Destino compartido || Gavi ||

Parte 62-¿Corazón o razón?

Recordad dejar estrellita si queréis más <3

NARRA BEA

La situación podía conmigo. Ya no solo el tema de mi prima Ana, sino mi salud.

No entendía como Gavi sabiendo lo malita que estuve tras el trasplante de corazón se atrevió a eliminar los mensajes y llamadas de Manuel por celos. Porque el mismo lo había admitido, los borró por celos. ¿Celos de qué? Ni si quiera le había dado razones para que estuviera celoso. Manuel era mi médico, nada más.

Y si con eso no tuviera suficiente.. ver a mi prima desnuda parada frente a Gavi... y el sevillano con los labios pintados de rojo... Quería creerlo a el, quería pensar que ella había manipulado una vez más la situación, ¿Pero cómo hacerlo cuando la persona que más quieres borra unos mensajes cruciales para tu salud?

Salí de la consulta de Manuel con una sensación rara en el cuerpo. Este último mes había estado demasiado cansada, con la tensión por los suelos. Interiormente sabía que algo iba mal, aunque no quería admitirlo a mi misma. Además, quise pensar que si algo iba mal, Manuel me llamaría para decírmelo, justo como hizo, pero no tuve opción de saberlo porque Gavi me la arrebató, y ahora mismo no sabía que hacer.

En una situación normal lo primero que hubiera hecho era acudir a Gavi,el era mi pilar, y en estos momentos necesitaba su apoyo más que nunca. Estaba aterrada sin saber que hacer, sintiendo que tomara la decisión que tomara, iba a repercutirme tanto positiva como negativamente. Pero esta no era una situación normal, no después de lo que hizo. No tenía a Gavi en esto, por mucho que me doliera admitirlo, estaba sola.

Y esa soledad me había llevado a hacer una locura. Porque dentro de los ciento de ideas locas que cruzaron mi cabeza, pensé que la mejor era verme parada frente a la estación de Sants, esperando un tren para ir a Madrid.

Sí, como una cobarde iba a buscar la ayuda de la persona que me había echado de casa, y que además había llamado a mi prima para joderme la vida ¿Pero que más podía hacer? Estaba sola y no podía tomar una decisión así.

Mi móvil volvió a sonar una vez más como lo había estado haciendo los últimos 3 días. Gavi no dejaba de llamarme como un loco, con cientos de mensajes como si supiera que algo iba muy mal, y una vez más colgué la llamada. Posiblemente cuando se enterara de lo que iba a hacer jamás me lo perdonaría, pero a estas alturas, ya todo me daba igual y daba nuestra relación por perdida.

Mi tren salía en exactamente media hora, por lo que me dispuse a pasar el control de equipaje cuando escuché que alguien me llamaba a lo lejos.

-¿Bea?-la voz de Aurora resonó en mis oídos como si se tratara de martillos. ¿De todas las personas que me podía encontrar, por que tenía que ser la hermana de mi novio? Aunque tampoco era algo tan descabellado, porque ella volvía a Barcelona de Sevilla esta semana.

Intenté ignorarla en vano, porque Aurora siguió insistiendo y llamándome hasta que me alcanzó y cogió mi brazo obligándome a que me girara.

Su sonrisa desapareció al ver mi cara. A penas había pegado ojo estos días y además, debía de tener los ojos hinchados por no dejar de llorar.

-Bea, ¿Qué pasa?-preguntó preocupada.

Miré hacia otro lado nerviosa sin saber que responder. Tenía mucha confianza con la hermana de Gavi, al igual que el, pero no sabía hasta que punto el sevillano le había contado nuestra nueva crisis.

-¿Es Gavi? ¿Qué te ha hecho?-insistió la sevillana cogiendo mi brazo y guiándonos hacia un rincón de la estación de Sants.

-No es nada.. - mentí casi sin palabras.