La Mariposa Cósmica

Capítulo 133: Estrategia

Después de nuestro regreso me había ido con Hanae, Kanao y Shinobu a una especie de campo dentro del mundo en el que vivía. Nuestro objetivo era descansar antes de seguir con el entrenamiento, aunque nuestra sorpresa fue encontrar a Shiori en aquellos lugares practicando flexiones con una enorme habilidad, parece que estaba reforzando sus músculos y ser más eficiente cuerpo a cuerpo, ¿cuando era que esta chica descansaba?

--Hola Shiori, cuanto tiempo.--Saludamos ambas con cierto gesto amable, pero la peliazul simplemente nos ignoró. Al contrario ella se había dado cuenta de nuestra presencia, pero mantenía el ejercicio contando el número, y a decir verdad poseía una velocidad increíble. La que más sorprendida estaba era Kanao, que analizaba a todo detalle a mi prima y no se podía creer que alguien, una simple semidiosa, pudiera realizar las flexiones que ella misma se encargaba de realizar.

--Ash, que buen entrenamiento. Ah, sois vosotras, buenas tardes. ¿A qué se debe vuestra visita? Estaba practicando ejercicio, y ahora voy a seguir con la ronda de puñetazos.--Comentaba un poco aburrida golpeando al aire en direcciones diversas a una gran velocidad, y se le notaba que estaba emocionada por saber que me seguía fortaleciendo, lo mismo que mis hermanas y varios de mis amigos. Por eso mismo me daba curiosidad saber que tan fuerte se había vuelto, es decir su espíritu de batalla era realmente increíble, y no lo podía analizar así de fácil, era inmenso por así decirlo. ¿Cómo podría una guerrera como ella disponer de un poder tan grande, cuando se suponía que nosotras éramos las hijas de Amaterasu, la diosa más fuerte? Es cierto que Kyoko era fuerte y se comparaba a mí, pero Susano no controlaba habilidades tan grandes salvo por su fuerza, y aún así ella mostraba ser superior en todos los aspectos.

--Veníamos de paso para pasear. Ara ara, ¿y qué te trae aquí? Pensaba que estarías entrenando con tu padre o algún rival que valiese la pena, no eres alguien que pierde su tiempo en el mundo griego, no eres ese tipo de personas.--Opinaba Hanae algo confusa con respecto a dicha ubicación de nuestra prima, pero ella siguió golpeando al aire mientras nos miraba de reojo. A decir verdad tenía cierto sentido el análisis de mi hermana, era raro ver en este campo a Shiori, sobre todo porque apenas tenía interés en los lugares tranquilos, es más bélica y siempre se encuentra batallando con algún rival poderoso, o posiblemente en alguna guerra que se pueda encontrar por el mundo sintoísta, está lleno de bestias divinas por los diversos mundos.

--No está mal tu análisis Kocho, eres bastante inteligente y no son rumores que eres la segunda cazadora que podría haber asumido el cargo de pilar y casi más fuerte. Sin embargo...deseaba entrenar en un lugar tranquilo, a veces la tranquilidad sirve para despejar la mente y poder desplegar tu poder de una mejor manera. La pregunta es...¿qué hacéis aquí? El descanso no es una opción, y si fuera así solo estaríais perdiendo el tiempo, aunque me entra curiosidad ese cambio notorio en Kaede, veo que mi prima se ha librado de los temores, al fin será una guerrera digna.--Se dignaba a hablar la pelinegra cambiando la dirección de su mirada hacia nosotras con plenitud, pero específicamente a mi mirada. Por poco había olvidado lo tenaz y convencional que era, ella siempre me había considerado como la elegida, la sucesora de Amaterasu a pesar de que mis hermanas eran más fuertes que yo, pero ella sabía la verdad: yo era de las pocas que habían decidido seguir el camino divino y usar el poder de mi madre a mi favor. En cierta manera era perspicaz, y por eso mismo me quería como alguien que proteger, no por nada en la batalla contra Ares decidió luchar a mi lado.

--Que listos, parece que os la pasáis bien, no voy a olvidar esta humillación que me habéis hecho pasar, habéis robado uno de mis artefactos más codiciados, y eso es algo que no se perdona en la vida. Vuestro tiempo de entrenamiento ha terminado, y por eso he decidido que una guerra será esta misma noche, espero que no huyáis y preparéis a vuestros mejores guerreros, imagino que como ya estuvisteis en una no será un gran problema agruparos. Mucha suerte, y espero que muráis en batalla.--Decía del cielo la diosa Izanami con un tono molesto y bastante furioso por como hablaba, casi parecía que habíamos robado una pieza importante dentro de su plan. Por suerte ya tenía preparado todo para derrotar a Izanami, no necesitábamos más entrenamiento, y si Shinobu había preparado tal medicina o efecto, seria fundamental enfrentar a la diosa de la muerte está misma noche.