Capítulo 69: Año nuevo, alucinaciones nuevas

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La cena de fin de año estuvo muy buena, a las doce del nuevo día y del nuevo año todos nos abrazamos y disfrutamos de un brindis bonito de mi padre, yo solo tomé jugo de uva porque todavía soy menor de edad. Cassandra intentó darme un poco de alcohol, pero Oliver se dio cuenta y le recordó lo de la otra noche a manera de chantaje. Me divertí jugando y hablando con mis primos, incluso hasta mis tíos me abrazaron, creo que esté ha sido el mejor inicio de año de mi vida.

Ya es muy tarde y todos están listos para dormir, hoy también dormiré en el cuarto de Oliver, pero ahora estoy terminando de desmaquillarme, Cassandra y Anna insistieron en hacerlo. Me miro en el espejo del baño, las toallitas de Cassadra me quitaron el maquillaje rápidamente. Me cepillo los dientes rápido y salgo del baño, cierro la puerta lentamente para no hacer demasiado ruido y camino por el largo pasillo hacia el cuarto de Oliver.

Voy caminando hasta que escucho la puerta del baño volver a abrirse, me detengo bruscamente y volteo con algo de miedo hacia atrás. La puerta del baño está completamente abierta y ella puedo ver una sombra que se mueve lentamente. Camino de espaldas, sin poder apartar mi mirada de la sombra, entonces veo la sombra empezar a acercarse más rápido. Distingo la figura ensangrentada, lleva ese maldito suéter feo lleno de sangre y su cara parece un zombie, pero es Maddison. Siento algo de calma al verla, hasta que se mueve rápidamente hacia mí, lo que me hace correr de espaldas y chocarme contra la puerta del cuarto de Oliver. Ella no se detiene, sigue corriendo hacia mí, eso hace que grite y cierre los ojos.

Los abro cuando siento que el soporte de mi espalda desaparece y me voy hacia atrás. Oliver detiene mi caída y me mira con preocupación. Voltea al otro lado del pasillo y cuando también lo hago me doy cuenta de que la puerta del baño está cerrada y no hay rastro de Maddison zombie.

—¿Estás bien? —me pregunta.

—Sí, solo me pareció ver algo —evito decirle que fue a Maddison para que no se moleste con Cassandra.

—Bueno.

Termino de entrar en su cuarto y me acuesto en su cama, estoy lista para dormir y olvidar esa horrible imagen de Maddison zombie persiguiéndome por un pasillo oscuro y aterrador.

El club de los trastornadosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora