Hoy desperté con un poco de cruda pero con la actitud de sentirme mejor. Desperté a las 6:30 y salí a correr media hora, luego regrese y prepare mi desayuno. Hoy era día festivo así que mis hermanos no tenían clases, tampoco mi mamá trabajaba pues también va a la escuela. Después tome una ducha y me arregle decentemente después de una gran fiesta. Dejé una nota a mis papás y salí de la casa, no se porque me sentía feliz pero lo estaba disfrutando, llegue a tiempo al despacho.
—Buenos días señoritas, que tengan buen día— llegue alegre y salude a todas las secretarias.
—Buenos días Licenciado Navarrete.— se sentía bien lo admito. Pase directo a mi oficina y comencé a ordenar un poco mi escritorio.
—Good morning Navarrete, ¿Cómo estás, cómo te trato el fin de semana?
—No me quejo estuvo agradable y tu qué tal, como estuviste Robert?
—Me alegro. Yo estuve en el paraíso- ya me imagino en que clase de paraíso.
—Pues eso es bueno creo. Iré a ver a Gustavo ahora regreso.— salgo y en cuestión de minutos me encuentro frente a él. —Hola buenos días, ¿Cómo estás Gustavo?.—
—Adelante Damián, buenos días. Yo me encuentro muy bien, el fin de semana me sentó genial. ¿A ti qué tal?
—Igual que a ti, descansando con la familia. Pero es hora de volver del trabajo.
—Excelente actitud. Bien, tengo buenas noticias. El viernes logré contactar a un juez que me debe varios favores, le pedí que emitiera una orden para obtener los códigos de las cuentas bancarias de todos y lo hizo efecto inmediato, esa noche obtuve las mismas transferencias que tú, lo logramos!
—¿Cómo pudieron ser tan imbeciles para poner el dinero en la misma cuenta? ¿Acaso no pensaron que íbamos a revisar?
—También me pregunto lo mismo, quizás no les dio tiempo o fue un último recurso. Lo importante es que tenemos las transferencias, en una hora iremos al juzgado.
—Lo mejor de todo esto es que no enfrentaremos juicio por esto.
—Créeme que también pienso que es mejor así. Ten imprime todas las pruebas, y hazlas en un solo documento, lo llevaremos en unas horas.
—Entendido. Entonces ahora regreso cuando tenga todo listo.— salgo de la oficina y me voy a trabajar, comencé a pasar todo a un solo documento así como también imprimí las transferencias con las cuentas. Una vez terminado salí con Gustavo directo al juzgado para llegar a un acuerdo con al fiscalía.
—Su señoría aquí tenemos todas las pruebas que liberan a nuestro cliente el Sr. Uriel de toda culpabilidad.— Gustavo le entrega los documentos de las cuentas de Uriel y su familia
—Entiendo que sean las cuentas bancarias de él y de su familia pero eso no prueba nada, el dinero sigue desaparecido y el pudo haberlo puesto en otra cuenta. No veo razón para cancelar el juicio.
—Su señoría aquí están las cuentas bancarias del señor Saúl Díaz y Luisa Hernández, quienes son los encargados financieros de la fundación, en donde como puede ver en la cuenta del señor Saúl está la cantidad exacta de dinero que se perdió.— el juez inmediatamente leyó las pruebas y comprendió todo.
—De esta manera nuestro cliente está exonerado de cualquier culpa. El señor Uriel descubrió que estaban lavando dinero y por eso mismo le pusieron una trampa- finalizó yo.
—En vista de las pruebas, no existe ningún cargo en contra de su cliente. Buen trabajo abogados, ahora nos haremos cargo nosotros.
—Gracias señor juez, espero encuentre a los responsables.
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Una razón para quedarme.
Roman d'amourSoy de los que piensan que existen grandes amores que marcan la historia de tu vida. Uno puede ser tu perdición y otro tu salvación. Dicen que en el corazón no se manda y estoy de acuerdo. Si uno eligiera de quién enamorarse todos seríamos felices y...