-El Rector Cienfuegos Aius -
El Instructor Baluarte Rojo Tibaste, llamó a la puerta dando un par de toques.
- Disculpe Rector Cienfuegos, soy el Instructor Baluarte Rojo Tibaste. Vengo acompañado de un joven. ¿Podemos pasar?
Preguntó el Instructor Baluarte Rojo, con ganas de mostrarle el hallazgo de un joven tan prometedor.- Adelante, pueden pasar, Instructor Baluarte Rojo.
Dijo con voz solemne el Noble Rector Cienfuegos.Este estaba extrañado de que el Instructor Baluarte Rojo acudiese con esa solicitud, pues era la primera vez que le recomendaba a alguien para ser acogido por la Institución de la villa y eso le causó expectación.
- Con su permiso.
Dijo respetuoso el Instructor Baluarte Rojo Tibaste, mientras abría la puerta del despacho.El Instructor Baluarte Rojo, entró en el despacho del Noble Rector Cienfuegos y Arin, entró detrás de él.
El despacho era espacioso, con grandes ventanales. Había bastantes plantas, todas ellas diferentes entre sí y varios cuadros de antiguos Rectores.
Cerca de la entrada, había un elegante escritorio de madera, en la que había una placa con el nombre del Rector en ella.
Tenía un sillón tras el escritorio y otras dos sillas, un perchero con una toga carmesí con detalles y el escudo familiar de su familia en bronce.
Además de una Insignia de Inquisidor Amarilla, color que acreditaba haber completado con éxito las dos primeras Capas del Sagrado Templo del Poder. O lo que es lo mismo, los primeros 20 pisos.
Aunque con su poder actual no tendría demasiados problemas en superar la 3ª Capa.
A los pies del perchero, había un calzado de polímeros de aspecto cómodo, de color rojo con los acabados en bronce.
Al fondo de la sala, el suelo estaba escalonado. Y había una zona octogonal acolchada, enmarcada con un mineral de tonos azulados.
Sentado en el octógono, se encontraba el Noble Rector Cienfuegos, en pose de meditación.
Este tenía cuarenta y dos años, de unos dos metros de altura, pelo corto pelirrojo, con zonas anaranjadas, y ojos azules.
Llevaba el torso al descubierto y un pantalón de polímeros ligeros, típico de la Escuela Cultivo del Poder de Villa Fortaleza, de color rojo con los detalles en bronce.
- Joven Arin, le presento al Noble Rector Cienfuegos Aius. Él es de la Familia Noble Cienfuegos y dirige la Institución Cultivo de Poder de Villa Fortaleza. Es un Espiritualista Inquisidor que no hace mucho ha entrado en la Etapa 6 del Tercer Orden Espiritual...
Rector Cienfuegos, le presento a Arin. A pesar de ser tan joven trabaja la peletería, además de ser estudiante de medicina, botánica y alquimia. Tiene capacidades Kinéticas, que a mi ver, podrían ser de Segundo Grado Psíquico. Mi intención es apadrinarle en la Institución y por eso se lo traigo, para que pueda estimar su potencial y valorar mi solicitud de admisión.
El Instructor Baluarte Rojo Tibaste, hizo las debidas presentaciones, introduciendo un poco a cada uno, para que pudieran saber un poco del otro.- Es un placer conocerle Noble Rector Cienfuegos Aius y muchas gracias por recibirme.
Dijo rápidamente Arin, inclinando un poco su cabeza en señal de respeto.El Noble Rector Cienfuegos Aius abrió los ojos, examinó brevemente a Arin, se puso en pie y devolvió el gesto de respeto.
- El placer es mío joven Arin... Y puede decirme simplemente Rector Cienfuegos... Así que el Instructor Baluarte Rojo le recomienda como apadrinado de la Institución... Interesante... Ya que ha sido avalado por el Instructor Baluarte Rojo, solo con eso ya estoy de acuerdo en que la institución le apadrine. Entonces, para poder evaluar un poco sus capacidades ¿Le importaría a usted mostrarnos un poco su control Kinético? ¿podría, por ejemplo, levitar mi escritorio?
Preguntó el Noble Rector Cienfuegos Aius, con un tono amable. Al cual se le notaba un poco expectante.
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Ad Originem
FantasyAd Originem, comienza cuando sólo existía La Nada y en medio de esta, surge El Origen de Todo. Con la consecuente creación del Universo, los Dioses que lo rigen y las Razas que comenzaron a poblarlo, hasta llegar a los Seres Humanos. Después de cono...