Habían pasado dos meses. Dos meses de trabajar para Marcel. Dos meses de continuas excusas para ocultar a mis hermanos. Dos meses de tolerar que no sea capaz de pronunciar mi nombre, o en el peor de los casos que encuentre alguna forma de retorcer mi nombre con tal de no pronunciarlo como corresponde. Y, mira que ganas de decirle "sanguijuela" no me faltan, pero me lo guardo porque mis padres me enseñaron a ser educada; así que...por respeto a las sanguijuelas me quedo callada, y porque realmente necesito el trabajo.
"Carla, tráeme un café" "¿Por qué tardas tanto?" "¿Por qué eres tan estúpida?"
Esta última es su frase de cabecera.
Lo odio.
De verdad, no sé cómo se me pasó por la cabeza creer que él podría ser el hombre de mi vida.
Nosotros no tenemos nada en común.
Y no es el hecho de que yo no tenga dinero (sí, quizás es eso).
Pero, honestamente no creo que nadie tenga nada en común con un tipo como él.
Una vez lo dijo mi madre: "Habrán personas que te parecerán atractivas, pero no van a gustarte. No le llames amor a cualquier cosa". Supongo, que este es el caso, quiero decir...Marcel es atractivo, no creo que deje de serlo nunca, pero es tan malditamente arrogante que todo lo bueno que tiene (si es que lo tiene), queda ensombrecida por todo lo mierda que puede llegar a ser con sus actitudes.
Cuando el reloj marcó las ocho de la noche, pude dar por hecho que otro día había terminado de manera satisfactoria. Los niños se escondían muy bien, cosa que facilitaba bastante que no nos metamos en problemas.
Por supuesto, no siempre se puede contar con tanta buena suerte, o simplemente que todo lo bueno me ocurra a mí.
─ Pero, ¿Qué le ha pasado al niño?─ he dicho, con sorpresa.
Sebastià acaba de cumplir el primer año a mediados de enero, por lo tanto su deseo de curiosear y explorar el mundo se hace mayor a cada momento. Con suerte, los niños usualmente se encargan de que no cause problemas, pero no siempre es así. Digo, hay momentos donde simplemente las cosas pasan y nada se puede hacer; con eso me refiero a que el niño se ha dado contra el suelo.
Nada de otro mundo.
Lo normal en un niño pequeño que está aprendiendo a caminar.
─Tuvo un accidente─ Gema dijo.
─ Le pedimos que no lloré pero no hizo mucho caso─ Toni añadió, como si estuviese molesto porque su hermano no colaboraba guardando silencio.
Toni, gracias por el dato innecesario del día.
─Lloró un poco─ Joan admitió, como tratando desdramatizar el momento─, pero no fue grave. Lo calmamos rápido. No te preocupes.
Me siento mal.
Estos niños están con tanto trauma por el asunto de no hacer ruido.
─Lo importante es que él está bien─ dije, acariciando la cabeza de Sebastià─. Es tarde. Estoy muy cansada. Hablemos mañana.
Caminé bostezando hacia el pasillo que dirigía a las habitaciones cuando el timbre sonó.
Sin decirnos palabra, todos fueron a esconderse a los lugares que acordamos. Sí, todos tenían un lugar estratégico donde esconderse. Siempre he pensando esto: "Si descubren a uno podre explicarlo con alguna historia tonta, pero si descubren a todos estaré en grandes problemas"
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¿Cómo cazar a un millonario?
ChickLitGracias, gracias :) #2 30/08/16 #1 10/09/16 #1 22-23/09/16 #1 25-27/09/16 #3 28/09/16 Código de registro: 1610129429911