La Escort

Siento que sobró en tu vida.

Pov Calle

Mi niña, le di un beso en la frente, chiquita bonita, besé su otra mejilla, mi princesa, besé su otra mejilla, ella aún mantenía sus ojos cerrados pero una sonrisa quería aparecer en su rostro, amor despierta, ya es de día, los pajaritos cantan, no, ella seguía ignorandome, chaparra despierta, le dí un corto beso en sus labios, Sonreí ante la idea que se me vino a la cabeza para despertarla. Coloqué mi mano entre sus piernas, escuché su suspiro profundo y sonreí, ¡Amor despierta!, Ella seguía sin hacerme caso, mis labios fueron a su cuello, con mi mano empecé a trazar círculos lentos sobre su vagina, la respiración de Poche se hacía más pesada, Sera mejor que despiertes, le volví a decir pero Poche seguía con los ojos cerrados y la boca entre abierta, coloqué mis labios en sus pezones que estaban erectos, cerré mis ojos y empecé a succionarlos lentamente mientras aumente el ritmo de los movimientos de mi mano.

¡Mmm... Calle! — A Poche se le salió un gemido y yo sonreí.

- ¿No que estabas dormida tramposa? — Le dije y ella se rió de una forma muy dulce.

- Uno puede dormir con los ojos abiertos ¿Sabías? — Poche me dijo alzando una ceja y yo negué.

- recuérdame que ya no te deje ver películas por las noches — Le dije y ambas reímos

- Mejor te recuerdo que me has puesto demasiado excitada — Poche me dijo mirando mi mano que estaba entre sus piernas.

- ¡Oh disculpe usted señorita! Lo que pasa es que...

- Daniela Calle y María José, ¿Podrían salir ya de la habitación? Ayer vine de regreso con Santiago a la casa y los dos las escuchamos sollozar el nombre de la otra, tuvimos que irnos de regresó a la casa de Santiago, llegó  de nuevo y siguen en la habitación. ¡Las llevaré a terapia! Les doy cinco minutos — Escuché los pasos de mi mamá alejarse de la puerta.

Poche y yo soltamos una carcajada.

- ¡Esto es tu culpa! — Poche me reclamo y yo me hice la ofendida.

- ¿Mi culpa? — Le pregunté con mis ojos bien abiertos al igual que mi boca.

- Sí, tú me provocas ayer en la noche por dejar en mi mente una imagen muy Horny de ti y ahora porque empezaste un juego que por lo visto no terminarás — Poche me dijo.

Me subí encima de ella y me acerque peligrosamente a sus labios.

- mira chiquidracula — Recibí un fuerte golpe de su parte en el hombro después de haberle dicho así.

- ¿¡Porqué me dices eso!? — Poche me dijo molesta.

Rodé los ojos y alce mi cuello, le mostré la marca exacta que había dejado en mi cuello, Poche se sonrojó y escondió su rostro en mi cuello.

Me acerqué a su oído, suspire y le dije: te amo chaparra, sabiendo que ese iba hacer el primero de muchos te amo en el día.

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Cuando bajamos a la sala mi mamá nos llamó para que fuéramos al comedor a desayunar, al llegar nos dimos cuenta que el desayuno ya estaba servido, en el plato habían huevos revueltos con jamón y queso, fruta picada, pan tostado y jugo de naranja. Me causaba gracia el hecho de que Poche no podría ver a mi madre a la cara de la pena que traía al escuchar lo que nos reclamo mi mamá hace un rato.

- Hija ¿Qué te paso en el cuello? — Mi mamá me preguntó al ver el moretón.

Poche y yo cruzamos miradas, es obvio que mi mamá hacia esto por molestar, le gustaba hacernos sentir incómodas.

- emm...nada madre, un mosquito debió haberme picado por la noche y no sentí — Le dije después de haber bebido de mi jugo de naranja.

