Una razón para quedarme.

Sueño Cumplido

Hoy comienzo una nueva etapa en mi vida, hoy es el día en que por primera vez trabajare como abogado junior. Tengo un mar de emociones, pero estoy seguro que a base de esfuerzos y sacrificios lograre grandes cosas. Desperté temprano, tomé una ducha y elegí el traje adecuado. Después de invertir tiempo para mi apariencia, baje al comedor donde todos se estaban preparando para sus respectivas actividades del día. Mis hermanos peleando por el cereal, típico de ellos, mi hermanita desayunando tranquila, mi papá y mamá desayunando juntos. Pasamos un agradable desayuno, hasta que dio la hora de que nos fuéramos todos.

-Sabes Damián, hemos estado pensando en que deberías tener tú el auto de tu mamá, yo puedo llevarlos a todos pero es para que tú estés más cómodo y te vayas a tus horas mijo.

-No papá cómo creen. Esta bien con que mamá me lleve, no veo porque quitarle el auto, no quiero causar incomodidad.

-Tengo una idea. Que les parece si Damián nos llevas a Camila y a mi a la primaria, y después te vas en el auto a tu trabajo ¿Llegarías a tiempo?- Suena buena idea, mamá solucionando problemas

-Por eso y más me casé contigo hermosa. Yo puedo pasar por ustedes dos y traerlas aquí a casa- mi papá le da un beso a mamá

-Ok suficiente información. Me parece genial mamá, entonces nos vamos?- asienten y nos vamos. Papá llevaría a mis hermanos a la secundaria y preparatoria y yo llevaría a las mujeres a la escuela.

-Excelente hijo. Que tengas un asombroso día y que Dios te bendiga campeón. Realmente te deseo lo mejor, te amo cachorro- me abraza mi papá y no puedo estar más feliz

-Gracias papá te amo. Nos vemos en la noche, buen día- salimos de casa y nos dirigimos hacia la escuela de Camila.

-Me gusta que nos lleves a la escuela hermanito, me gusta mucho- me dice Cami y la observo por el retrovisor

-Y lo haré todos los días princesa. Para que vean que tienes un príncipe mayor- digo sonriendo mientras ella grita de emoción. -¿Cómo te va en el trabajo mamá?.

-Todo muy bien hijo. Estoy acostumbrada tanto a esa escuela, ser la secretaria no es malo, me gusta mucho. Además tu padrino Javier es todo un caballero, igual que todos los maestros.

-Me alegra mucho mamá, todos deben valorar el gran trabajo qué haces, ¿No has tenido problema con ningún maestro?

-No hijo descuida. Las maestras y maestros me aprecian mucho, tenemos una buenísima relación. Incluso hemos salido a comer.

-¿Ah si y con quienes?- pregunto sorprendido

-La maestra Claudia y sus hijas, ¿Las recuerdas?

-Ah si claro, ojalá las vea pronto, fui gran amigo de Karla.

-Siempre me preguntan todas por ti, les dije que te habías ido y ahora que estás de regreso sería genial que fueras, estarán felices de verte.

-Estaría bien ir algún día, ¿Siguen los mismos maestros?- pregunto en mi niñez había unos ya antiguos

-La mayoría si. Hay 3 nuevos, bueno no realmente egresados. De hecho, la maestra de Camila, ¿Recuerdas que te hable de ella?- me pregunta mientras intento recordar y si, fue cuando estaba en el hotel con Dani, ay que momentos. -Bueno ella es nueva, viene de otra escuela y es la maestra de Camila y la hija adoptiva de Javier- dice riendo

-Siiiiii mi maestra es la más linda, me gusta mucho que sea mi maestra- dice feliz Camila

-Al parecer esa maestra los tiene comiendo de su mano a todos ustedes- digo riendo

-¿Por qué lo dices?

-Bueno tú me has hablado excelente de ella, Camila la adora, el tío Javier la quiere como una hija.