UNA VENGANZA EQUIVOCADA

Capítulo 64

Estaba recargada en la ventana de la habitación de Carmen, me había ofrecido amablemente pasar la noche con su compañía, intentó prepararme algo de cenar pero yo me negué enseguida, ella se quedó dormida pero yo no pude siquiera pegar un ojo en toda la noche, logré mirar el amanecer y poco a poco los ruidos en el interior de la casa comenzaron a escucharse.
Carmen: señorita, la están esperando afuera.- solté un suspiro alejándome de la ventana, me levanté aún con dificultad y me dirigí a Carmen.- lamento que todo esto haya sucedido así, eres una mujer increíble y deseo que pronto encuentres la felicidad que tanto mereces.
Elli: gracias por todos los cuidados, por el cariño y por ser tan buena conmigo, la llevaré en mi corazón a dónde quiera que yo vaya.- le dí un abrazo que me calmó por dentro, ella me dió caricias suaves en la espalda y otras más en mi nuca, me dió un beso en la mejilla y después me miró.- me voy ahora.
Carmen: vayan con cuidado.- asentí con una sonrisa forzada, salí de la habitación con ella detrás de mí, Donovan y Uriel se estaban despidiendo de Fabiola y de Lucía, mientras tanto, Paula estaba sentada en el sofá acariciándose las puntas de su cabello.
Lucía: ¿a dónde vas?- se puso frente a mí con su mano acariciando la mía, la miré por unos segundos intentando controlar mis ganas de llorar.
Elli: tengo que regresar a mi casa.- hizo una mueca de desagrado y después me abrazó con fuerza, solté un poco de aire que parecía salir en pausas y acaricié su cabello despeinado.- gracias, bonita.- Fabiola la apartó de mí y fue lo que más me dolió, Lucía se abrazó al cuerpo de su tía permitiendo que se la llevará cargada.
Uriel: ¿nos iremos en los dos autos?
Donovan: sería lo ideal para poder movernos a nuestro ritmo y no depender de un solo vehículo, Elli vendrá conmigo.
Elli: Uriel, ¿me puedo ir contigo?.- él miró a Donovan cómo buscando alguna aprobación pero este ni siquiera dejaba de mirarme.
Uriel: de acuerdo, no tengo ningún problema con ello.- Donovan se dió la vuelta y salió de la casa sin siquiera despedirse de los demás, Uriel miró a mis costados cómo sí estuviese buscando algo.- ¿no llevas maletas?
Elli: nada de lo que hay aquí me pertenece, así que me gustaría irme sin nada de eso.- suspiré, él asintió y después me hizo una seña para que saliera de casa, así lo hice, él se despidió de su familia con un movimiento suave de mano y después me acompañó hasta su auto.
Donovan ya tenía su auto encendido, solo nos esperaba para poder empezar a conducir.
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Seguíamos en carretera, según Uriel aún faltaban dos horas aproximadamente para llegar a nuestro destino, yo veía a través de la ventana en total silencio, me sentía extremadamente cansada y parecía que el no haber dormido anoche ya estaba pasando factura.
Uriel: me gustaría hablar contigo sobre lo ocurrido el día de ayer.- parpadeé un par de veces y me enderece en el asiento para poder mirarlo.- entiendo que por el momento es muy difícil que quieras escucharme o entender mis motivos, pero aún así quiero decírtelo.- soltó un suspiro y después aclaró su garganta para comenzar a hablar.- investigamos tu apellido por medio de las redes sociales, tu padre...bueno Pierre, es un hombre muy reconocido en Dallas por lo que hace, era imposible que no me saliera algo relacionado con él, sin embargo, fue un poco difícil encontrar alguna información que nos llevará hasta su paradero, investigamos el lugar donde trabajabas, también a los chicos con los que tenías fotos, incluyendo a Nicolás Harper, hijo de Pierre, él tenía algunas fotos contigo y en la descripción de estas ponía cosas cómo "Mi hermana pequeña." o cosas así, al principio no sabíamos tu nombre, pero creíamos que secuestrandote lograriamos tener algún tipo de información que nos pudiese llevar a Pierre, incluyendo los negocios que tiene con Lemuel, el principal asesino de Hugo, tiempo después descubrí que la mujer con la que mi hermano había estado su último día de vida, tenía un tatuaje en la muñeca, cómo el tuyo, desde entonces las sospechas fueron creciendo, Donovan te encontró en un club y según tenemos entendido, esa mujer de la que mi hermano se enamoró trabajaba en un club nocturno, entonces llegamos a la conclusión de que la razón por la que Pierre se había empeñado tanto en encubrir el asesinato de mi hermano era que el asesino era una persona muy cercana a él y no quería que su nombre o apellido estuviese manchado, en ese momento todos creíamos que eras su hija y prácticamente todo encajaba, después salieron las fotografías de tu propio celular y esas cosas.- no dije nada al respecto, mi mente estaba intentando resumir toda la información.- la idea del enamoramiento fue mía, tengo que asumirlo, pero después me dí cuenta de que no eres capaz de hacerle daño ni a una mosca, estuviste apunto de morir por salvar a Fabiola, eso no cualquier persona lo hace, te pido una disculpa sincera por haberte causado tanto daño.
Elli: no sé que decirte, Uriel, todo lo que me acabas de contar me parece una tontería porque yo ni siquiera conocí a tu hermano.- suspiré.- estoy pagando por desastres que yo no hice, ni siquiera llevo el apellido de ese hombre.
Uriel: lo sé, seguramente actuamos por nuestro coraje y sed de venganza, no nos dimos cuenta de que estábamos haciendo las cosas mal.- suspiró.- ahora mismo ya no tengo el mismo deseo de vengar a mi hermano, haga lo que haga nada me lo va a devolver, solamente quiero seguir con vida para cuidar de mi hija y que no tenga que vivir escondida toda su niñez, eso es lo que quiero, un ambiente bueno para ella.
Elli: Lucía es una niña muy linda.- una sonrisa se le dibujó en los labios y asintió con un brillo especial en sus ojos.- tenía el deseo de mirarla con su uniforme escolar, le enseñé a hacer algunos dibujos y quedó encantada, es una niña independiente.
Uriel: sí, mi princesa es muy inteligente.- sonrió.- también quiero verla con su uniforme escolar, pero me temo que no será posible próximamente, estaremos en Dallas un par de meses, aunque espero ir a Aspen al menos una vez a la semana para ver cómo están las cosas con mi hermana, con Carmen y con mi pequeña.
Elli: cuándo lleguemos a Dallas...¿me dejarán ir?- lo miré detenidamente, él vaciló durante unos segundos, su mirada se posaba en el retrovisor y después miraba hacia adelante.
Uriel: esa decisión no la tomo yo, Elli, pero espero que las cosas entre tú y mi hermano se puedan arreglar.- me negué enseguida, él soltó un suspiro.- Donovan no es una persona mala, tomó una decisión equivocada e hizo mal en escucharme, pero cómo te digo, actuamos por medio de nuestro coraje...has logrado cambiar a mi hermano para bien, no sonreía desde hace mucho tiempo, poco a poco lo regresaste a la vida.
Elli: shh, solamente quería saber si me dejarían libre una vez llegando a Dallas.- me recargue nuevamente en la ventana, él ya no me respondió nada, continuó conduciendo y yo mirando el paisaje que pasaba a los costados a la misma velocidad en la que Uriel conducía.