En el túnel oscuro y húmedo, la atmósfera estaba cargada de tensión y ansiedad. Mary, temblando de frío y agotada por la reciente persecución, se encontraba frente a Bismuto. La figura gigante de Bismuto se alzaba frente a ella, con sus cabellos desaliñados y su aspecto perturbado, reflejando una mezcla de miedo y paranoia. La luz parpadeante ofrecía breves momentos de claridad, revelando la inquietud en los ojos de Bismuto.
Mary se acercó con cuidado, intentando romper el hielo con preguntas. Aunque sabía que Bismuto no podía hablar, esperaba que pudiera comunicarse de alguna manera. —Bismuto... ¿cómo llegaste a estar aquí? ¿Qué te pasó después de la guerra? —preguntó Mary, su voz temblando entre la preocupación y la curiosidad. —¿Qué pasó con Steven? ¿Y con las otras Crystal Gems?
Bismuto, a pesar de no poder hablar, intentó expresar su angustia. Sus gestos eran torpes y llenos de nerviosismo. Con un movimiento tembloroso, Bismuto hizo un gesto que parecía una mezcla de arrepentimiento y tristeza. Cada vez que Mary mencionaba a Steven o a las Crystal Gems, Bismuto se estremecía, sus manos temblando como si intentara lidiar con recuerdos dolorosos.
Mary notó la inquietud en la actitud de Bismuto y observó el daño en su brazo robótico. Aunque intentó arreglarlo por sí misma, el brazo no respondía correctamente. —Mi brazo... —dijo Mary, mirando el dispositivo estropeado. Bismuto, con un gesto de preocupación genuino, se acercó para examinarlo. Aunque sus movimientos eran nerviosos y descoordinados, Bismuto se esforzó por ayudar. Tomó el brazo robótico de Mary con cuidado, inspeccionándolo minuciosamente.
Mary observó cómo Bismuto trabajaba con una habilidad sorprendente a pesar de su evidente ansiedad. Con movimientos precisos, Bismuto ajustó y reparó el mecanismo del brazo robótico. El trabajo fue delicado, y Bismuto se mostró extremadamente concentrada. Finalmente, el brazo robótico de Mary empezó a funcionar nuevamente, moviéndose con mayor fluidez. Mary, aunque aún temerosa, sintió una oleada de alivio. —Gracias, Bismuto. Aprecio mucho tu ayuda —dijo con sinceridad, aunque la situación seguía siendo desconcertante.
De repente, el sonido de pasos apresurados resonó en el túnel. Nagisa, Aria, Perla, y las demás chicas llegaron al lugar, buscando desesperadamente a Mary. La presencia de las otras hizo que Bismuto se escondiera rápidamente en las sombras, temblando visiblemente. El miedo de Bismuto era palpable mientras miraba a las nuevas llegadas, su cuerpo encogiéndose en un intento de escapar.
Nagisa, al ver a Mary, se precipitó hacia ella con lágrimas en los ojos. —¡Mary! —gritó, abrazándola con fuerza. Karla y Sarah se unieron al abrazo, sus caras iluminadas por una mezcla de alivio y felicidad. Las lágrimas de Mary comenzaron a caer mientras abrazaba a sus hermanas, la emoción del reencuentro inundando su corazón.
Mary sollozaba, sintiendo el consuelo de su familia cerca. —Pensé que nunca los volvería a ver —dijo entre lágrimas, su voz ahogada por la emoción. Sus hermanas, mientras tanto, intentaban calmarla, susurrándole palabras de consuelo y amor.
Perla, que estaba observando con atención, notó algo extraño en el entorno. Aunque no podía ver claramente debido a la oscuridad, sintió la presencia de algo más. Sus sentidos agudizados le indicaban que había algo oculto cerca. —Hay alguien más aquí —murmuró Perla, mirando alrededor con desconfianza.
Mary, aún abrazada a sus hermanas, giró hacia el lugar donde Perla señalaba. —¿Bismuto? —preguntó con voz temblorosa, sabiendo que la figura gigante aún podía estar cerca. A pesar de la incomodidad y el miedo, Mary extendió su mano hacia el lugar donde Bismuto se había escondido. —Bismuto, por favor, sal.
La petición de Mary resonó en el oscuro túnel, cargada de una mezcla de esperanza y desesperación. La luz parpadeante reveló solo sombras, y la figura de Bismuto permaneció oculta. El ambiente estaba cargado de tensión, con las emociones de Mary y sus hermanas mezcladas en una compleja red de alivio, miedo y esperanza.
La búsqueda de Mary había llevado al grupo a una encrucijada emocional, y la presencia oculta de Bismuto añadía una capa adicional de incertidumbre a la situación. El túnel, con su luz parpadeante y las sombras ominosas, continuaba siendo un lugar de misterio y tensión, mientras el grupo esperaba el desenlace de su angustiosa búsqueda.
**Continuará..**

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Guerra de Cristal - Steven Universe AU Volúmen 1
FanfictionHan pasado más de 20 años desde que Ciudad Playa fue atacada por las personas y gobiernos más letales del mundo. Nadie sabe que pasó con las gemas que habitaban allí. Jasmin es una niña que creció en un mundo completamente aterrorizado por las gemas...