Guerra de Cristal - Steven Universe AU Volúmen 1

Capítulo 9

Jasmin se encontraba sentada en el sofá, esperando a su padre en la soledad de su inmensa casa. La oscuridad de la noche había caído ya sobre la ciudad, y la única luz en la sala provenía de una lámpara que apenas iluminaba el lugar. Su mente estaba aturdida por los acontecimientos del día anterior, desde los jaloneos en la escuela hasta los aterradores descubrimientos que había presenciado mientras caminaba de regreso a casa. Los soldados, las gemas utilizadas como combustible, los trabajos forzados… era demasiado para una adolescente que, hasta hace poco, había vivido en la ignorancia de las acciones de su padre.

Finalmente, escuchó el sonido de la puerta principal abrirse y cerrarse, seguido por el eco de los pasos de Maximiliano acercándose. Jasmin se enderezó en su asiento, sintiendo una mezcla de nerviosismo y anticipación. Cuando su padre entró en la sala, llevaba una expresión de cansancio en su rostro, pero sus ojos brillaban con una intensidad que ella no había visto antes.

—Hola, papá—, dijo Jasmin con una voz temblorosa, intentando ocultar su ansiedad. —¿Cómo te fue en el trabajo hoy?—

Maximiliano dejó caer su maletín en una silla cercana y se acercó a su hija con una sonrisa que no alcanzaba sus ojos. —Tuvimos algunos problemas menores—, respondió, su tono despreocupado. —Pero nada de lo que debas preocuparte, querida.—

Jasmin asintió, aunque su mente estaba llena de preguntas. Quería contarle sobre lo que había visto el día anterior, sobre las dudas y el terror que la habían invadido. Quería entender por qué su padre hacía lo que hacía, por qué las gemas eran tratadas de manera tan cruel. Pero antes de que pudiera formular sus pensamientos en palabras, Maximiliano la interrumpió, colocándole una mano firme en el hombro.

—Jasmin, hay algo que quiero mostrarte—, dijo, su voz teñida de emoción contenida. —Es un proyecto en el que hemos estado trabajando durante años, y creo que es hora de que lo veas.—

Antes de que ella pudiera protestar o hacer alguna pregunta, Maximiliano la guio fuera de la sala y hacia la puerta principal. Con su paso firme y decidido, Jasmin no tuvo más opción que seguirlo, mientras sus pensamientos giraban en torno a lo que su padre podría estar planeando mostrarle.

Subieron al automóvil del presidente, y el conductor, sin hacer preguntas, los llevó a través de la oscura y silenciosa ciudad hasta la imponente Torre Presidencial. Jasmin miró la estructura con una mezcla de asombro y aprensión; había estado en la torre muchas veces, pero nunca a estas horas ni con una sensación tan inquietante.

Una vez dentro de la torre, el ambiente cambió drásticamente. El personal de seguridad se cuadró ante Maximiliano, abriendo puertas y saludando con respeto mientras él y su hija se adentraban en los pasillos. Pero en lugar de dirigirse a su oficina, donde Jasmin esperaba que fueran, su padre la llevó por un camino diferente, hacia un ala que nunca había visitado.

Finalmente, llegaron a una gran puerta de metal con un panel de seguridad a un lado. Maximiliano deslizó una tarjeta, y las puertas se abrieron con un zumbido mecánico. Jasmin se encontró frente a un ascensor que descendía más allá del subsuelo, a un nivel secreto que no aparecía en ningún mapa de la torre.

—¿Papá, a dónde vamos?— preguntó Jasmin, intentando no mostrar el miedo que comenzaba a invadirla.

—Confía en mí, Jasmin—, respondió Maximiliano, con una sonrisa enigmática. —Esto es algo que cambiará la historia para siempre.—

El ascensor descendió en silencio, y el ambiente a su alrededor se volvió cada vez más frío y opresivo. Jasmin podía sentir su corazón latiendo con fuerza en su pecho mientras la máquina finalmente se detuvo, y las puertas se abrieron para revelar un pasillo largo y estrecho, iluminado por luces fluorescentes. El sonido de sus pasos resonaba en el espacio vacío mientras avanzaban, y la ansiedad de Jasmin crecía con cada paso.