FREEDOM Levi x Reader | Levi y tu| EN EDICIÓN

Vuelve a mi...

Dicen que lo que no te mata te hace más  fuerte... pero ver morir a tus amigos uno por uno a aquellas personas  con las que compartiste  tanto, aquellas de daban la vida unos por otros, aquellas por la cual estabas viva a día, aquellas  por quienes pudiste formar una nueva vida.

Aquellos a los que no podías  llamar héroes  debido a sus acciones pero si por los resultados.

Recordaba  cada partida como si hubiera sido hace poco y, por casualodad o dulzura del destino aun conservaba  a un buen y ultimo  amigo  con quien  me encontraba en su lecho, donde pronto solo quedarian sombras, hace unos días  aquel  lugar había  estado lleno de personas, enormes  cantidades de personas como jamás  había  visto, todos los niños  del orfanato  quienes  poco tenian de niños, aquellos que se  convirtieron en parte de la sociedad algunos tuvieron hijos y esos hijos  tenian otros que apenas podían pronunciar palabras y en el mejor de los casos tendrían  6 o 7 años.
Hijos de soldados, personas mayores que  habian servido al ejercito, los hijos de cada uno de nuestros compañeros, Tom... y su pequeña  hija, decendientes unos tras otros... desfiles de vidas salvadas por el esfuerzo de todos  y sobre la vida de awuellos hombres y mujeres que permanecían  descansando bajo un bello árbol, algun matorral o un dulce abedul.

— ¿Podrias pasarme ese vaso de agua?
— Sí, claro— Aquellas manos tan ágiles  ahora tomaban el vaso como un reto, pero no mencione nada.

— Cielos no me veas así, solo estoy  tomando un vaso como un anciano decrepito, pero aún podría ir a una guerra.

Sonreí ante su afable entusiasmo—  Lo sé, supongo que te ayudo mucho los tratamientos de Z y la vida que llevaste después de lo de la ciudad subterranea, por cierto fue bueno que le contaras a tu hija, después de todo... ya ha tenido tiempo para analizarlo ¿Quieres que  se presente?

Sombra me miró  con ojos cansados— Espera un poco más, aún quiero sentirme como en el pasado, solo un poco—tosió  debido al frío que apenas notaba pero supongo que su piel era más delgada.

—Encenderé la chimenea— hace años que había cambiado el titán que portaba mientras seguía en buenas condiciones, 104 años tenía... 104 años y aún podía moverse y tenía algo de fuerza un caso extraño e inaudito entre las personas pero a pesar de su adorable afición por el azúcar su cuerpo estaba en perfectas condiciones pero, poco a poco como debe pasar con la vida se debía ir y su signos vitales ya no eran algo de lo que había que enorgullecerse— Quién diría que tu dieta de 2 pasteles diarios serviría tan bien.

Sombra rió un tanto sonoro— Vaya, hace tiempo no reía así... Así que solo quedamos tu y yo...— tosió de nuevo mientras me acercaba a ponerle  mi capa en el regazo y servía algo de té... Era mayor que él  así que tal vez yo tendría 107 u 108 años de edad pero a diferencia de él  parecía una chica de 23 ya estaba acostumbrada a eso pero aún así si lo pensaba mucho... las cosas  seguían siendo un tanto desconcertantes.

Saque de mi maleta un albúm— Mira— me senté a su lado y puse mi cabeza en su hombro—Lo hice para ti.

Sombra asintió— Lo sé, hiciste uno para cada uno de nosotros antes de morir, comandante lamento no poder soportar más... deseaba vivir por lo menos 700 años más... pero creo que es imposible para un simple humano.

Bese su mejilla— No eres un simple humano, Kevin vivirás  más de sólo 700 años... mientras viva cada recuerdo, cada mes recordaremos a aquellos que dieron su vida entera por esto y ustedes han ganado un lugar en cada colonia y en el corazón de sus habitantes, mirá— señale una foto—Aquí estamos en en las murallas,  12 años después de la paz, Eren si que logro  convertir ese establo en un lugar agradable donde vivir... ¿Es  Armin? a veces olvido esa etapa donde se dejo la barba, Eren lo molestaba mucho.