El club de los trastornados

Capítulo 132: Orientador vocacional mejor pagado

Estoy sentada en el diván de mi nuevo psiquiatra viendo la mesa de centro y repasando lo que ha pasado estos últimos días. Bernard es como April, me deja no decir nada sin presión, solo se queda callado y anota cosas.

-A este lugar le hace falta una ventana -eso lo hace reír.

-Sí, ya esperaba ese comentario. Lo lamento, espero algún día poder cumplir con eso -me dice.

-Me ayuda a pensar.

-Lo sé.

-Su mesa es aburrida -se ríe más.

-Solo es una mesa aburrida, tomo nota.

A veces quiero odiarlo, pero me lo pone muy difícil.

-Visité la universidad hace unos días.

-¿Cómo te fue?

-Bien, mi amigo Ken me acompañó.

-Tu ex, ¿no? -entrecierro los ojos, sabe demasiado.

-Sí, creo que volvimos, no estoy segura.

-Las relaciones son muy difíciles.

-Sí. Pero bueno, fuimos a la universidad y me gustó mucho el lugar.

-¿Estás lista para tomar una decisión?

-Creo que ya la tomé.

-¿Quieres compartirla conmigo? -lo miro y asiento con la cabeza.

Trato de odiarlo, pero él es tan amable conmigo que no puedo hacerlo.

-Decidí ir a Mitril.

-¡Es una gran escuela! Y tus dibujos son increíbles, manda un par de ellos y te aceptarán.

-Mis padres me dijeron que también tengo que redactar algo sobre mí, como contar mi historia. Me dijeron que hable de mi esquizofrenia.

-¿Quieres hacerlo?

-No me molesta hablar sobre eso. Pero he estado pensando en acompañar esa redacción con un dibujo nuevo, un autorretrato.

-Interesante, eso es muy íntimo.

-Pienso retratar también a mis voces -sonríe.

-¿Ya has trabajado en eso? -asiento con la cabeza.

-Son solo borradores -digo pasándole mi libreta de dibujo.

Lo veo hojeando la libreta, examina los tres dibujos que hice de mis voces y asiente con la cabeza.

-Eres muy valiente al hacerlo. Y los dibujos son muy buenos, gracias por compartirlos conmigo.

Me devuelve mi libreta y la estrecho contra mí. El arte es genial, espero ser lo suficientemente buena.