Una semana había pasado rápidamente para llegar al día de la prueba. Estaba claro que nos preparamos y fue la misma Artemisa quien había acudido para teletransportarnos a una especie de bosque en el que estaban con nosotros bastantes candidatos a cazadores, tanto chicos como chicas, unos con túnicas y otros con haoris, kimonos y yukatas, era variada la diferencia según cómo vestían y se encontraban listos para iniciar aquella prueba que daría inicio a nuestra superación o nuestra derrota, quien sabe que habría que hacer para pasarla, pero sólo así lograríamos convertirnos en unas cazadoras divinas.
--Bienvenidos a todos y a todas a la gran prueba. Ahora mismo vamos a comprobar vuestro valor y vuestro honor en esta gran batalla donde se os indicará si seréis cazadores de la divinidad, o no seréis nada. En primer lugar, la prueba será una gran pelea campal, no hay equipos pero podéis trabajar con algunos miembros si así os interesa, lo importante es que por vosotros mismos deberéis ganar puntos para conseguir vuestros objetivos durante tres días. Pero claro, si lo que queréis es ganar sólo debéis hacer una cosa simple: asesinar a vuestros rivales. Esta prueba es ser un cazador, por tanto debéis aprender a cazar, así que si dejáis vivos a algunos o los dejáis inconscientes no se os dará el punto, deben morir sí o sí. ¿Alguna pregunta?--Preguntó Artemisa a todos nuestros compañeros incluido a mí, aunque en realidad lo veía injusto. Para ganar hay que matar, se trata de una batalla campal y sé lo que esto debe doler a Hanami, ella es alguien que no se atrevería a asesinar a alguien por su propia cuenta, solo si la situación se amerita.
--¡No!--Contestamos todos al mismo tiempo como si fuéramos soldados, la orden había sido clara y por tanto era hora de mostrar mi sadismo en la batalla, quizás sería cruel pero aquí nada sería justo, la muerte es lo único que importa, asesinar o ser asesinado.
--Entonces que la prueba… ¡Comience!--Gritó la diosa para desaparecer en un gran portal de luz que cegó levemente mis ojos, pero entonces noté como me encontraba sola sin nadie cerca o sin ninguna forma de comprobar a dónde me debía dirigir, ahora sin duda era sobrevivir y durar tres días acumulando puntos, solo así me convertiría en cazadora.
--Supongo que debo ir en búsqueda de semidioses, esto no será fácil.--Asimilaba mientras empezaba a caminar por el ancho bosque. Por cada paso que daba solo se oían el sonido de mis pies, había demasiado silencio y como el cielo se encontraba de noche misteriosamente no habían formas de detectar a ningún semidiós cercano.
--Hola hola.--Saludaba un semidiós apareciendo al frente de mí detrás de un árbol sorpresivamente y sacando un cuchillo fue tras de mí para apuñalarme a una impresionante velocidad mientras sus pies se envolvían en agua, eso me recordaba bastante a Tomioka y Tanjiro por su postura del aliento de agua, pero sin darle tiempo crucé miradas para poner en medio mi espada Gozen y detener su ataque.
--Buenas, y lo siento, pero no voy a detenerme a hablar. Aliento Espiritual vigésimotercera postura: Filo Ascendente Lumínico.--Comenté con una voz fría mientras realizaba un corte ascendente que cortó no sólo el cuchillo, sino también el cuerpo del semidiós haciendo dos mitades con su cuerpo. El hacer eso me hizo morderme un labio con franqueza, pero la sangre cayó de ésta como si la figura de una imagen sádica se viera en mí como un reflejo. Normalmente habría deducido que atacar a un humano no era correcto, pero me provocaba un placer inmenso el destripar a aquel ser que necesitaba más sangre para liberar todo el odio que estaba en mi interior, supongo que ser sádica era lo mejor que se me daba, por tanto destruir las vidas era lo mejor que se me daba, y ahora al tener mi apariencia general podía infundir mucho más miedo.
--Supongo que es hora de seguir, me voy a divertir mucho estos tres días.--Sonreí plácidamente mientras corría y me adentraba mucho más en el camino. Gracias a como me había sentido anteriormente me había calmado bastante, por tanto me sentía mucho más confiada para atacar y sentirme plena en el combate, pero por desgracia no venía ningún enemigo cercano, lo cual daba muchísima más frustración. Sin embargo, a medida que más me acercaba, cerca de un lago se encontraba una chica que respiraba hondo, por ende yo nunca atacaba a traición, pero lamentablemente al verme fue lanzada contra mí con una mirada sádica, era casi la misma que la mía.

ESTÁS LEYENDO
La Mariposa Cósmica
FanfictionFinalmente Muzan, aquel que creíamos que murió una vez, ha sido desintegrado por el sol y la paz y la armonia ha vuelto en todo el mundo con los cazadores de demonios disueltos. Sin embargo, en un viaje a la finca mariposa soy atacada y viejos recue...