Tenías que ser tú. |Draco Malfoy| TERMINADA. [#1]

41.

Draco Malfoy.

Entrelace mis manos gire mi cara viéndola, se encontraba viendo a un punto fijo. Suspiré al ver que nadie decir nada y eso me llegaba a desesperaba.

—Has estado muy rara Pansy.—admití fríamente.—¿Qué acaso me estás engañando?

—¿Qué? ¡Claro que no!—contestó nerviosa, fruncí el ceño.

—¿Estas segura?

—Sí.—dijo con firmeza.— Así que... ¿iremos al baile juntos?

—Claro.—acepte sin interés.—Nos vemos después.

"Creo que eso ha sido la conversación más corta que he tenido."

Aún así, no le había creído, llevaba semanas así y prefiero que me diga las cosas directamente ha quedado todo Hogwarts estuviera hablando de que me es infiel.

Empecé a avanzar al vestíbulo, y mientras me acercaba pude ver a Potter, Weasley y Granger hablando, humedecí mis labios y en eso escuché:

—¿Con quién vas a ir al baile, Hermione?

—No te lo digo. Te reirías de mi.

Sonreí y me acerqué a ellos con pase firme.

—¿Bromeas, Weasley?—dije tras ellos.—¡No me dirás qué ha conseguido pareja para el baile! ¿La sangre sucia de los dientes largos?

Potter y Weasley se dieron vuelta bruscamente, la reacción que ya esperaba pero en eso Granger dijo:

—¡Hola, profesor Moody!

Sentí como se me bajo la presión, y retrocedí dando un salto, lo busqué con la mirada pero Moody todavía se encontraba sentado en la mesa de los profesores.

—Eres un huroncito nervioso, ¿eh, Malfoy?—dijo Granger mordazmente. Rodé los ojos y me di vuelta avanzando a las mazmorras.

Una vez que entre a la sala de slytherin me deje caer alado de Amélie que se encontraba con un libro.

—Párkinson me está engañando.—afirme.

—¿Otra vez con los mismo, Malfoy?—no despegó su mirada del libro.

—Bueno, es que es verdad.—puse mi antebrazo en el sillón pasándolo por detrás de su nuca.

—Deberías preguntárselo.

—Eso hice.—me volteo a ver.

—¿Y qué te dijo?

—Que no.

—Entonces no te engaña.

—Claro que sí, Amélie. Me han dicho que la han visto con los de Ravenclaw estoy seguro que Luna la cubre.—asegure.—Pero sabes que, que siga con sus aventuras, me da igual.

—Claro, vas a decir que no extrañas ser su centro de atención.—alzó una ceja divertida, reí.

—Bueno, Bueno. Sí.... ella siempre estaba detrás mío ¿sabes? Y ahora solo la veo un rato, no me busca ni nada.—apreté mis labios.—Por eso creo que es raro.

—¿Irán juntos al baile?—pregunto cerrando su libro y centrándose en nuestra conversación.

—Sí, de hecho nos acabamos de poner de acuerdo.

—Vez, todo esta bien, tú tranquilo.—sonrió.

—¿Tu con quien iras?—acaricie su cabello.