En la penumbra de su despacho, Maximiliano se enfrentaba a una furia contenida. Las paredes estaban adornadas con mapas y planos, la luz de la sala era tenue, proyectando sombras largas que acentuaban la tensión en el ambiente. La noticia del fracaso de Bis 7 había desatado una tormenta de ira en él, y su semblante estaba marcado por una mezcla de enojo y frustración.
El coronel, en su uniforme impecable y con una expresión de absoluto desdén, estaba de pie frente a Maximiliano. El ambiente estaba cargado, palpable con la ansiedad y la urgencia de lo que se avecinaba. Maximiliano se movía con una intensidad controlada, sus pasos resonando en la sala mientras trataba de contener su furia.
—¿Cómo pudiste fallar? —rugió Maximiliano, su voz resonando con una mezcla de desdén y furia contenida. La frustración en sus palabras era evidente, y cada sílaba estaba cargada de una reprimida rabia. La mirada de Maximiliano era fría y calculadora, sus ojos destilando un desdén absoluto por el fracaso.
Bis 7, que había sido llamada de emergencia a la sala, estaba de pie en un rincón, su figura encorvada y su rostro enrojecido por la vergüenza y el miedo. La gema copia principal había sido humillada en público, y la amenaza de Maximiliano la mantenía en un estado de pánico latente.
—No debiste dejar que las chicas escaparan —continuó Maximiliano, su tono implacable—. ¿Acaso no entiendes lo que está en juego? No solo has fallado, has puesto en peligro todo lo que hemos construido.
En respuesta a las recriminaciones, Maximiliano se acercó a un panel de control en la pared. Con un gesto brusco, activó una serie de monitores que mostraban imágenes de gemas inertes, sus cuerpos grises y desmoronados en una especie de letargo inanimado. La cámara enfocaba a las gemas que habían sido transformadas en las gemas copia principales, mostrando sus cuerpos como piedras frías y muertas.
—Estas gemas, Bis 7, son el resultado de nuestra manipulación más cruel y efectiva —explicó Maximiliano, su voz se hizo más grave mientras señalaba las imágenes—. Están hechas de ácido y de la energía vital de distintas gemas. Es por eso que su presencia es tan dolorosa y su influencia tan corruptora. Cada una de ellas es una amalgama de agonía y desesperación, un recordatorio constante de la crueldad que hemos impuesto en nombre del poder.
El coronel, al escuchar la explicación, asintió con una mezcla de respeto y determinación. Su mirada estaba fija en las imágenes, y el odio hacia las gemas copia principales era evidente en su rostro. Se giró hacia Maximiliano, con una expresión que reflejaba la firmeza de su decisión.
—No puedo permitir que esto continúe —dijo el coronel con voz grave—. No sólo has fallado, Bis 7, has demostrado ser una vergüenza para nuestra causa. Si tú no puedes manejar a las gemas que hemos creado, yo mismo me encargaré de buscar a mi hija Ashley y separarla de esas gemas. No puedo permitir que esas cosas la corrompan más.
Maximiliano asintió, su rostro endurecido por una mezcla de preocupación y determinación. Se giró hacia Bis 7, que estaba temblando visiblemente, su miedo palpable en cada movimiento. Maximiliano avanzó lentamente hacia ella, y la amenaza en sus ojos era clara.
—Como advertencia —dijo Maximiliano con frialdad—, si vuelves a fallar, serás destruida. Y tú sabes lo que eso significa. El fuego es tu debilidad, Bis 7. No pienses que lo olvidaremos. Cada error tiene consecuencias, y las tuyas serán... definitivas.
El tono de Maximiliano estaba cargado de amenaza. Su voz era una mezcla de desprecio y amenaza real, y el aura de poder que emanaba era casi tangible. La sensación de peligro era clara, y Bis 7 sabía que cualquier otro error podría llevar a una destrucción implacable.
Maximiliano, con un gesto decidido, se giró hacia el coronel. Los dos hombres se miraron con una comprensión silenciosa de lo que estaba en juego. La preocupación por Ashley y Jasmin, y la necesidad de controlar la situación era evidente en sus rostros. El coronel se preparó para ir en busca de su hija, decidido a evitar que se viera afectada por las gemas copia.
Mientras tanto, Maximiliano, con una última mirada severa hacia Bis 7, ordenó que se prepararan para un nuevo plan. La amenaza estaba clara, y la presión sobre Bis 7 era ahora más fuerte que nunca. El destino de las gemas y las chicas estaba en juego, y cada movimiento contaba.
**Continuará...**

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Guerra de Cristal - Steven Universe AU Volúmen 1
FanfictionHan pasado más de 20 años desde que Ciudad Playa fue atacada por las personas y gobiernos más letales del mundo. Nadie sabe que pasó con las gemas que habitaban allí. Jasmin es una niña que creció en un mundo completamente aterrorizado por las gemas...