonzar a sus hijos. Hizo un puchero mientras asentía de acuerdo, al menos vería a Chanyeol, con solo pensar él ya estaba sonriendo feliz. Jin no se perdió aquella sonrisa, imaginando lo que podría ser la causa, sonrió de lado y lo miró con una ceja elevada.

—Con solo pensar que podrás verlo, pareces el ser más feliz del mundo— su voz apenas era audible.

—Mamá— se quejó.

—¿Qué sucede aquí?— era la cálida voz de JungMyeon.

Ambos saltaron en sus lugares y miraron a JungMyeon con sorpresa combinada con terror ¿Cuánto tiempo llevaba ahí? ¿Cuánto de su conversación había escuchado? Jongin mordió su labio inferior sintiéndose atrapado mientras miraba en todas las direcciones posibles lejos de su hermano. Jin sonrió nervioso y respiró hondo antes de hablar, aún no estaba lista una excusa creíble pero no podían permanecer en silencio para siempre.