Narra Greta
Después de una jornada de clases tuvimos que volver a casa, la amistad de dos ya no había, ahora se juntó Erick a nuestra amistad, es una de las personas más graciosas que pude encontrar.
Erick: Y si vamos por un helado.
Zabdiel: Esas ideas me agrada.
Greta: Le diré a Alejandro que llegare tarde a casa.
Ellos me acompañaron al estacionamiento y ahí estaba Alejandro esperándonos, me acerque hacia él y lo salude, aún no había llegado Lili ni Christopher por lo cual le avise a Alejandro que no iría con ellos.
Alejandro: Esta bien, le diré a tu madre. –sonrió. –Oh, Erick que haces aquí hombre. –Alejandro sonrió y abrazo a Erick parece que lo conocía desde hace tiempo.
Erick: Señor Alejandro, que gusto verlo por acá.
Alejandro: El gusto es mío...mírate estas un hombre.
Erick: Gracias. –Mire a Erick y él tenía sus cachetes rojos. Escuche la voz de Lili y luego la de Christopher detrás de mí.
Christopher: Que demonios haces tú aquí. –dijo. Erick y Christopher se quedaron mirando como en una batalla de miradas.
Erick: Yo...uhmm... -Christopher volteo los ojos y se subía al auto.
Christopher: Y tú que, no subirás. –me dijo mirándome.
Greta: No. –exclame. –iré con ellos a tomar un helado. –Christopher tenso su mandíbula, estaba enojado. –Saben que chicos, tal vez el helado le dejamos para luego.
Erick: Esta bien, cuídate Greta.
Greta: Igual tú, nos vemos mañana. –Erick me sonrió y se despidió con un beso en mi mejilla. Zabdiel mejor no dijo nada y solo se despidió, me subí al auto y Alejandro condujo hasta un restaurante.
Greta: Porque venimos acá.
Alejandro: Tu mamá está en una junta de trabajo justamente aquí, así que me aviso que les trajera para que almorzaremos todos aquí.
Greta: Esta bien.
Bajamos del auto y nos fuimos al restaurante, no me había fijado hasta que todos nos sentamos en la mesa, Christopher no estaba, mire por el gran ventanal y ahí estaba el hablando por teléfono con quien se yo, vino la una mujer de 42 años a indicarnos la carta, paso unos segundos y nosotros ya habíamos pedido de comer, Christopher no llegaba y seguía ahí hablando por teléfono.
Alejandro: Lili, puedes ir por tu hermano.
Lili: estoy comiendo. –Reprocho formando un puchero.
Alejandro: Pueden comer, yo iré por él.
Greta: Si deseas yo le llamo. –comente antes que se levantara.
Alejandro: No quiero que te incomodes.
Greta: No me incomodas. –dije y me levanté. –voy por el de paso me lavare las manos.
Alejandro: Gracias Greta.
Salí del restaurante y caminé hacia donde estaba Christopher él ya me figuro yendo hacia así que lo único que hice fue pararme enfrente de él y cursar mis brazos y el termino la llamada.
Christopher: Te hablo luego. –colgó. - ¿pasa algo? –asentí.
Greta: Alejandro dice que entres. –dije. Me di vuelta para volver al restaurante, pero Christopher me detuvo con su pregunta.
Christopher: ¿Qué te traes con Erick? –pregunto.
Greta: Por favor, no quiero celos. –dije.
Christopher: No son celos, solo que conozco perfecto a Erick y no es la persona que él dice. –comento caminado tras mío.
Greta: No me interesa lo que digas.
Christopher: Greta. –El sonido de una motocicleta cerca de nosotros me hizo que alzara la mirada al frente y ver dos personas en una motocicleta acercándose hacia mí, me detuve y en ese momento el mundo se detuvo para mí. –GRETAAAAA. –el grito de Christopher me hizo que lo regresara a ver, el corría hacia a mí, y al sentirme en el suelo y Christopher protegiéndome, el sonido de un disparo se hizo presente entre nosotros.
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Entre-nosotros //TERMINADA//
FanfictionSentir el cálido clima de Punta Cana es tan rico como la deliciosa comida de aquí, pasar un fin de semana con sus amigas y amigos es genial sería el último viaje con ellos ya que para el siguiente año debería estudiar si no terminaría perdiendo un a...