Capítulo 169: La Fragilidad

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Pov 3ª Persona

Flerx usaba sus cuchillas de energía arrinconando a Kanae en un conflicto de lluvia de tajos con una enorme habilidad que soltaban chispas por cada estoque o corte, pero la pelinegra tampoco se quedaba atrás utilizando sus técnicas de sangre reforzando distracciones y fuerzas abrumadoramente asombrosas que le permitían estar al mismo nivel que su contrincante. Ambos guerreros no retrocedían y chocaban sus armas en una especie de guerra que hacía temblar el terreno de batalla, incluso la superficie se volvió un cráter debido al contraataque de seres demoníacos, hasta se podía decir que ninguno iba a ganar, pero entre ellos sólo estaba una cosa en específico: dominar el uno sobre el otro, además que gracias a su conversión como demonios se le atribuía una resistencia infinita.

--Me tienes sorprendido Kocho, deberías ser más débil pero es al contrario, como un demonio con la sangre de una semidiosa eres alguien única en la existencia. Con tu parte demonio tienes una resistencia infinita y no te cansas, tus habilidades están fuera de lo común por medio de tus propias capacidades y las técnicas de sangre o las posturas de la flor combinando el poder divino para aumentar sus efectos a un nivel que cualquiera de mi raza no podría obtener, eres muy interesante. ¿Cuáles son tus objetivos? Imagino que quieres eliminar a Izanami, ¿pero qué harás después de eso?--Añadía el ser oscuro intercambiando con más velocidad cortes con su contrincante, potenciando además la letalidad de sus ataques para que fuera mezclado las capacidades de fuerza y rapidez. Sin embargo, a pesar de lanzar ataques siempre era detenido por el tajo de su contraria, y asimismo tenía que frenar el avance de la pelinegra, un hecho que le impedía dar un golpe decisivo.

--No tengo ningún deseo, simplemente quiero vivir normal el resto de la eternidad junto a mi familia, tal vez buscar algún chico que me guste y vivir en paz, no quiero estar más relacionada en el asunto de los dioses, si alguien merece ser deidad sería Kaede o Shinobu, ellas son más propensas a luchar por el bien y ser justiciero, yo no.--Decidía la pilar de la flor aumentando la velocidad y la habilidad de sus cortes intercambiando fuerza por agilidad y precisión, donde también predecía con el uso de sus sentidos la trayectoria del corte y así le frenaba sin mayores obstáculos, aunque lo mismo era para su enemigo. Por eso ella cambió el patrón en un momento al usar su postura "Peonía de la Fertilidad-Llamas Ardientes", donde como espinas deslizaba su espada tanto por las espadas como el cuerpo de su contrincante y tratando de atravesarlo mediante movimientos de flores espinosas acompañados de látigos flameantes, así creando un total de nueve tajos con su postura mejorada, y en el que logró perforar parte de su estómago y uno de los brazos.

--Bien hecho, te felicito, no obstante...--El dios de los demonios desapareció por un instante de la vista de la cazadora, pero antes de que ella pudiera haber predecido cualquier corte ya sea por el Mundo Oculto un tajo en la espalda de la pelinegra fue propinado por el uso de su técnica divina "Reflexión de Castigo", en el que funcionaba dejando un una barra de oscuridad según la dirección en la que vaya dirigida.

--¿Me cortó? Pero...incluso si es así, yo...no puedo regenerarme...--Kanae se agachó tratando de cerrar la herida con su respiración al notar que ella misma no podía curarse, era como un veneno que le impedía usar su factor curativo.

--¿No te lo dije? Perdón, ha sido mi error, resulta que como específicamente soy un dios demoníaco, en tu caso no podrás regenerarte a menos que yo muera, un ataque mío es mortal para tu cuerpo. Déjame que te recuerde, antiguamente Muzan os convirtió en demonios a Shinobu y a ti, pero por alguna razón en específico estábais fuera de su control por ser descendientes de Yoriichi Tsugikuni,teníais una sangre especial que os ayudaba a permanecer con vuestro propio control, y hasta quizás podríais haber superado el sol, y con el talento de vuestro antecesor llegaron a vosotras, y todo esto por unas células especiales, una composición bioquímica que sí os permitia ser decoradas Kibutsuji pudo haber conseguido su objetivo, y eso mismo os protegió de morir. No obstante luego se potenció al despertar vuestra sangre semidiosa, ¿pero qué? ¿Alguna razón más? Izanami y yo somos seres superiores, reyes y dioses demonios, así que ese adn no sirve de nada, si lo queremos os podemos matar fácilmente y sin ningún esfuerzo, por lo que jamás podrás matarme.--Agregó el ser oscuro dando a entender la verdadera razón de todo lo ocurrido hasta ahora, y así sus cuchillas brillaron con intensidad.

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