Cien millones de razones para amarte

XLIII

Los días comenzaron a pasar entre investigaciones, fiestas, reuniones y otros eventos que mantenían la agenda llena a más no poder.

Esa mañana Minhyun había decidido vestirse con unos jeans y una remera se algodón en lugar de alguno de sus elegantes trajes, ya que sabía que, al menos hasta las 7:30 de la noche estaría en el cuarto de archivos de nuevo moviendo cajas y carpetas del estante con el apellido 'Neeson'. Agradecía al cielo tener la condición física para poder subir y bajar las escaleras con las pesadas cajas en la parte superior del mueble o, a sus casi 33 años le sería imposible hacerlo solo; sus padres siempre decían que era demasiado delgado, pero en ese momento se probaba a sí mismo que tenía la complexión y fuerza perfectas, así como la ventaja gracias a su altura.

— Listo. Son las últimas. —Exhaló al volver al suelo con cuatro cajas en sus manos. Las puso en el suelo y se peinó el fleco hacia atrás. — En alguna tiene que haber algo, lo sé, tiene que....

Comenzó a abrir las cajas y una a una comenzó a revisarlas encontrando más información respecto a los antiguos miembros de la familia Neeson.

— Parece que muchos tenían contacto con personas como Mansom, criminales. —Dijo para sí mismo luego de revisar varias carpetas con nombres y direcciones de algunos de los criminales conocidos en diferentes partes de Reino Unido. — La Vizcondesa Sally Neeson vivió en Liverpool toda su vida y según este directorio que tiene su nombre, conoció y parece que se comunicó con al menos 12 criminales de la zona. El Vizconde Robert Neeson, abuelo de Neeson, uno de los más jóvenes en morir, tenía... 33 años según su acta de defunción, y su causa de muerte... —Revisó la hoja y asintió cuando encontró el espaciado. — quemaduras de tercer grado. Seguramente durante el incendio incontrolable que pudo haber matado a los entonces tres nobles más cercanos a la corona. —Dejó las hojas ordenadas nuevamente a su lado y abrió la siguiente caja. — Esto no me sirve de mucho, pero es mejor que nada, al menos tengo por seguro que no sólo Neeson se ha involucrado con criminales... —Alzó la mirada recordando algo. Se puso de pie y corrió hacia el estante con el apellido de su familia. — Si Hwang Sook les dio el título, en algún momento tuvo que haberlos conocido y por lo tanto debe haber algo que declare eso. —Acercó las escaleras al estante y comenzó a buscar entre las hojas suelas, después en las carpetas y al no encontrar nada suspiró preparándose para bajar más cosas. Subió las escaleras y comenzó a mover, apilar y bajar las cajas y las acomodó en un vagón que había acercado antes, cuando lo llenaba lo suficiente las llevaba hasta el escritorio cerca de la entrada de la pieza y regresaba por las demás. En su último viaje se llevó también la caja que había dejado el profesor Ringeck y después de acomodarlas junto a las demás y dejar la caja más pequeña sobre el escritorio volvió al primer pasillo donde estaba investigando, ordenó y guardó los documentos que ya no le harían falta, volvió a acomodar las cajas de los mismos e hizo un par de viajes más para llevar el resto hasta el escritorio. Se sentó volviendo a peinar su cabello hacia atrás y se dio unos minutos para recuperar el aliento antes de mirar atento la pequeña caja sobre el escritorio. Tomó las tijeras que había llevado consigo para romper las cintas de las cajas y rompió la de esta (la cual había repuesto el mismo día que leyó la carta). Se sintió ansioso de saber lo que había, pero también se sentía muy nervioso. — De acuerdo, Minhyun, tú puedes. —Volvió a abrir la caja y sacó la hoja que antes ya había leído y retiró el plástico que cubría el resto. — ¿Qué es esto? Comenzó a sacar algunas cajitas más descubriendo poco a poco algunas hojas acomodadas debajo. Las tomó y comenzó a revisarlas. — "Bueno, aquí están las pruebas de que Neeson y Mansom mantenían contacto." —Cruzó por su mente al ver varias fotografías ya un poco amarillentas por el tiempo. Tomó otra de las hojas y también las revisó. — "Es un acta de matrimonio. Es el acta de matrimonio del Vizconde y la Vizcondesa. ¿Esto servirá aquí?" —La dejó a su lado y sacó el siguiente papel. — Otra acta de matrimonio. —Reconoció apenas miro el encabezado de la hoja y la dejó nuevamente a su lado para tomar la siguiente. — Y... —Su rostro volvió a mostrar impresión. — un acta de defunción. Es del Conde Gregory Maccshton de Oxford. ¿Qué hace esto aquí? —Su mirada se centró en la fecha de muerte y prontamente tomó de nuevo el acta de matrimonio de los Vizcondes. — Ellos se casaron una semana después, ¿será que Neeson también tuvo que ver con la muerte del Conde. —Revisó la causa de muerte del Conde. — Un disparo a la cabeza. —Su mente comenzó a conectar algunos hechos y tomó la segunda acta de matrimonio. Se cubrió la boca apenas vio los nombres. — "La Vizcondesa Viviana... se casó con el Conde Maccshton." —No podía estar más sorprendido ya que nunca nadie había mencionado dicho suceso. — Claro... tiene lógica, Maccshton se casó con la Vizcondesa, pero cuando él murió, ella se casó con el Vizconde... la pregunta es... ¿por qué? —Buscó entre las demás hojas dentro de las cajas leyéndolas rápidamente hasta dar con algo que indudablemente dio con algo que lo dejó atónito: un acta de acusación de secuestro. La leyó y la releyó varias veces sin poder creerse lo que veía: — Neeson fue acusado de secuestrar a la Vizcondesa después de la muerte del conde, estuvo bajo investigación y para zafarse se casó con ella, cuando ella dio su testimonio dijo que estaba... embarazada, así que todos atribuyeron que el matrimonio era real. Ah, entonces, Beatriz es hija del Conde... ¿es posible? —Revisó su reloj. — Casi son las siete. —Se puso de pie y volvió a ordenar las cosas para llevarse los minutos que le quedaron volviendo a acomodar las cajas en sus respectivos estantes dejando la caja de su profesor en uno de los cajones con llave del estante junto a la puerta y salió de la habitación dirigiéndose de regreso a la suya. — "Ahora que lo pienso... la Vizcondesa Viviana también murió en circunstancias extrañas. Kimberly me contó que se ahogó, y hace casi 7 años me enteré que se había ahogado en la fuente de su casa, ¿quién se ahoga en la fuente de su casa si no es homicidio? Aunque... si mal no recuerdo, papá me dijo que lo catalogaron como suicidio." Uff. —Exhaló entrando a su alcoba. — "Parece que esto va a resolver muchos casos que no creí que serían resueltos." —Buscó un traje en su armario y lo dejó sobre la cama, después acercó también sus zapatos y se metió al baño. Media hora más tarde tendrían una nueva reunión con la corte y algunos invitados que seguramente no tardaban en llegar, por lo que tenía que darse prisa.