sistema tecnológico en la actualidad ( 399 - ??? )

cap 493 y 494

Capitulo 493
A Lot of Suffering, But No Lasting Damage

“¡Señor! ¡Señor! ¿Un momento de su tiempo, por favor?”, le preguntó al negociador de rehenes un reportero que tuvo la suerte (o quizás la mala suerte) de estar en el lugar de los hechos. Había estado en el banco haciendo un depósito cuando se produjo el robo.

Momentos como estos marcaban la carrera de los funcionarios del gobierno en el pasado. Los usaban para impulsarse a la fama, y luego usaban esa fama como trampolín para ascender a puestos más altos en el gobierno o para dejar sus empleos mal pagados y entrar en el sector público, donde los salarios eran altos. Y todo a costa de la miseria de los demás.

“No hay comentarios por ahora. La investigación está en curso y emitiremos un comunicado a la prensa después de que nuestro trabajo esté terminado”, respondió el negociador. Mientras el comandante en el lugar se apresuraba a entrar al banco detrás del equipo SWAT y el rescate médico, el negociador estaba temporalmente a cargo. Pero a pesar de que podría haber dado algunos detalles de información para abrir el apetito del público, ganando así una reputación y fama para un inevitable ascenso en la cadena salarial, amaba su trabajo actual y no tenía intención de dejarlo. Por lo tanto, era un operador que se atenía a las reglas. Además, sabía sin lugar a dudas que el imperio era muy estricto con la corrupción de cualquier tipo, y lo que enseñaban en la academia de policía imperial era esencialmente la palabra de Dios y debía obedecerse. Entonces, incluso si estaba dispuesto a usar esos atajos deshonestos y alimentarse de la miseria de las víctimas, se abstendría de hacerlo porque las consecuencias serían... severas, por decirlo suavemente.

Pronto, el alboroto se calmó. La policía preparó sus cordones, el equipo SWAT se fue en su vehículo, el FRV fue cargado y se dirigió de regreso al cubo, y todo volvió a una apariencia de normalidad. Dicho esto, era solo una apariencia, ya que la gente ahora tenía pruebas de lo que antes solo habían sospechado: superpoderes significaban supervillanos.

Con los negocios que rodean al banco en el distrito Chung-Guyok de Pyongyang de nuevo en funcionamiento, lo único que quedaba era que el equipo forense, que había llegado después de que la policía hubiera terminado y la escena fuera declarada "segura", hiciera su investigación y recreación. La tecnología que el imperio utilizaba rutinariamente ya era suficiente para automatizar ese proceso, pero Aron había decidido inteligentemente que duplicar el esfuerzo estaba bien para la mayoría de las tareas no críticas. Si no hubiera tomado esa decisión, el desempleo habría sido de casi el 90%, ya que prácticamente todos los trabajos en el imperio podían ser manejados fácilmente por robots con VI de nivel superior instalados.

Diez minutos después de que los especialistas forenses entraran al banco, terminaron su análisis profundo y recogieron sus cosas. Todo lo demás se manejaría en la simulación, al menos por su parte. La única tarea que les quedaba era colocar dos guardias fuera del banco para esperar a que llegaran los limpiadores de la escena del crimen para limpiar lo que Kim Ho Song había dejado atrás sin darse cuenta después de que le introdujeran de manera violenta y catastrófica el extremo de una bala.

En total, el banco pudo reanudar sus operaciones normales treinta minutos después de que comenzara el fallido intento de robo; la única señal de que había sido atacado era una ligera decoloración en el escritorio detrás del cual trabajaba el cajero original del banco, donde la madera se había deformado por el calor del fuego del despertado y la laca que se había necesito para reemplazarla.

……

El recién nombrado jefe de la agencia de policía imperial, Erik Schneider, solo había estado en el cargo durante dos horas en el mundo real cuando se encontró con su primer problema. Había estado celebrando con su familia en realidad virtual, con la intención de hacer la gira mundial que nunca habían podido permitirse antes mientras se sometía a sus mejoras genéticas, pero lo sacaron de su casa y lo enviaron a su oficina, donde le informaron sobre la situación actual y lo dejaron para que se ocupara de ella.