FREEDOM Levi x Reader | Levi y tu| EN EDICIÓN

Carpe Tenebris

Tres días después de haber asistido a tan secreta reunión organizada por comandante en jefe Darius Zackly ya contaba con toda la información acerca de Eren Jaeger... o por lo menos toda la que podía encontrarse dentro de los muros.

Ordene cada uno de los reportes que había escrito la noche anterior y baje a la sala de juntas dentro de aquella mansión que servía como cuartel del escuadrón.

La sala era simple solo contenía una gran mesa de cristal redonda y sillas con acabados únicos cada una había sido hecha para quien ocupara aquel asiento y una vez que muriera era destruida, no podían dejar legado alguno así que se les honraba en vida, mientras que el techo había sido grabado en mármol,  los candelabros colgaban en distintos tamaños y con incrustaciones preciosas digno de un mercader adinerado y pomposo justo lo que una persona pensaría sí se encontrara dentro de aquella mansión.

-Veo que están todos reunidos...- miró a su izquierda disimuladamente justo detrás de la puerta-Sombra llegas tarde.

-Lo lamento el viaje fue más largo de lo que pensé-Sombra era conocido como el segundo miembro más antiguo en el escuadrón, su piel era tan pálida que algunas venas eran visibles, sus ojos eran desorbitados y parecían caer en la locura el compañero perfecto de su oscuro cabello acomodado en un coleta despeinada, también era alguien de temer pero ella podría describirlo sencillamente como un niño.

-Entiendo- Después de haber sido llamada a la junta con el comandante en jefe pedí a Sombra que se encargará de vigilar el juicio que se llevaría a cabo por lo que tuvo que viajar dentro de Sina y observar detalladamente al supuesto traidor a la humanidad.

-Estos son los reportes les daré unos minutos para que lo lean-Deje frente a cada uno los documentos y serví un poco de galletas dentro de un plato, Sombra lo tomo sin que alguien a excepción de mí se diera cuenta así que tuve que servir otro, retome mi asiento.

-Cómo verán el chico es capaz de convertirse en titán a voluntad según el informe, es un cadete recién graduado y estuvo durante la batalla en Trost, no entraré en detalles... Sombra se ha encargado de vigilar el juicio que se llevó  a cabo para determinar si la policía militar se quedaría con su custodia o si los cuerpos de reconocimiento obtendrían su participación en beneficio de la humanidad.

-Eren Jaeger, Shiganshina, prepotente, un tanto grosero y bastante imprudente. Como se predijo quedó a cargo de las tropas de reconocimiento, así que podemos continuar con lo planeado.

-Comandante ¿Realmente ese chico es capaz de convertirse en titán?-La pelirroja con un cabello no mayor a 5 centímetros parecía escéptica ante las declaraciones hechas en el informe y para ser sincera sentía la misma curiosidad pero yo misma me había presentado en trost después de que sellara la puerta, no había duda ninguna fuerza humana hubiera podido mover aquella roca, por lo que solo me permití a asentir.

-¿Ah? No entiendo... porque el rey quiere que actuemos como niñeras...nosotros nos encargamos de problemas mayores... no de estúpidos niños que creen que pueden salvar al mundo.

-¿Realmente no piensas que un titán de 50 metros ya es suficiente problema?

Daggar era quien solía pelear más con el rubio, tal vez porque era la única que aún no terminaba de entenderlo, pero si, allí estaba  Az  él soldado más despistado en la historia de la humanidad, aunque debía admitir que esa falta de atención era compensada con el hecho de haber sobrevivido a la tragedia en Maria durante tres meses y su increíble habilidad de deducción en situaciones cotidianas, incluso él había sido él que predijo quién sería la división a cargo de Jaeger con tan solo una breve historia sobre cada división, Az siempre estaba en un mundo distinto jugando con las plumas que adornaban su enmarañado cabello y mirando a un punto sin fin.

-Sombra...- dirigí la mirada ante el pelinegro que intentaba abrir un caramelo evitando la conversación, me miró y luego giró la vista hacia el resto.

-Aterrador-y prosiguió con el proceso de conseguir su caramelo, el silencio se hizo inminente en la habitación si había algo que a sombra le pareciera aterrador solo significaba malas noticias, viniendo de alguien que había perdido toda moral y sentido común era inquietante.

-Como verán nos enfrentamos a algo más allá de un simple titán o un simple ser humano la existencia de Jaeger podría significar la extinción total... o podría ser una tenue luz en todo caso ese es trabajo del cuerpo de reconocimiento, nosotros tenemos mejores planes.

-Tsk... por tratar con ese niño espero que la paga sea buena-Dogger la más bajita del grupo siempre era muy cascarrabias, pero tenía una parte buena y bondadosa que odiaba mostrar.

-Es mejor que algo tan vacío como el dinero... a partir de este momento somos libres una vez más...

Todos se miraron entre si... libertad era la palabra que retumbaba en sus oídos una y otra vez.

-La ley que nos ocultó durante 75 años queda rota, y aquella que prohibía nuestra salida por libre albedrío las veces que lo deseáramos también... pero a cambio debemos lograr nuestra misión...de lo contrario tendremos consecuencias catastróficas.

-Significa... que... podremos vivir fuera de los muros... -Dogger parecía ilusionada por primera vez en 3 años.

- ¿Ya no tendremos que ocultarnos? Eso suena como un plan suicida. -Lobo  de piel morena y cabello platinado parecía incrédulo ante las palabras de su comandante, como siempre.

-Técnicamente seguiremos cubriendo nuestras identidades, rostros y vida... seremos fantasmas aunque con ciertas cláusulas que he especificado en el reporte en la última hoja-Había precavido aquellas pautas por lo que las escribí con una tinta que solo podía ser visible si se quemaba lentamente el papel y al terminar de quemar toda la hoja para ver el mensaje esta se incineraba junto al resto del documento.

- Podre... ver las montañas de fuego...- dirigí la mirada ante sombra y sonreí.

-por supuesto.

Dogger no se refería a acabar con cada titán y poder vivir una vez más... no ella hablaba de algo aún más allá, vivir fuera de los muros y coexistir con los titanes tal como hace 75 años, tal como yo hace algunos años atrás... No solo probar la libertad...sino poder tomar una gran rebanada de ella las veces que deseáramos.

-Y que sucederá si.... -Tormenta era algo temerosa ante el no lograr sus objetivos, jamás había fallado, pero al igual que todos podía llegar a pensar lo peor a pesar de su enigmática positividad ante las adversidades.

-No lo logramos-su hermano mellizo Tornado terminó su oración como de costumbre.

Sonreí dejando la sala de juntas... la respuesta fue dada.