- Sé nota que ese mosquito tenía mucha hambre — mi mamá me dijo tratando de contener la risa.

- Pues yo creó madre, porque casi me arranca la piel — Le dije siguiéndole el juego a mi mamá.

- ¿Y que tal las cosas con Santiago Mafe? — Poche cambio de tema.

Mi mamá sonrió y me guiño el ojo.

- Todo va muy bien, Santiago ayer estaba muy feliz por la cena, en todo el camino no paro de hablar con Eli sobre lo feliz que estaba al tener una familia, y yo también estoy muy feliz de saber que me voy a casar de nuevo, con el hombre más asombroso de la faz de la tierra— Mi mamá contesto con un brillo sobre su rostro, pero especificamente en su mirada — Por cierto chicas, ¿Que paso ayer con Eli? Después de que salimos de aquí no la vi muy bien — mi mamá nos preguntó, me hizo recordar lo mal que la trato Poche ayer.

- Solo tuvimos una pequeña discusión Mafe, pero todo está bien, ¿Verdad amor? — Poche me preguntó.

- Sí amor — Le respondí no muy segura.

- Me alegra niñas, Debo irme a trabajar, las veo por la noche, se portan bien Porfavor —mi mamá nos dijo levantándose de su lugar, se acercó a nosotras y nos dio un beso a cada una, para después retirarse.

- ¿Estas segura que está todo bien amor? — Poche me preguntó después de que se había ido mi mamá.

- Sí amor, mientras nuestra relación y tú este bien, yo también lo estoy — tome su rostro para besarla pero sentí que mi celular empezó a vibrar.

Saque mi celular del bolsillo y me di cuenta de que me estaba llamando mi papá, la verdad se me hacía demasiado raro recibir una llamada de él, porque él rara vez se recuerda de mi existencia.

- ¿Pasa algo amor? — Poche me preguntó al ver mi cara de preocupación.

- Mi papá me está llamando amor — Le respondí.

Poche me hizo una mueca y me pidió que le contestará.

—Hola papá — le contesté.

— ¡Hola ratona!, Me hacía mucha falta escuchar tu voz — Mi papá me dijo, rodé los ojos.

— Sí claro papá, me lo imagino — le dije sarcásticamente — no quiero sonar grosera pero...¿Para que me estás llamando?

— Hija te extraño mucho, a veces tengo la idea de que no te gusta hablar conmigo, que te molesta y te irritó, por eso a veces prefiero no molestarte hija, porque de alguna forma u otra siento que sobró en tu vida.

Escuchar decir eso a mi padre me hizo sentir un nudo horrible en la garganta.

— Papá eso no es cierto, no me digas eso — le pedí.

— Está bien hija, pero bueno quiero invitarte hoy después de que salgas de la universidad a comer un helado  o tomar un café ¿Quieres? — mi papá me preguntó, no sabía si aceptar o no, pero a la final decidí hacerlo.

— Está bien papá — Le respondí.

-—¡Genial hija, nos vemos por la tarde entonces! ¡Te amo! — mi papá me dijo.

— Hasta en la tarde papá — le dije y colgué la llamada.

- ¿Qué pasa amor? — Poche me preguntó acariciando mi rostro.

- Mi papá me quiere ver amor, dijo que pasaría por mi después de la universidad — Le respondí a Poche.

- ¿Y vas a ir amor? — Poche me preguntó.

- Creó que sí amor, quiero saber que es lo que tiene mi papá que decir — Le dije recostando mi cabeza en su hombro.

- Es lo mejor mi amor, sabes que cualquier cosa estaré para ti — sentí como Poche había besado mi cabeza y su mano recorrer mi espalda de arriba hacia abajo, era lindo saber que pasé lo que pasé la mejor mujer de todo el mundo está a mi lado.

Hola guapas!!!

Cómo están?

Espero que estén bien.

Paso a dejarles este capítulo de la semana y de paso a decirles que las quiero un montón.