Ad Originem

Ad Originem Capítulo 128 - Dentro del Laberinto

-Dentro del Laberinto-

     El razonamiento de Arin, parecía bastante lógico.

Era prácticamente irremediable querer encontrar alguna pista, antes de escoger un camino.

Al encontrar una pista rebuscada, el instinto te dice que vas por el buen camino y escoges esa dirección.

Pero Arin no se detuvo ahí y siguió observando. Dándose cuenta que había tres sutiles indicaciones.

Lógicamente, el Señor de la Ciudad, no necesita que le digan por dónde tiene que ir en su propia Ciudadela.

Por lo que, por simple deducción, no debía seguir ninguna de las indicaciones.

- Si la trampa estaba en seguir las indicaciones de la estatua, tampoco podemos confiar en que el tercero sea el camino, ya que podría tratarse de otra trampa y el camino real, podría ser un camino oculto.
Indicó Pluviam Rao, buscando entre las paredes y el resto lo imitaba.

- Por eso dije que no deberíamos desperdiciar tiempo en elegir un camino y coger el que sea. Porque no hay nada seguro. Pero está claro que los detalles en la estatua, están hechos de manera intencionada, para indicar un camino disimuladamente.
Contestó Arin, convencido de que era así.

- Confío en el criterio de Arin, tiene un sexto sentido para estas cosas. Voto por coger la tercera entrada.
Expuso Cienfuegos Amia, la cual fue secundada por Cieloazul Ibeli y al final, fue seguido por todos.

Los chicos dejaron de buscar posibles pasadizos ocultos y accedieron por la tercera entrada, donde el camino se ensanchó y se hizo más alto.

Tras avanzar unos pocos metros, Arin se detuvo en seco.

- Parad todos... ¿Lo notas, Ibeli?
Preguntó Arin deteniéndose.

- Justo comenzaba a notarlo, cuando has dicho que nos paráramos.
Respondió Cieloazul Ibeli, dándose cuenta de que la 'Percepción del Peligro' de Arin, parecía estar un poco más desarrollada que la suya.

- ¿Qué notáis?
Preguntó Cienfuegos Amia, con cierta envidia de ambos Telépatas. Ojalá ella también lo fuera...

- Notamos peligro. Aquí debería haber una trampa. Además, mirad el suelo con restos de cadáveres y flechas.
Contestó Cieloazul Ibeli, observando atentamente esa zona.

Arin concentró un poco de Poder Kinético en su mano y liberó un 'Revés Kinético' hacia el suelo, accionando el mecanismo de una trampa y cayendo una descomunal lluvia de flechas de metal.

- Me da que este no es el camino. No hemos avanzado ni diez pasos y ya hubiésemos caído en una trampa.
Dijo Pluviam Loaris convencida de haber entrado por el camino equivocado.

- ¿Creéis que debemos volver?
Preguntó Impetus Hitiar un poco asustada por el tipo de trampa que era.

- Todo lo contrario, Hitiar. Ahora estoy aún más convencido de que vamos por el buen camino. Ya que, si fuera un camino equivocado, hubiesen esperado a que nos adentráramos un poco antes de poner una trampa. El ponerla tan rápido y tan exagerada, diría que esta hecha adrede para desalentarnos a seguir por este camino. Ya que empezar de nuevo, solo nos costaría unos segundos. Al menos es lo que haría yo si fuera ellos.
Expuso Arin, mientras seguía caminando hacia adelante.

- Entiendo por qué tu equipo confía tanto en tu criterio. El Armorum Caelesti (Equipo Celeste) te sigue, Arin.
Afirmó Atori sin dudar, siendo secundada firmemente por sus compañeros.