Capitulo Nº64

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Narra Greta.

Entre a casa y definitivamente caminé por toda la casa, pensando en que si lo que vi era eso lo que me estaba ocultando Zabdiel. Fui a mi habitación tratando de encontrar algo en que mi mente se pueda distraer y deje de pensar cosas tan estúpidas.

Se hizo de noche mi mamá y Alejandro regresaron Christopher no había llegado así que cenamos sin él, estaba en la sala y sentí el aroma del perfume de Christopher, él no se dio cuenta que estaba en la sala y corrió hacia su habitación, lo seguí tenía la necesidad de ver su cara su estado emocional.

Subí las escaleras y escuche a Christopher tararear una canción quede parada en puerta mirando buscar algo.

Greta: ¿Cómo estás? –comente y el me regreso a mirar y tenía una sonrisa tenía en su rostro.

Christopher: Bien y a ti ¿todo bien? –el seguía en su trance.

Greta: Si, todo bien. –sonreí.

Mire que abrió un cajón y de ahí saco una caja con una envoltura de regalo y sonrió al verla.

Christopher: Bueno me tengo que ir. –el camino hacia a mí y me tomo de la nuca para darme un beso en la frente sentí un escalofrió por todo mi cuerpo, hace mucho no hacia eso y extrañaba que lo haga.

Lo mire irse y entre a su habitación para mirar por la ventana con quien se iba, y ahí estaba ese mismo auto, el entro al auto con una sonrisa en su rostro y se fueron.

Me senté en su cama y mire toda su habitación, tenía su zapatilla no tan ordenada y su cama distendida, sonreí a acordarme cuando lo cuide cuando se había enfermado con una simple gripe y pensó que se morirá, mis ojos no demoraron en llenarse de lágrimas.

...

Era domingo y no había sentido la alarma, me levante y percibí que algo se quemaba en la cocina, corrí a ver de qué se trataba y al entrar mire a Christopher con un trapo sacudiendo para que el humor se vaya por la ventana reí al verlo.

Chris: Por poco nos morimos quemados. –reí al escuchar su exageración.

Lo ayude con el humor de la cocina y dejamos todas las ventanas abiertas, me senté en la mesa y mire a Christopher con su pijama nunca me había fijado, pero Christopher tiene un perfil griego.

Greta: ¿Qué hacías?

Chris: El desayuno. –me indico los cuatro huevos que le había echado al sartén.

Greta: ¿Mamá no está? –pregunte.

Chris: No, se fue con mi papá hacer unos asuntos en la empresa, llegaran de noche. –me supo decir.

Greta: Que me darás de desayuno, huevos quemados. –escuche su risa.

Chris: No. –comento. –trato de hacer un buen desayuno, me levante de buenas hoy. –dijo el tomando un plato y me miro. - ¿Qué tal dormiste?

Greta: Bien. –mirarlo tener un buen humor tan de mañana me hacía verlo raro, Christopher no era de tener un buen humor en las mañanas y mucho menos un domingo.

Christopher me sirvió los huevos revueltos y un vaso de jugo de frutas.

Chris: Espero te guste. –comento sentándose al frente mío. –buen provecho. –sonrió.

Tome el tenedor y tome un poco de huevo revuelto para meterme a la boca, al estar saboreándolo lo único que quería salir de mi era lo que sentía por Christopher no me interesa que él ya tenga novia o tal vez ya conocía a alguien más, lo único que yo esta vez quería era que el supiera mis sentimientos hacia él.

Greta: Te q-quiero Chris.

Entre-nosotros //TERMINADA//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora