Una semana más.
Una semana más había pasado desde que Tweek se alejó de Craig.
Y esa semana fue mucho más difícil que las otras dos que llevaban sin hablarse.
¿Por qué fue más difícil?
Porque Tweek comenzó a darse cuenta de ciertas cosas.
La principal de ellas era que extrañaba a Craig, lo extrañaba demasiado.
Lo extrañaba más de lo que él mismo quisiera, pero no podía evitarlo.
Simplemente ese sentimiento surgía por sí solo.
Y él no podía detenerlo. Por más que lo intentara, no podía detenerlo.
Su estado de ánimo empeoro, ya no podía fingir del todo que estaba bien, sus ánimos no eran los suficientes para poder fingirlo. Antes hablaba en la escuela con Clyde, otras también con Token, a veces caminaba con Clyde de camino a la escuela pero desde el día uno de esa semana, dejó de hacerlo.
Desde la tarde donde se encontró con Clyde luego de ver a Craig, no había sido el mismo. Sus sentimientos tampoco habían sido los mismos.
Todo había cambiado, se había vuelto más gris y más confuso, tanto que la cabeza de Tweek ya no podía con la bruma, no podía pensar con claridad sin sentirse mal.
-¡Señor Tweak! -.
El rubio de ojos verdes levantó la mirada asustado cuando escuchó aquel grito.
Otra de las cosas que empezó a suceder desde esa semana, era que se quedaba inmerso en sus pensamientos. La bruma en su cabeza era demasiado grande e intensa, tanto que se apoderaba de él y lo asilaba de todo lo que pasaba a su alrededor, como estaba pasando en esta ocasión.
-¿S-S-Sí? – respondió tembloroso.
-Es la sexta vez que te llamo – le reclamó el profesor - ¿no me estas escuchando? Estoy pasando lista -.
-A-A-Ahh... - los nervios se apoderaron de él de inmediato, desde la punta de sus pies hasta el último de sus cabellos y se puso más nervioso cuando miró a sus compañeros de clase.
Muchos chicos lo miraban, algunos sonreían riéndose en silencio, otros lo miraban como si fuese un bicho raro. Era el foco de atención de todos en el aula, cosa que detestaba y le ponía extremadamente nervioso.
-A-Ah... a-ah... - abrió la boca tratando de decir algo pero nada salía. Los ojos de los demás lo ponían cada vez más nervioso e incrementaban sus temblores.
-¿Vas a responder sí o no? Estas atrasando a todos – le llamó la atención el profesor, ya con la paciencia al límite.
Tweek intentó hablar de nuevo pero por más que abría la boca, sólo salían balbuceos incomprensibles. Fue tomado por sorpresa, estaba inmerso en sus más profundos pensamientos y de repente fue arrastrado a la realidad por un grito, todos los miraban como si fuese una atracción y se reían de él. Le estaba resultando imposible calmar sus temblores, pues no importaba hacia donde voltease, todo el mundo lo estaba viendo.
Quería irse, quería salir corriendo de allí e ir a donde nadie le prestara atención, y estuvo a punto de hacerlo, hasta que se topó con un par de ojos azules.
Craig lo estaba mirando y lo hacía de una forma distinta a los demás. Estaba de espaldas y sólo lo miraba de reojo pero lo estaba viendo y él podía verlo, podía ver sus ojos azules.
Se preguntaba porqué con él era distinto ¿Por qué no le perturbaba que Craig lo mirase? ¿por qué se sentía mejor cada vez que lo hacía?
¿Por qué sus fríos ojos azules le brindaban una calidad tan fuerte que se sentía más tranquilo con sólo mirarlos?
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Lo Que Elegí - South Park
FanfictionLeopold "Butters" Stotch vuelve a Denver, su ciudad de nacimiento, luego de vivir 10 años en Chicago. Ingresa en la preparatoria South Park para su ultimo año antes de entrar a la universidad, allí conocerá a nuevas personas y alguien que será sumam...