Hacerle un favor a un maestro nunca represento una molestia para Butters, en especial si éste era más una orden que un favor. En Chicago los profesores siempre le pedían que se hiciera cargo de ciertas cosas para todo el grupo y él siempre aceptaba de manera educada, pues pese a que se ganaba aún más el desagrado de sus compañeros, nunca represento una verdadera molestia cumplir con los favores.
Simplemente si podía, ayudaba.
Por eso cuando la profesora de biología los envió a Kyle y a él a sacar fotocopias, no se molesto, es más, pensó en eso como una buena distracción para dejar de pensar en todo lo que había pasado esa misma mañana.
Su padre había hecho un pequeño alboroto, le había gritado enfrente de la escuela y quería olvidar que más de un chico lo había visto.
Sin embargo no se imagino que el ir por unas inofensivas fotocopias, lo iba a poner en uno de los lugares más incómodos donde había estado en toda su vida. Podía sentir la tensión y pesadez que desprendía el aura de Kyle.
El pelirrojo no había dicho ni una sola palabra en todo el camino del salón a la sala de copias, tampoco hablo cuando estaban sacándolas. Butters normalmente apreciaba el silencio, la mayor parte del tiempo más que incomodarlo le otorgaba tranquilidad pero en ésta ocasión no era así.
Kenny había dicho que algo les pasaba a Kyle y a Stan cuando llegaron al aula y aunque al principio no pudo entender del todo cómo podía dar ese juicio, sí noto que el aura de sus dos amigos era pesada y tensa. Kyle no era muy hablador a comparación de otros chicos como Clyde o como el mismo Kenny pero siempre era gentil e incitaba a una conversación, por eso su silencio le hizo ver que Kenny tenía razón.
Quería preguntar pero no se sentía del todo seguro de hacerlo, no quería molestar a Kyle si no se sentía bien pero tampoco creía poder soportar esa tensión en el ambiente. Ya habían terminado con las copias y ahora iban de regreso al aula y Kyle seguía sin decir nada.
Butters presiono las hojas contra su pecho. Comenzaba a ponerse nervioso, no sabía qué hacer y esa inseguridad sólo lo hacía recordar lo ocurrido con su padre, haciendo que se sintiera aún peor, tendía a recordar todo lo que le había salido mal cuando se sentía nervioso e inseguro. El recuerdo de lo ocurrido con Eric apareció en su mente junto con el apoyo que Kyle le mostro y se dijo así mismo que si Kyle lo había apoyado y tratado de animar cuando la estaba pasando mal, él debía hacer lo mismo.
Después de todo, para eso estaban los amigos.
-K-Kyle - su voz sonó más nerviosa de lo que quería.
Por primera vez en todo ese rato, el pelirrojo le dirigió la mirada directamente.
Eso hizo que el rubio se pusiera un poco más nervioso y dudara de seguir hablando pero se obligo a permanecer firme.
-¿T-Te encuentras bien? - pregunto tratando de no tartamudear - h-has estado muy callado y... no te ves bien -.
Kyle abrió un poco la boca, prácticamente sólo despegando sus labios en un gesto de sorpresa y desvió la mirada. Una sonrisa apagada se formo en sus labios al pensar en lo obvio que debía verse para que Butters se diera cuenta. Pensó en mentir por un momento pero había comprobado que en esos momentos, realmente necesitaba de un amigo.
-A decir verdad... no, no estoy del todo bien - respondió con aquella sonrisa de pena.
Eso preocupo en demasía al rubio y lo demostró torciendo sus cejas en un gesto de genuina consternación.
-¿P-Puedo hacer algo para ayudarte? - pregunto casi de inmediato - puedes hablar conmigo, es decir... s-si te sientes bien... - tenía miedo de meter la pata y terminar enfadándolo.
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Lo Que Elegí - South Park
FanfictionLeopold "Butters" Stotch vuelve a Denver, su ciudad de nacimiento, luego de vivir 10 años en Chicago. Ingresa en la preparatoria South Park para su ultimo año antes de entrar a la universidad, allí conocerá a nuevas personas y alguien que será sumam...