El Ascenso De La Humanidad

Capitulo 89: Defensas planetarias

El presidente Tadeus miraba la pantalla con la expresión solemne que se había convertido en su marca registrada durante estos días oscuros. Frente a él, a través de la pantalla holográfica, se encontraba el Comandante Eryndor, jefe de la Guarnición de la Tierra, un hombre de aspecto imponente.

Tadeus tomó la palabra primero. "Comandante Eryndor, la situación es crítica. No podemos subestimar la posibilidad de un ataque sorpresa en la Tierra. Necesito un informe detallado sobre la preparación de la guarnición y nuestras capacidades para resistir tanto un ataque directo como intentos de sabotaje por infiltrados."

Eryndor asintió, su rostro mostrando una mezcla de preocupación y determinación. "Señor Presidente, la Guarnición de la Tierra está en alerta máxima desde que recibimos las primeras señales de la posible invasión de la Confederación de Comercio y el Covenant. Hemos reforzado todos los accesos a las principales ciudades, y nuestras defensas antiaéreas y terrestres están plenamente operativas. Sin embargo, la amenaza de infiltrados es nuestra mayor preocupación."

Tadeus asintió, animándolo a continuar. "¿Qué tan preparados estamos para identificar y neutralizar esa amenaza interna?"

Eryndor continuó, su tono grave. "Hemos reforzado las operaciones de inteligencia, pero no es suficiente. La Confederación tiene agentes bien entrenados, y ya hemos detectado varios intentos de infiltración en instalaciones clave, como las plantas de energía y los centros de comunicación. Afortunadamente, hasta ahora, hemos logrado frustrar esos intentos, pero me temo que podría haber más operativos encubiertos que aún no hemos identificado."

Tadeus frunció el ceño, la preocupación evidente en sus ojos. "¿Qué tan vulnerables somos a un ataque de este tipo? Si logran sabotear nuestras infraestructuras críticas, podríamos quedar a merced de un ataque a gran escala.

"Eryndor asintió lentamente. "Hemos tomado medidas para minimizar los daños potenciales. Los sistemas de energía están ahora descentralizados, y hemos implementado protocolos de emergencia que nos permiten restablecer las comunicaciones rápidamente en caso de una interrupción. Además, las principales bases militares han sido reforzadas con tropas de élite, y estamos llevando a cabo barridos constantes en busca de infiltrados. Sin embargo, señor, debo ser franco: no hay forma de garantizar una seguridad absoluta. La naturaleza de la guerra moderna, especialmente con enemigos tan sofisticados, siempre deja margen para el riesgo."

Tadeus reflexionó por un momento antes de responder. "Lo entiendo, Comandante. Lo que necesitamos es anticiparnos a sus movimientos. Quiero que se intensifiquen las operaciones de contrainteligencia y que se ponga en marcha un programa de monitoreo más agresivo. Además, envíe refuerzos adicionales a las instalaciones más críticas. No podemos permitirnos ningún error, especialmente ahora que la guerra está en su punto más delicado."

Eryndor asintió con firmeza. "Entendido, señor. Incrementaremos la vigilancia y las patrullas, y nuestras unidades de inteligencia trabajarán día y noche para detectar cualquier amenaza antes de que se materialice."

Tadeus se permitió un breve respiro. "Comandante, confío en usted y en sus hombres para proteger la Tierra. Si hay algo más que necesite, no dude en pedírmelo."

Eryndor hizo un gesto de asentimiento. "Gracias, señor. No descansaremos hasta asegurarnos de que la Tierra esté lo más protegida posible. Estamos listos para lo que venga, ya sea un ataque frontal o un intento de sabotaje desde dentro."

La comunicación terminó, pero la preocupación seguía en el aire. Tadeus sabía que estaban caminando sobre una cuerda floja, y cualquier error podría ser fatal para la humanidad. Confiaba en Eryndor y en la fortaleza de la Guarnición de la Tierra , pero también sabía que debían estar listos para enfrentar lo impensable

Pronto al día siguiente Tadeus se reuniría con los principales líderes de los mundos del sector central.

