Destino compartido || Gavi ||

Parte 13- No eres tu, soy yo

Recordad dejar estrellita✨

NARRA GAVI

Amanecí super descansado. Era la primera vez desde lo de Carla que dormía en paz, y todo gracias a Bea. La niñata había logrado algo que ni las pastillas, ni el psicólogo consiguieron. Dejar de lado mi sentimiento de culpabilidad y descansar. Pensar que había más para mi y que me lo merecía.

Pero toda esa sensación de bienestar desapareció, al estirar el brazo para rozarla y darme cuenta que estaba solo en la cama. Abrí los ojos de par en par y miré de un lado a otro, no me lo podía creer. Se había ido, me había dejado solo.

Me recorrió una sensación de inseguridad terrible. Yo siempre le hacia eso a las chicas que me tiraba, al acabar de follar me iba, pero nunca me lo habían hecho a mi. Y me molestó, mucho. Tanto que.. puede que cometiera la estupidez más grande de todas sí, estaba cabreado, frustrado y me quería desahogar, por lo que.. fui a buscar a la persona menos indicada, pero que sabía que me iba a dar lo que quería sin rechistar.

Alba.

Ella dormía con Aurora en la habitación de mis padres, y cuando me vio asomar la cabeza sonrió con superioridad.

-¿Qué pasa que Bea no te ha dado lo que querías?- se burló de mi mientras me seguía a mi habitación.

-Cállate y date la vuelta- la empujé contra la pared y empecé a follármela de espaldas, para no tener que verle la cara ni besarla. Entraba y salía de ella con rabia, con mucha rabia y a Alba le gustaba, porque solo gemía pidiéndome más.

Pensé que me sentiría mejor, que .. desahogándome así conseguiría olvidarme de la sensación de vacío que me había dejado Bea, pero no fue así.

-Más rápido, más..- me pidió Alba acompañando mis movimientos con su culo y ese fue el detonante que necesité para salir de ella de una y sentarme en la cama con la cabeza entre mis manos.

¿Por qué cojones se había tenido que ir? Me hubiera gustado prepararle el desayuno.. amanecer con ella, chincharla un poco.. y luego ir juntos al club, pero todo se fue a la mierda porque se fue sin decir nada.

-Déjame a mi- escuché como decía Alba colocándose sobre mis piernas y conduciendo mi miembro a su entrada, pero ya no estaba excitado y no me apetecía por lo que la aparté y la dejé sobre el colchón.

-Me voy a duchar, esto ha sido un error y no va a volver a pasar-le aseguré poniéndome en pie.

-¿Un error? me has buscado tu- se quejó Alba vistiéndose.

-Sí, y por eso mismo , ha sido un error- repetí.

-Ya veremos que piensa tu amiguita cuando se entere del "error"-me amenazó saliendo por la puerta.

-Me da igual. Porque no somos nada ella y yo y puedo hacer lo que me plazca.

Aunque no era verdad del todo. No me daba igual.. La niñata y yo no teníamos nada, pero si se enteraba de esto... en fin, daba igual. Total, se había ido sin decirme nada, que más daba como le pudiera sentar que yo me follara a alguien.

Llegué al club sin ganas. Hoy teníamos entreno antes del partido de mañana. Era la clasificación para la Copa del Rey y debíamos darlo todo. Pero de nuevo, yo no me encontraba con fuerzas de nada. Lo que había pasado con Alba me había dejado mal, una sensación horrible porque yo no era así, y no quería serlo.

Fermín y Pedri intentaron animarme al notar mi mal humor, pero no consiguieron nada, y entonces fue cuando Bea pasó frente a mi con mala cara. Como si le pasara algo. Me ignoró, estaba más que claro, y se fue directa al banquillo para preparar sus cámaras.