UNA VENGANZA EQUIVOCADA

Capítulo 81 (Donovan)

Me senté en una de las mesas de aquel bar, un hombre se había acercado en un par de ocasiones para ofrecerme alguna bebida pero me negué diciendo que aún no llegaba mi acompañante, me molestaba mucho la gente impuntual y más si se trataba de un tema tan importante.
Mi hermana se había quedado en casa con mi sobrina, me insistió muchas veces en que no fuese grosero con su ahora prometido, quizás me sentía un poco celoso y nostálgico porque muy pronto ella se iría de mi lado, sin embargo, yo mismo me convencía que así tenía que ser en cualquier momento.
Luis: lamento la tardanza.- se sentó frente a mí acomodándose su suéter para que este no se arrugará al sentarse.- había demasiado tráfico, para mí mala suerte escogí un hotel muy céntrico.
Donovan: le prometí a mi hermana que no sería grosero contigo y que te trataría cómo "mi cuñado"- hice un gesto de disgusto al decir lo último y él evitó reír.- ¿que planes tienes a futuro con mi hermana?
Luis: he comprado una casa en Aspen, lo suficientemente grande para formar una familia con Fabiola, ahora mismo estoy trabajando en tu empresa pero también en un negocio que tengo con Noé vendiendo automóviles, económicamente estoy estable, emocionalmente también.- sus manos se frotaban con frecuencia encima de sus muslos, podía notarlo por los movimientos que hacía con su torso. El mesero nuevamente se acercó con una libreta.
Donovan: a bottle of whiskey, please.- el hombre anotó con rapidez y después se dió la vuelta para regresar al otro extremo de la barra.
Luis: ¿no quieres cenar algo?- negué enseguida, él asintió apretando nerviosamente sus labios.- venía dispuesto a pagar una comida para ti, creí que sería un tipo restaurante.- el hombre regresó con la botella, una cubeta diminuta con hielos en forma de círculos y dos vasos de vidrio, luego dejó un plato pequeño con botanas, este se fue después de que le agradecimos.
Donovan: Fabiola y mi sobrina son lo único bueno que tengo a día de hoy, no soportaría y tampoco permitiría que alguien les hiciera daño, lo sabes ¿cierto?- asintió tomando el vaso que recién le había servido.
Luis: no tengo intenciones malas con Fabiola, estoy enamorado de ella desde el primer día que la ví, puedes estar seguro de que no voy a lastimarla.- le dí un sorbo a mi vaso y asentí sin quitarle la mirada de encima.- quiero que ella siga sus sueños, si quiere seguir trabajando en la florería yo lo apoyaré, respetaré cada una de sus decisiones y voy a protegerla con mi vida si es necesario.
Donovan: ella te ama, Luis.- una sonrisa orgullosa y tierna se formó en sus labios pálidos.- no hay día que tu nombre no esté en su boca, quiero que la cuides, que la ames cada día con más fuerza, que la respetes y la impulses.
Luis: así será, Donovan, sé que ella ha pasado por muchas cosas horribles y créeme que lo que menos quiero es verla llorar otra vez.- en sus ojos había seguridad y sinceridad, me miraba fijamente cuándo me hablaba y no buscaba la excusa de esquivarme, eso me daba tranquilidad, levanté mi vaso en su dirección y este hizo lo mismo.
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Una noche que después se volvió pacífica entre ambos, aclaramos los puntos referentes a mi hermana y sobre los planes de su futura boda, aún no estaba todo planeado a la perfección pero ya habían algunas ideas pequeñas, ahora estábamos con el alcohol un poco liderando nuestros cuerpos, nos relajamos en los asientos acolchados intentando no perder ante el whisky.
Luis: fui a la pastelería de Elli.- ese nombre me traía revoltijos interiores que no quería sentir ahora mismo.- bueno, no entré, la miré desde el exterior, estaba recibiendo un ramo con flores en la entrada del negocio.
