Capítulo 108| Noticias, chismes y problemas

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Pasó algo terrible.

¿Lo extraño?

No me sucedió a mí.

Estoy empezando a preocuparme, normalmente, todo lo malo del mundo me sucede a mí, al grado que ha dejado de preocuparme, solo espero los problemas y trato de resolverlos como creo más conveniente. Sin embargo, esta mañana no solo el periódico sino todos los diarios se han encargado de ventilar una noticia que puso a la familia de Marcel de cabeza. ¿Recuerdas ese asunto de Hacienda? Sí, el drama de padre de Marcel. Bueno, ha salido en el periódico a lo grande.

Como esta es la primera vez en mucho tiempo que "el gran problema" no tiene que ver conmigo o no lo he causado yo he decidido hacerme a un costado y ser una simple espectadora. Pero, nunca puedo ser una simple explotadora sino el centro o la autora intelectual de esta tragedia.

¿El problema? El padre de Marcel me acusó de ventilarlo en los periódicos porque lo odio. Es verdad, me cae mal, pero nunca haría eso. Ni siquiera tengo el número de algún periodista. Créeme que si lo tenía como mínimo exponía a Marcel por explotación laboral.

― ¡Nos traicionaste! ¿Cómo pudiste hacer algo como eso? Soy un anciano― se quejó por enésima vez el padre de Marcel.

Él dice que es un "anciano" como si tuviese ciento veinte años encima. Créeme ese Señor tiene mejor salud que yo o cualquier treintañero promedio. ¿Por qué tiene exagerar tanto? No es como si estuviese muriéndose. Además, ¿Por qué se ofende tanto? Si no es verdad solo es cuestión de dar declaraciones.

― Ya le he dicho que no fui yo― aseveré con firmeza.

No tengo miedo del padre de Marcel.

Es más, puede enojarse todo lo que quiera, el problema aquí es Marcel. Él no ha dicho nada desde que empezamos la discusión hace más de una hora.

─¿Y porque debemos creerte? Tú me odias por no aceptar la relación que tienes con mi hijo. Siempre supe que había algo malo contigo.

─ ¡No fui yo!─ he dicho con fuerza─. ¿Por qué querría ponerme en su contra? ¿Qué ganaría?

―Alejarme de mi familia, de Marcel. Lo único que quieres es mi dinero― Lluís volvió a acusarme.

Señor, créame, estoy aquí por cualquier cosa menos por dinero. Solo piense en el tipo de hijo que tiene; solo el amor hace que uno quiera pasar el resto de su vida con él.

─ ¡Dejen de pelear de una vez! ─ Marcel levantó la voz, haciendo que tanto su padre como yo nos preocupemos─. Papá, ¿Puedes salir un momento afuera? Necesito hablar a solas con Clara.

─ ¿Me estas echando? A tu padre―el hombre se quejó poniéndolo su mano sobre su pecho―. Creo que no me siento tan bien... ¿Por qué no estas gritando o tratando de sostenerme?

Así no se puede, Señor.

Entonces, pasó lo peor.

¿Adivina?

Biel interrumpió la conversación diciendo que la policía estaba esperando al padre de Marcel en la sala. Puedes imaginar el show que se montó el hombre para que no se lo lleven. Siempre debes entregarte. Lo sé por experiencia; y no hagas enfadar a la policía. Digo, algunos son amables si pones un poco de tu padre.

En fin.

¿Te acuerdas que Marcel quería que hablemos a solas? Pues, lo hicimos. Pensé que lo pasaría por alto. Él dijo que no se iria a la estación sin hablar conmigo.

Estoy perdida.

─ ¿A quién le contaste lo de mi padre?― Marcel me preguntó, casi como confirmando que me fui de bocas.

─ ¡Que no he sido yo!─ insistí─. ¿Por qué me estas acusando?

─ Solo tres personas estábamos al tanto de todo. Mi padre, tú y yo.

― Mentira. Toda la familia lo sabía― me defendí.

Porque toda la familia lo sabe, ¿verdad?

―Sabían del problema pero no de todos los detalles. No de la nueva investigación.

Entonces, trato de hilar mis recuerdos uno por uno; solo somos tres personas y es un hecho que Marcel o su padre no buscarían periodistas para ventilar la interna familiar. Solo podría ser yo. Pero, no fui yo. Lo juro. No me gusta el padre de Marcel pero jamás le haría algo como eso.

─A lo mejor tu padre se lo comento a alguien. A veces las cosas se dicen de casualidad― intenté defenderme.

─ ¿Y no se lo habrás dicho a alguien de casualidad?

Me he quedado callada por he empezado a dudar.

Marcel se apresura a decir con la voz irritada─. ¿Tanto te costaba mantener la boca cerrada por una vez en toda tu vida?

─ Pero, pero...no lo hice.

─ Eres capaz de jurármelo por tus hermanos─ Marcel dice y puedo sentir la presión de su mirado sobre mí. No estaba actuando como el hombre que amo sino como ese niño malcriado que conoci cuando vine a firmar mi contrato.

Dudosa y con los nervios a flor de piel he dicho─. Quizás puede que yo lo haya mencionado sin querer, pero no estoy segura.

─ ¿No recuerdas si lo mencionaste "sin querer"?─ Los ojos de Marcel se encienden y noto que aprieta fuerte los puños.

─Pero, pero, pero si tu padre no ha hecho nada malo no debería ponerse en ese plan. Vamos, que esto entre ricos es normal. Lo he visto mucho en la televisión─ traté de poner paños fríos a la situación.

Marcel se gira sin decir una palabra.

─ ¿A dónde vas?

─ A la comisaria. Con mi padre─ me contesta cortante.

─Marcel, no puedes actuar así─ le digo colocándome delante de suyo.

Marcel dice con la mirada fija en el vacío─. No quiero hablar contigo en este momento.

─No. Hablemos.

─ ¿De qué vamos a hablar? ¿De cómo traicionaste mi confianza otra vez?― aseveró. Le ha dolido en el alma que se me haya escapado el chisme.

─ ¡Marcel! ¡Deja de portarte como un idiota! Sé un adulto por primera vez en tu vida.

─ He sido leal e incondicional frente a cada uno de tus problemas. ¿Por qué tratas de cargarme con algo que es culpa tuya? No quiero hablar contigo. Estoy muy decepcionado de ti.

― Solo quiero explicarte

─No quiero escucharte ahora. Mi padre me necesita. Tú claramente no me necesitas.

No he podido decirle palabra hasta que chille─. ¡Lisse! Se lo comenté a ella. Pero fue causalidad, pensé lo sabía, fue una situación confusa. Ella me prometió no decir nada.

─ Lisse. Entiendo. Sin embargo, eso no te hace menos culpable. Te dije que era un secreto importante.

Le he interrumpido con los ojos aguado─. Marcel, ¿Te estás oyendo? Estas lastimándome con tus palabras.

─ ¿Acaso piensas que todo esto me duele a mí?

Si te pones en ese plan parece que sí.

― Lo siento. No puedo decir otra cosa―dije. En este punto solo puedo aceptar mi derrota―. Yo lo siento tanto, Marcel.

― Yo lo siento más, Clara. Por favor, no me llames o busques. Ahora, solo me importa mi padre― dijo, antes de irse.

¿Está terminando conmigo?

¿Marcel terminó conmigo?

Despiértenme de esta pesadilla. 

¿Cómo cazar a un millonario?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora