Esdria

19. 'Trabajo'

 Tenai abrió los ojos inmediatamente y saltó cuando escuchó que la puerta del establo se habría de par en par. Por suerte, pudo distinguir en medio de la oscuridad que eran Sver y Shura antes de que el orbe del ulemo empezase a brillar para generar algo de luz.

 -¿Qué ocurre? Podíais haber llamado a la puerta, ¿sabéis? -dijo la sombramante.

 -No hay tiempo -dijo Shura mientras comprobaba que las provisiones que había comprado estaban listas para cargarlas sobre Lars-. Tenemos que irnos inmediatamente.

 -¿Qué? ¿Por qué? Apenas llevamos un día aquí.

 -Nos hemos enfrentado al príncipe de Oronus.

 -¿En serio?

 -Sí. Ahora deja de hacer preguntas y prepara a Lars. 

 Tenai hizo caso y despertó al animal para cargar sobre él todas las bolsas, a lo que el hoschi simplemente respondió con un pequeño bufido.

 Rápidamente, estuvieron listos y salieron del establo. Se pasaron un momento por la posada en la que Shura y Sver se habían alojado para coger sus cosas y salieron de la ciudad sin que nadie los viese.

 -Será mejor que nos mantengamos ocultos hasta que estemos a una distancia prudencial de la ciudad -dijo Shura. 

 Durante un par de horas caminaron en silencio y sin incidentes. Sin embargo, la curiosidad de la sombramante pudo con ella.

 -¿De verdad os enfrentasteis al príncipe? -preguntó.

 -Bueno, Shura lo hizo. Yo estaba ocupado estando contra la pared -dijo Sver.

 -Explícate.

 -Verás, yo me había perdido y me senté en un banco. Entonces escuché un par de voces y antes de que me pudiese dar cuenta, el príncipe me había agarrado y colocado contra la pared.

 -¿Y qué pasó?

 -Bueno, yo no podía llegar a coger mi orbe de Ulema, pero Shura usó su telequinesis para noquear al príncipe y luego saltó desde un tejado y desmayó a su compañero de un puñetazo.

 -¡Vaya! Y yo que creía que la chavala era bastante debilucha.

 -Te sorprendería saber de lo que soy capaz de hacer -dijo Shura.

 -Oye, ¿tú que hacías encima de un tejado?

 -Decidí subirme para ver qué ocurría sin que ellos me viesen a mí.

 -Luchar contra el príncipe... ¿es cierto lo que dicen de que puede transformarse en dragón?

 -A ver, Shura lo noqueó antes de que pudiese hacer nada raro -respondió Sver-, pero sí que es cierto que me agarró con un brazo cubierto de escamas, quizás se refieren a eso.

 -¿Y era guapo? 

 Sver y Shura miraron a Tenai fijamente, él extrañado y ella con una ceja alzada y una mirada incriminatoria.

 -¿Qué? -preguntó Tenai.

 -Cuando nos detengamos para pasar la noche será mejor que uno de nosotros monte guardia -dijo Shura, cambiando de tema-. Será mejor que tú seas la que te quedes despierta, Tenai. Lars no tiene reparo en llevarte si vas dormida. 

 Siguieron caminando un rato y al final llegaron a un lugar en el que decidieron pasar la noche. Tal y como Shura había propuesto, Tenai se quedó despierta en frente de la hoguera mientras el ulemo y la psíquica fueron a dormir.

 Tenai pasó el rato acariciando a Lars mientras dormía y la noche pasó sin ningún incidente.

 Cuando el sol empezó a salir, Shura salió de su tienda, intercambió un breve saludo con la sombramante y se puso a meditar.