Donovan: le he enviado flores durante todo este tiempo.- sonreí dándole un último sorbo a mi vaso, él me miró con sorpresa.- firmé un contrato con el dueño de una florería cercana para que le enviará flores a Elli.
Luis: ¡júramelo!- se recargó torpemente en la mesa, el vaso que tenía a su costado casi cae pero este lo detuvo enseguida.
Donovan: shhh, no hagas escándalo.- le puse mi dedo índice en su boca y este se burló.
Xx: gentlemen, we are about to close.- asentí aceptando su petición, Luis y yo comenzamos una pelea por quién pagaba la cuenta, al final él colocó su tarjeta de crédito en la mano del hombre que esperaba pacientemente por nuestro pago, hizo el cobro debido y después salimos a tropezones del bar.
Luis: espera espera, ¿entonces tú eres el de las flores?- soltó una carcajada y posó su brazo encima de mis hombros, ambos caminábamos con mucha torpeza, parecía que estábamos bailando algún tipo de vals.- ¿por qué la dejaste si la amabas?
Donovan: cállate, no somos amigos.- él me dió un empujón haciendo que casi chocará con otra persona, sin embargo, él mismo lo evitó tomándome del antebrazo.
Luis: efectivamente, ahora somos cuñados y me debes respeto.- solté una risita mientras regresábamos a nuestra anterior posición.- ¿cómo vamos a regresar a casa si ambos estamos ebrios?
Donovan: dejaré el auto en el estacionamiento, vamos a dar una caminata.- él asintió sin discutir, caminamos bajo los árboles por un buen rato, los autos cada vez eran menos en la carretera y las personas parecían haber desaparecido, sentía mi cuerpo caliente, observaba las estrellas mientras Luis hablaba hasta por los codos de temas que ninguno de los dos entendíamos, le preguntaba a la luna por mis hermanos pero no me respondía.
Luis: si la amas ve por ella y hagamos una boda doble.- salí de mis profundos pensamientos y lo miré incrédulo.
Donovan: ¿crees que ella va a querer verme después de abandonarla?- negué para mí, él soltó un suspiro y después añadió.
Luis: ¿la amas?- sabía que en algún momento tendría que responder esa pregunta, pero jamás pensé que sería en mi estado de ebriedad.
Donovan: cómo un maldito loco.- respondí con sinceridad, algo dentro de mí se desprendió dándome punzadas en el pecho que me sofocaban.
El tiempo caminando se fue muy rápido, nos encontrábamos frente a mi casa, toque el timbre un par de veces, Luis me hizo una señal con su dedo índice mientras reía silenciosamente.
Luis: ¡abran la puerta, están bajo arresto!- su voz sonó extremadamente estúpida, su cubrió la boca intentando no soltar una carcajada.- ¡Salgan con las manos levantadas hacia arriba!
Donovan: pues claro, imbécil, no pueden levantarlas hacia abajo.- ahora una carcajada retumbó mis oídos, su cabeza se movía rápidamente asintiendo, la puerta se abrió de golpe dejándome ver a mi hermana con ambas cejas arrugadas, sus brazos se cruzaron encima de su pecho y negó con molestia.
Luis: amor, tu hermano me obligó a tomar whisky, te juro que no quería.- me soltó con brusquedad para ir hacia mí hermana, sin embargo, el escalón que estaba antes de cruzar la puerta hizo que se tropezara y cayera, este fingió llorar.
Donovan: vamos, levántate.- lo tomé con fuerza para levantarlo y juntos entramos a la casa, me acerque hasta el sofá y ambos caímos ahí.
Fabiola: voy a preparar las habitaciones, no hagan escándalos porque Lucía está durmiendo.- asentí obediente, Luis nuevamente puso su dedo índice en mis labios y se acurrucó en mi hombro.
Luis: eres el mejor cuñado que pude tener.- asentí orgulloso, me recosté en el sofá tratando de sostenerlo al menos en lo que subíamos a nuestras habitaciones, sin embargo, el sueño poco a poco se apoderó de mi cuerpo y caí rendido.