Destino compartido || Gavi ||

Parte 27-Miedo

Recordad dejar Estrellita

NARRA BEA

Si alguien me hubiera dicho dicho hace medio año que iba a estar como estaba ahora.. no lo habría creído. Después de mi accidente, todo me daba igual. Y ahora.. tenía un trabajo estable, que cada día me gustaba más, amigos geniales como Pedri y Fermín y... bueno tenía también un Gavi. Estábamos juntos, pero no de forma oficial, porque después de divagar mucho la noche en la que me dijo que no quería que estuviera con nadie más, se hizo el chulo para chincharme a posta, y al final decidió que ya buscaría el solo una solución "a nuestra rollito".

Eso solo podía significar dos cosas, o que estaba muy cómodo como estábamos ahora, o que pensaba preparar algo extravagante para "oficializarlo", y la verdad, es que prefería la primera opción.

Tener una relación era un paso importante, por lo que tampoco me molestaba esperar, y menos ahora que sabía que ambos estábamos en el mismo punto. Yo no quería estar con nadie, no lo buscaba, ni pensaba que fuera a necesitarlo, pero con Gavi era diferente. Me hacia querer fluir y yo a el.El tampoco quería estar con nadie más, por lo que por esa parte estaba tranquila. Tenía a Gavi todo para mi.

Y aunque no lo oficializáramos del todo, si que habíamos estado dando más pasos estas semanas. En especial en la convivencia. Hoy llevaba exactamente 4 días seguidos durmiendo en casa de Gavi. Sus padres se fueron hacía una semana, y el sevillano me chantajeaba a diario para que no lo dejara solo por la mala racha que llevaba el barça en todos los partidos.Los entrenos eran tarde, muy duros y el pobre siempre acababa reventado, por lo que según el, yo era su "medicina" para dormir bien, y para que mentir, me gustaba.

Nunca antes había convivido con alguien, ni con Hector llegué a dar ese "paso" pero me sorprendió lo natural que salió todo con Gavi, y que realmente éramos super compatibles en eso. Si el necesitaba su espacio para jugar a la play lo tenía, cuando yo necesitaba el mio también, aunque tampoco habíamos necesitado mucho de eso, porque en su casa solo nos buscábamos. Justo como ahora.

Salí de la ducha con la toalla al rededor de mi cuerpo. Gavi estaba tirado en la cama con el móvil en mano, pero lo dejó a un lado al verme salir. Me repasó de arriba a bajo mientras se pasaba la lengua por los labios.

-¿Ya tienes la maleta para mañana?-señalé la bolsa de viaje abierta que descansaba sobre el suelo, con la idea de distraerlo un poco y que dejara de mirarme así, porque aun conseguía ponerme nerviosa.

-Luego la acabo - respondió sin ganas sin apartar la mirada de mi cuerpo, por lo que me permití dar otro paso en su dirección.

-Eso mismo dijiste ayer.. y antes de ayer, y nos vamos esta tarde- le recordé con cariño haciendo referencia a que viajábamos a Riad para la Super Copa.

-Te han dicho alguna vez que eres muy mandona- me cogió por un brazo y me lanzó a la cama para posicionarse sobre mi, haciendo que la toalla se me resbalara y me quedara desnuda.

-Solo me lo dices tu- sonreí con superioridad.

-Porque no dejas de ordenarme cosas- bajó ligeramente la cabeza para poder rozar mis labios muy suave, mientras pasaba sus dedos por encima de mi abdomen y rozaba uno de mis pechos.

-Me gusta mandarte-admití llevando mi brazo a su cuello para acercarlo más a mi y que nuestros cuerpos quedaran aun más juntos.

-Ya lo se ya- sonrió- y yo soy un tonto por caer..- abandonó mis labios y bajó besando mi clávicula hasta mi pecho izquierdo.

Y empezó a... besar.. lamer.. tocar.. besar, siempre hacia lo mismo y siempre me volvía igual de loca, y todo desde que había perdido la vergüenza de mi cicatriz con Gavi.Había sido un gran paso para el, aunque no me lo dijera directamente, porque le encantaba esa parte de mi cuerpo, y era la que más mimaba de todas.