Lo Que Elegí - South Park

Capítulo 67: Cambios por Afrontar.

-¡Butters! -.

Stotch dejo de batir la mezcla cuando escucho la alegre voz de Karen. La pequeña había salido del cuarto de descanso y se abalanzo a él en un efusivo abrazo.

-¡Termine mi tarea! - exclamo la niña con una gran sonrisa de orgullo.

-¿De verdad? - Stotch la recibió con gusto y puso sus manos sobre los hombros de la pequeña en un gesto de correspondencia al abrazo - muy buen trabajo, Karen, terminaste muy rápido -.

-¿Ya puedo ayudarte a hacer postres? -.

-¡Por supuesto! - le acarició un poco el cabello - ve por tu delantal y lávate las manos, te estaré esperando -.

Karen no espero ni un minuto menos, se separo de él y fue corriendo a prepararse.

-Veo que se han vuelto muy buenos amigos - comento Chef con una de sus acostumbradas tranquilas sonrisas.

-Sí - el chico se sonrojo un poco. Pese a que apreciaba a Karen, era un poco vergonzoso admitir que se volvió amigo de una niña pequeña - ella es muy dulce -.

-Lo es, es como un ángel - el gesto de Chef disminuyo, su sonrisa se volvió melancólica - y pensar que a pesar de todo lo que ha vivido, sigue sonriendo de esa forma -.

El chico frunció las cejas un poco confundido. Sabía que Karen no había tenido una vida muy fácil, después de todo Kenny le había contado que vivieron en la pobreza con sus padres, además de eso habían sido abandonados por su hermano y aunque Karen ahora estuviera sólo con Kenny, su situación no era del todo buena.

Chef tenía razón, para que Karen fuera capaz de sonreír de esa manera pese a todo, significaba que era un verdadero e inocente ángel.

-Me alegra que se hayan hecho amigos - dijo el cocinero.

-A mi también - murmuro sonriendo un poco.

-¡Ya estoy lista! - Karen volvió a aparecer en la cocina, ya con su delantal puesto.

-Entonces empecemos - Butters le sonrió gentilmente.

Por un momento, por la cabeza de Stotch paso el pensamiento de que, si sus padres se enteraban de todo lo que había pasado, no sólo perdería a sus amigos y su trabajo, sino que también no podría volver a ver la sonrisa de Karen.

Tenía que tomarse realmente enserio la propuesta de Kenny.

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-No era necesario que me ayudaras con la cena, Token, eres nuestro invitado -.

-Por mí no hay ninguno problema -.

-Por mi sí ¡debíamos seguir con la otra película! -.

Judy y Token se giraron y vieron a Clyde sentado en la mesa del comedor con los brazos encima, prácticamente desplomado sobre la mesa, sus mejillas estaban infladas y su ceño fruncido.

-Vamos Clyde, habrá otras ocasiones - le dijo Black volviendo a su labor de ayudar con la cena.

-¡No es verdad! ¡Me costó mucho convencerte para quedarte conmigo! - exclamo un poco molesto.

-Token, el bebé llorón no dejara de hacer su berrinche si no vas con él, por nuestro bien y el de la paz de la casa... siéntate a ver la película con él - Judy le suplico al joven a su lado.

-Si lo dejas un rato, parara - Token sonrió levemente.

-¡No me traten como un bebé! -.