El presidente Tadeus estaba sentado frente a una mesa redonda rodeada de pantallas holográficas que proyectaban las imágenes de los líderes de las colonias más importantes del sector central de la Federación. La situación era tensa; cada uno de estos líderes representaba un mundo crucial para la estabilidad de la Federación Humana. Las colonias de este sector, son las más cercanas al sector solar y a la capital de la federación la tierra.

Los líderes conectados incluían a Governador Elaine Vargas de Nova Prime, el Director Militar Samuel Krell de Haven VI, y al Ministro Logístico Lucian Hargrave de Arcturus III . Tadeus abrió la sesión con su característica voz firme, pero con un tono de urgencia.

Señoras y señores, el sector central ha sido, hasta ahora, un pilar de nuestra fortaleza, pero no podemos darnos el lujo de asumir que esto continuará siendo así. Con las recientes incursiones de la Confederación de Comercio y el Covenant , debemos reforzar nuestras defensas y asegurar que nuestras colonias estén completamente preparadas para cualquier contingencia. Necesito informes actualizados sobre la situación de cada una de sus colonias.

Gobernadora Elaine Vargas fue la primera en hablar. "Señor Presidente, Nova Prime sigue siendo un centro de producción industrial clave, y nuestras fábricas han aumentado la producción de materiales de guerra en un 70%. Sin embargo, nuestras defensas planetarias requieren de actualizaciones inmediatas y reforzar las líneas de defensa de las fronteras periféricas del sistema".

Tadeus ascendió, tomando nota mental de lo que decía Vargas. "Entiendo, Gobernadora. Enviaremos un destacamento de tropas de la Guarnición de la Tierra y algunos de nuestros mejores ingenieros para reforzar sus defensas y actualizar su arsenal. No podemos permitirnos perder un mundo tan vital como Nova Prime."

El Director Militar Samuel Krell de Haven VI tomó la palabra a continuación. "Haven VI ha estado funcionando como un punto de tránsito para suministros militares, pero hemos recibido informes de posibles sabotajes en nuestras rutas de transporte. Además, nuestras defensas orbitales, aunque robustas, no han sido probadas en un escenario de combate real. Si la Confederación o el Covenant deciden atacarnos, nuestras líneas de suministro a las fuerzas del frente podrían verse comprometidas."

Tadeus se inclinó hacia adelante, mostrando su preocupación. "Director Krell, la protección de nuestras rutas de suministro es absolutamente crítica. Ordenaré un refuerzo inmediato de sus defensas orbitales y destacaremos unidades de inteligencia para investigar esos posibles sabotajes. Debemos asegurarnos de que Haven VI siga funcionando sin interrupciones."

Finalmente, el Ministro Lucian Hargrave de Arcturus III intervino, su voz cargada de preocupación. "Señor Presidente, Arcturus III ha sido un bastión logístico, pero nuestras reservas de alimentos y medicinas están peligrosamente bajas debido al aumento de la población refugiada de las colonias periféricas de los sistemas invadidos por la Confederación. Además, hemos detectado actividad sospechosa cercana a nuestras fronteras. Creemos que se tratan de droides sondas".

Tadeus sabía que no podía permitirse un colapso logístico en el sector central. "Ministro Hargrave, enviaremos suministros adicionales de inmediato, y reforzaremos la seguridad en sus estaciones de energía solar. Además, me aseguraré de que los refugiados sean redistribuidos de manera que no sobrecarguen los recursos de su colonia. La estabilidad de Arcturus III es fundamental para nuestras operaciones generales."

La discusión continuó durante varias horas, con Tadeus escuchando las preocupaciones de cada líder y ofreciendo soluciones inmediatas. Se discutieron las posibles estrategias de defensa, la redistribución de las tropas y la manera de mantener la moral alta en estas colonias cruciales. Cada uno de los líderes sabía que el destino de la Federación Humana podría depender de que tan bien preparados se encuentren los mundos centrales.

Al finalizar la reunión, Tadeus se dirigió a todos con una mezcla de severidad y esperanza. "Estamos en un momento crítico. No sólo estamos defendiendo nuestros mundos, sino el futuro de toda la humanidad. No tengo dudas de que, con su liderazgo y el apoyo coordinado de nuestras fuerzas, superaremos cualquier desafío. Que nuestras acciones hoy aseguren un mañana para las generaciones futuras."

Ese día finalizó la reunión de esa manera.