Tenías que ser tú. |Draco Malfoy| TERMINADA. [#1]

175.

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Blaise Zabini.

Me dejé acostar en el sofá de mi casa, había recibido una carta de Theo hace unos minutos atrás, lo abrí y agarre la fotografía que contenía. Parecía que estaban haciendo galletas en la casa de Malfoy, sonreí al verlos. Pero carcajeé al ver la foto que me había tomado a Malfoy sacando el dedo.

—Maldito hurón albino.—dije viéndolo.

El timbre de la casa sonó, inflé mis mejillas mientras me sentaba en el sofá y me levantaba a abrir la puerta principal. Agarre la perilla y la giré abriéndola.

—¿Qué haces aquí?—pregunte confundido.

—¿No me vas a invitar a pasar? Digo, hace mucho frío afuera.—dijo ella titiritando de frío.

Me hice a un lado dejándola pasar, cerré la puerta tras mío, me di vuelta y vi como ella caminaba hasta los sofás que había cerca de la entrada.

—¿Me vas a decir que estás haciendo aquí, Tracey?—volví a repetir.

—Te vine a visitar. ¿No es obvio?—dijo con una sonrisa y volteo a ver alrededor.—¿y tus padres?

—No están. Salieron a un mandado.—me acerqué a ella sentándome a su lado.—No es por ser maleducado.... pero se me hace muy raro que estes aquí.

—Quise venir a verte. ¿No está tú... noviecito?—preguntó burlonamente.

—No. Esta con Malfoy.—dije confundido.

Se dejó caer hacia atrás.

—No puedo creer que salgas con un hombre.—apretó sus labios.—Nunca me imaginé verte con un chico... de hecho.

—Pues así fue.—me encogí mis hombros.

—¿Estás seguro que te gusta? Me refiero, yo te conozco Zabini.... se que te gusta experimentar, y al ver el chico te da mucha atención... más de lo que te imaginas pues te gusta eso. Tener el control de la situación.

Fruncí el ceño. ¿De qué se fumo antes de venir?

—No me gusta Theo por qué me presté atención, el me gusta por otras cosas que no tendría por qué decírtelas en primer lugar.

—Blaise.—pronunció.—¿Tus padres lo saben?

—No.

—¿Por qué? ¿Te da vergüenza?—preguntó burlonamente.

—No he tenido tiempo de decírselos.—expliqué.—Pero no me da vergüenza.

—Ya casi salimos de Hogwarts, ¿no piensas decírselos?

—Creo que eso depende de mi, de cuando se lo quiera decir.—dije algo molesto.— Si les contaré sobre Theo, y hasta se los voy a presentar, no te preocupes.

Ella se inclinó un poco hacia mi.

—¿Ya son novios?

—No.

—Entonces...—se acercó más a mi, desvivió la mirada bajando un poco a mis labios—... bésame.

Me carcajeé.

–¿Qué?

—Se que quieres, no me has dejado de ver en todo este momento.

—Disculpa, necesitas arreglarte la vista.—dije incrédulo.—Te estoy viendo; Sí. Pero es por qué vienes a mi casa a decirme todo esto.