El Ascenso De La Humanidad

Capitulo 104: Buenas noticias

El Almirante Toni estaba de pie en el puente de su crucero Venator insignia, el "Talented", observando la superficie de Nebelon a través de los grandes ventanales blindados. La batalla había terminado, pero el planeta aún mostraba las cicatrices de la feroz contienda. Con un gesto decidido, Toni se giró hacia su oficial de comunicaciones.

Almirante Toni: "Prepárenme una nave clase consular. Voy a reunirme con el Gobernador Kor en la capital. Inicien la secuencia de desembarque inmediatamente."

El oficial asintió y transmitió las órdenes. Minutos después, el "Talented" comenzó a despegar desde su hangar. Las luces de señalización verdes parpadearon en secuencia, indicando que el camino estaba despejado para el transporte de Toni.

En el hangar principal, una elegante nave clase consular, pintado en los colores rojo y blanco de la Federación, aguardaba con los motores ya rugiendo. Toni, acompañado de un pequeño destacamento de seguridad, abordó la nave. La rampa se cerró con un suave zumbido, y el transporte despegó de inmediato.

El transporte se deslizó fuera del hangar con precisión, cruzando el campo de energía que separaba el espacio vacío del interior presurizado de la nave. A medida que se alejaba del "Talented", Toni pudo ver las escuadras de cazas Ala-X patrullando el espacio alrededor del crucero, manteniendo su formación en la vigilancia del sector. El azul y blanco del planeta Nebelon se expandía frente a él, mientras la nave se preparaba para entrar en la atmósfera.

La entrada fue suave pero controlada, la nave temblaba ligeramente a medida que atravesaba las capas superiores de la atmósfera del planeta. Abajo, la capital, Erebus, se extendía como un tapiz maltrecho. Aún se podían ver las columnas de humo elevándose desde los distritos más afectados por los combates recientes.

El transporte clase consular descendió con gracia hacia el puerto espacial, que aún mostraba los signos evidentes del ataque. Varios hangares estaban parcialmente derrumbados, y los restos de naves destruidas estaban esparcidos por la pista. A pesar de los daños, el puerto estaba operando, con ingenieros y personal militar moviéndose rápidamente para reparar lo que podían.

La nave tocó tierra suavemente. La rampa descendió, y el Almirante Toni salió, su capa ondeando ligeramente con la brisa. Fue recibido por un grupo de soldados del ejército de Nebelon, que lo escoltaron a un transporte terrestre blindado. Desde ahí, fue llevado directamente al Palacio Gubernamental, un edificio que, aunque dañado, aún mantenía su majestuosa estructura.

Las cicatrices de la batalla eran evidentes aquí también. Las fachadas estaban marcadas por impactos de artillería, y las ventanas estaban cubiertas con placas de metal, como una medida temporal hasta que pudieran ser reparadas. Al entrar, Toni notó que el interior estaba lleno de actividad. Soldados, oficiales y personal de emergencia trabajaban en la coordinación de las reparaciones y el suministro de recursos.

Finalmente, fue conducido a una gran sala de reuniones, donde el Gobernador Kor lo esperaba. Kor, un hombre de mediana edad con una expresión cansada pero resuelta, se levantó para saludar a Toni.

Gobernador Kor: (extendiendo la mano) "Almirante Toni, es un honor tenerlo aquí en persona, aunque las circunstancias podrían ser mejores."

Almirante Toni: (estrechando la mano de Kor con firmeza) "Gobernador Kor, la situación en Nebelon ha sido dura, pero hemos logrado lo que muchos considerarían imposible. Sin embargo, aún queda mucho trabajo por hacer."

Ambos se sentaron en la mesa de conferencias, mientras los oficiales colocaban hologramas de la ciudad y el planeta en el centro de la mesa.

Almirante Toni: (mientras observa los hologramas) "Los daños en la capital son significativos. La batalla por Erebus fue brutal. Necesitamos un informe detallado sobre el estado actual de las defensas planetarias y la capacidad de producción."