La Mariposa Cósmica

Capítulo 190: Engaño

Pov 3ª Persona

El conflicto cada vez se iba intensificando más, pero ahora la ventaja era más que nada para Yami, que junto a su estado de aliento se consideraba un enemigo potencial abrasador para Hanae, quien ya no sabía que hacer frente a la increíble diferencia de habilidades. Por otro lado la pelinegra pensaba en ejecutar un último intento, un ataque tan feroz que quizás podría cambiar las cartas a su favor por más más fuera una única opción, una ejemplar técnica que ella había entrenado con su maestra.

–Así que ya no te quedan fuerzas, has puesto de todo en el corazón y el alma para poder herirme, casualmente no lo consigue nadie, pero has llegado a tu límite y no puedes siquiera ya hacer nada, estás al borde del colapso. ¿Por qué no descansas? Te prometo que te tendré piedad y acabaré contigo cuando mi original fallezca en mis manos, es bastante halagador recibir una oportunidad como la que te estoy dando.--Le ofrecía la pelirroja estirando su brazo libre en señal de oferta, aunque al final el destino era solo uno, ya sea tarde o temprano: muerte.

–¡Ni pienses que haré eso! Yanira Kocho, aún no es el fin, aún si parece imposible tenemos fortalezas y habilidades que nos colocan por encima de muchos de nuestros enemigos, sólo porque durante este combate hayas tenido la delantera no te da la victoria. Aliento del Invierno postura final: Garras Heladas del Monstruo Nevado.--Exclamaba la pilar del invierno en un estado irradiado de frialdad y calma, quería demostrar lo que el equipo de Kaede podía hacer, por eso su carta bajo la manga fue activada. Sus ojos rápidamente brillaron de una forma gélida, al igual sus pies y manos se cristalizaban llegando a mostrar un fulgor blanquecino tan puro y luminoso que hizo retroceder a la pelirroja por momentos, incluso el área se congelaba por su habilidad presente.

–《Umm? ¿Cuál es esa postura? Según mis recuerdos no hay nada de datos sobre esa técnica, debe ser una nueva que aprendió con algún dios, pero aún así no servirá de nada, ya estoy preparada para tales ataques.》--Pensaba de manera confiada la pelirroja, que tal cual se preparaba para recibir la ofensiva de su contraria, cuyas ideas oscilaban en la interpretación de un poder tan débil que ella devolvería. Su error, subestimar a su oponente, no esperó que delante de ella apareciera una enorme criatura, tan gigantesca y terrorífica que abrió los ojos con gran impresión.

–Si subestimas lo que una cazadora puede hacer, por más débil que sea, puede que te arrepientas. Nosotros hemos entrenado para derrotar a los dioses, a los serafines y a los arcángeles, si algo queremos es detener por completo los planes de Izanagi e Izanami, por eso...¡voy a acabar esta batalla aquí y ahora!--Declaró la pelinegra en un tono firme y lleno de determinación, que tal cual se impulsó hacia su enemiga en un placaje directo, mientras el monstruo que había encima de ella parecía estar quieto, pero su presencia imponía como para hacer retroceder a la pelirroja.

–¡Eso no te servirá, te destruiré aquí y ahora! Aliento Espiritual: Brasas Ardientes.--Exclamaba la cazadora oscura usando su técnica para liberar cortes ondulados a medida que la pelinegra se acercaba, pero de algún modo todos los ataques eran tragados por la pilar del invierno, lo que la dejaba exaltada. Fue tal la sucesión que en un segundo del monstruo salieron un par de cuchillas heladas de los puños de la criatura, mientras tanto la espada de Hanae brillaba en un resplandor fulminante de paz puro blanco, con lo que significaba que el final de la usuaria espiritual era solo un paso más, y eso la asustaba en gran medida.

–¡Esto se acaba aquí! Colapso Hipotérmico.--Después de exclamar sus palabras, la técnica final estaba siendo ejecutada, y una vez realizaba una sucesión de cuatro cortes diagonales y seis horizontales el monstruo atravesó con sus cuchillas a la usuaria del sol, de modo que el área en sí fue congelada hasta tal punto de que hubo un gran cráter en el terreno.