Capitulo Nº27

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Narra Greta

Verla a mi madre tan feliz con su vestido era algo que no lo cambiaría por nada del mundo, Lili se probó un vestido concho de vino era muy divino y yo decidí por un color más neutro, como un Beige, me probé y me encanto como me quedaba, a Lili también le gustaba, así que mi Mamá decidió hacer uno igual para Lili y ella estaba encantada con la idea de mi mamá. las doce de la tarde y todavía estábamos probando vestidos con mi mamá, Alejandro le llamo a decirle que ya había escogido el traje de Christopher y de el y nos esperaría en el estacionamiento.

Las dos de la tarde y mamá no escogía que vestido escoger, tea tres que le encantaban, pero no sabía con quién quedarse, Lili y yo le decidimos por uno, pero mamá no tomaba nuestra decisión.

Greta: Mamá, Alejandro nos está esperando desde hace dos horas.

Lili: Si, deben estar con hambre. –reprocho Lili poniendo su cabeza en mi hombro.

La chica que nos ayudaba le dijo a mi mamá que hace media hora ha llegado otro vestido de novia que, si quiera verlo, mi mamá acepta, y caminamos por un pasillo y la chica abrió una puerta y dios mío santo era un vestido más hermoso del que mi mamá estaba por escoger.

Norma: Ese. –dijo mi madre enamorada del vestido.

Greta: Esta hermosísimo. –dije mirando el vestido de pies a cabeza.

Norma: Me lo llevo. –mamá se lo probo, pero había algunos detalles de cambiarlo así que la chica tomo las medidas que tenías que ser ajustado y lo arreglara, mamá hizo el pago y el vestido le llegara un día antes de la boda, salimos por fin de la tienda hacia la acera, y ahí estaba Alejandro con Christopher fuera del auto esperándonos.

Alejandro: Por fin. –miro a mi mamá y le dio un beso en sus labios.

Christopher: Tengo hambre. –murmuro, mamá le dio un apretó en su mejilla.

Norma: Cariño, vamos a comer. –Alejandro asintió y todos subimos al auto.

Lili le converso a su hermano que vestido estaríamos ocupando y el solo iba asistiendo en todo lo que su hermana le decía, sin antes darme un miradita.

Llegamos al restaurante del hotel y nos sentamos en una mesa, un chico nos ayudó con la carta del menú, pedimos nuestros menús y teníamos que esperar como diez minutos ya que el lugar estaba lleno por turistas, empezamos a platicar en donde sería la misa y luego la recepción, mamá invitaría a toda la familia de Alejandro y la nuestra y también a los empleados de la empresa de papá.

Una chica muy amable nos empezó a entregar nuestros platos y ella nos quedó, primero mirando a mi mamá y a Alejandro y luego me miro a mi. La mire bien y puedo decir que ese rostro ya lo había visto antes, Christopher pateo por debajo de la puerta haciendo que lo mire me hacía señas, pero no las entendía bien, hasta que escuche hablar a la chica.

X: Y ustedes son novios. –dijo mirando a Christopher y a mí, coloque mi cara de ofendida y mi mamá rio junto a Alejandro.

Norma: No preciosa, ella es mi hija y Christopher es el hijo de mi pareja. –dijo indicando a Alejandro.

X: Oh...lo siento pensé que eran nov...porque pensé verlos ayer en el bar –mi corazón empezó a palpitar demasiado. –saben que me voy

Christopher: Si, mejor vete. –dijo Christopher con una sonrisa falsa a la chica.

X: Que disfruten su almuerzo. –la chica se puso como un tomate cuando escucho a Christopher.

Christopher y yo nos quedamos mirando.

Norma: Que rara esa chica.

Christopher: Si muy rara. –Christopher hablo primero.

Greta: Iré a lavarme las manos. –dije y me levanté de mi asiento.

Christopher: Voy con ella. –mi mamá nos miró y asintió, y acto seguido empezó a comer.

Christopher y yo caminamos hacia el baño de mujeres, cuando ya estuvimos lo suficiente alejados de la mesa y sin que nos pudiera ver, Christopher tomo de su cabello.

Christopher: No vuelvo a besarte en público.

Greta: Opino lo mismo. –me tome de rostro.

Christopher: La chica nos reconoció Greta. –comento Christopher mirándome.

Greta: Lo sé.

Escuchamos unos pasos, que venían hacia nosotros, nos quedamos ahí quitos sin decirnos nada hasta que miramos a Lili.

Lili: Que les pasa. –comento la niña –vine a lavarme las manos.

Christopher: Me asustaste. –dijo

Lili: No soy espejo. –al escuchar eso yo empecé a reír, ahora entiendo de donde sacaba Christopher esas palabras para quedarme como una idiota delante de él.

Entre-nosotros //TERMINADA//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora