Durante todo el trayecto hubo un silencio que ninguno de los dos se atrevió a romper, supongo que cada uno estaba tan absorto en sus pensamientos que en lo último que pensaba era en decir alguna palabra para crear un tema de conversación.
Estuve un rato en la ducha, agradecía que hayan conectado por fin las tomas de agua ya que solamente así podíamos ducharnos con agua caliente también, también habían reconectado la corriente eléctrica, nuevamente parecía la casa en dónde disfrute muchos momentos.
Me seque bien el cuerpo y después me coloque la pijama, lo que me había dicho Elli hoy me había causado un poco de pánico, si se puede decir así, el tiempo poco a poco se acorta y yo aún no he tomado una decisión respecto a lo que ví en aquél celular, pensaba en mi hermano, en su cuerpo tirado en ese baño y en las especulaciones que ese día me hicieron llegar, pero también pensaba en lo que estaba sintiendo por ella, en lo bien que la pasaba a su lado y en las miles de cosas que me he imaginado con su compañía presente, me estaba perdiendo en un laberinto, no tenía soluciones pero si muchos conflictos emocionales, salí del baño después de cepillarme los dientes y entonces la encontré en el sofá con ese celular en las manos, el corazón se me subió hasta la garganta y nuevamente bajó pero con dificultad, me acerque intentando disimular la sorpresa y el miedo que tenía en estos momentos.
Elli: este es mi celular, Pierre te lo entregó ese día.- me preguntó sin siquiera mirarme, mi silencio fue una respuesta para ella.- lo había olvidado por completo, lo revisaste ¿verdad?
Donovan: sí...- ella asintió con una sonrisa completamente diferente a la que normalmente solía mirar, esta iba acompañada de un suspiro.
Elli: espero que no hayas creído todo lo que viene aquí.- me miró fijamente esperando una respuesta.- ¿por qué no respondes?
Donovan: hay muchas cosas ahí que me confirman que realmente conociste a mi hermano.- arrugó ambas cejas y miró nuevamente el celular.- las fotos, la conversación con Hugo en screenshots, la forma en la que ocultaste la carpeta.
Elli: ¿oculte?- burló.- Donovan, yo no he ocultado nada, estas fotos claramente están editadas y la conversación se pudo haber creado en alguna aplicación, no me digas que crees esto.
Donovan: olvidemos esto ¿quieres?- intenté quitarle el celular pero ella lo evitó, retrocedió con su mano oculta en su espalda.- vamos, Elli.
Elli: esto me parece sorprendente, Pierre resultó ser demasiado inteligente.- burló mirando el celular.- borraré toda esta mierda que no tiene nada que ver conmigo.- le quité el celular con brusquedad evitando que lo hiciera, luego lo metí en mi bolsillo.- entregamelo, Donovan.
Donovan: ¿arruinaremos este día por una tontería cómo esa?- pasé mis brazos por su cintura y la pegué a mi cuerpo, ella tenía sus manos puestas en mi pecho.
Elli: yo no conocí a Hugo.- su voz sonaba temblorosa, escuchar el nombre de mi hermano salir de su boca me causaba cierta incomodidad y coraje.- ¿me crees, verdad?- la besé, cómo sí en algún momento ella fuese a desaparecer de mi vida, no tardó en corresponderme, sentí la suavidad de su lengua y la sensación fresca de sus labios, la senté sobre mí en el sofá.
Donovan: me gusta tu olor.- ella me sonrió, besé su cuello mientras sostenía sus caderas, las cuáles, se movían provocativamente sobre mí.- no hagas esto, Elli, no podré controlarme.
Elli: entonces no te controles.- colocó sus manos sobre mis hombros y me regaló una sonrisa llena de seguridad, me apodere de la situación en este momento, comencé a besarla como si mi vida dependiera de ello, metí mis manos debajo de su blusa tratando de que estas recordarán la forma de su cuerpo, la textura de su piel, deslicé la camisa por encima de su cabeza haciendo que quedará expuesta ante mí, la miré por uno segundos, rodeé sus senos con mis manos y después los besé con delicadeza, su piel se erizó ante mi toque y eso me gustó.
Metí una de mis manos en su pijama hasta lograr tocar su entrepierna, le acaricié ocasionandole algunos suspiros y movimientos involuntarios que la sonrojaban, se apoyó sobre mí manteniendo rígido su cuerpo por lo que mis dedos le estaban haciendo sentir, sus dedos se encajaban en mis hombros pero lejos de ser molesto era exitante.
Donovan: ¿puedo?- ella asintió, se puso de pie por unos segundos para darme la oportunidad de desvestirla completamente, deslicé su pijama por sus piernas hasta que esta quedó en el suelo y después hice lo mismo con su ropa interior, la abracé por la cintura para pegarla más a mi, dejé un beso en su ombligo y después bajé lentamente dejando un camino de besos que se terminaron en su entrepierna, ella se estremeció y eso lo volvió un poco incómodo.- es mejor si te recuestas.- me miró por unos segundos dudando de lo que le había dicho, la llevé nuevamente al sofá pero esta vez haciendo que ella quedará con sus piernas dobladas encima de este, pasé mis brazos por sus caderas y nuevamente dejé un camino de besos desde sus piernas hasta por fin llegar a lo que tanto me atraía, me hundí en ella, mi lengua se sentía privilegiada al estar probando algo que para mí era maravilloso, ella se aferró a los cojines del sofá y arqueó su espalda intentando ahogar los gemidos, succione y solté, esto parecía traerle un sin fin de sensaciones que parecía nunca haber sentido.
Elli: oh... Donovan.- levanté mi vista para admirarla mejor, se mordía el labio inferior y cerraba sus ojos placenteramente, mientras tanto yo me desvestía poco a poco para ahorrarle ese trabajo molesto de tener que quitarme la ropa.- por favor...- rodeó mi cara con sus manos y me llevó hacia ella para besarme con deseo, su piel se sentía cada vez más cálida y ni mencionar del rubor que se marcaba en sus mejillas.
Donovan: volteate.- ordené, ella me obedeció sin discutir, me dió la espalda y yo me encargue de que abriera sus piernas para mí, humedecí un poco y después entré poco a poco en ella, su espalda se arqueó en cuánto eso sucedió, besé sus hombros mientras comenzaba con las penetraciones lentas, mis manos se encargaron de enmarcar sus caderas cómo sí estas formarán parte de un cinturón, la levanté dejando una distancia casi nula entre nosotros, su cabeza se apoyo en mi pecho mientras que una de mis manos la abrazaba por delante y atrapaba sus senos, la otra se quedó en su cuello para evitar que se moviera, comencé a penetrarla con más rapidez pero estando alerta por si algo no le parecía, ella comenzó a gemir y eso aumentaba más mi excitación, todo a mi alrededor parecía estar lleno de estrellas, incluso sentía que estaba encima de una nube, besé su cuello una y otra vez hasta dejarle una marca en su piel.
Ahora me senté en el sofá, ella quedó sobre mí apoyando sus manos nuevamente sobre mis hombros, algunos cabellos se quedaban pegados en su frente sudorosa y su piel brillaba por el mismo motivo, soltó un suspiro tembloroso y tragó saliva con dificultad.
Me aferré nuevamente a su cintura manteniendola inmóvil ante mí, elevé un poco sus nalgas y nuevamente empecé a penetrarla, sus senos se movían al ritmo de los golpeteos y aprovechaba para devorarlos cómo si fueran un par de pastelillos exquisitos, sus uñas se encajaron en mis hombros y esto solo ocasionó que la follara con más intensidad, no quería que su rostro se borrará de mi mente, tampoco que mis oídos olvidarán el sonido de sus gloriosos gemidos, inconscientemente deseaba mucho este momento.
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La madera crujía con el poco fuego que quedaba, aunque la mayoría ya estaba convertida en brasa, Elli estaba recostada en mi pecho con su cuerpo completamente desnudo y cálido, había quedado exhausta y no puedo negar que yo también, sin embargo, quería disfrutar este momento y al menos que esta noche fuera eterno, dormía tan placenteramente que ni siquiera quería cerrar los ojos y perderme dicha escena, acariciaba dulcemente su brazo mientras maldecia las circunstancias en las que nos habíamos conocido y las muchas cosas inconclusas que aún había.
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UNA VENGANZA EQUIVOCADA
RomanceTe heriré por esto. Todavía no sé cómo, pero dame tiempo. Sabrás que la deuda estará pagada. ~George R. R. Martin~