Desperté por una enorme molestia en la espalda y una incandescente luz en mi cara, giré lentamente y busqué a Jennifer a tientas al otro extremo de la colchoneta, al no sentirla abrí los ojos como platos dándome cuenta que aún seguía en la terraza, me levanté y dejé las cosas en su lugar, bajé al apartamento y encontré a Jennifer preparando el desayuno.
Buen día- dijo sin despegar la vista de su trabajo -Creí que jamás despertarías--Buen día- caminé hacia ella
-¿Dormí arriba?- me quedé a unos metros de su espalda.-Dormimos arriba-
-Entiendo, me quedé dormida- me acerqué a ella -¿Qué cocinas?- la abracé por la espalda.
-Son huevos con "beacon".- hizo comillas con sus dedos al decir la última palabra -Lo busqué en Internet y así se llama-
Besé su mejilla -Parecen huevos y tocino- me asomé a la cazuela -En realidad huele delicioso-
-Lo dices porqué quieres quedar bien- dijo burlona.
-¿Tengo fama de quedabien?- di un paso hacia atrás.
-Sí- me miró de reojo.
-¿Cuándo?- recargué mi espalda baja en la mesita.
-La vez que me enseñaste a tocar guitarra y dijiste que sonaba bien, pero en realidad sonaba horrible-
-Me gustaba como tocabas- crucé los brazos frente a mi pecho.
-Lo sé, pero...- apagó la estufa y giró -Mariel, no tiene que gustarte todo lo que hago- comenzó a caminar hacia mí -No quiero tener una relación perfecta de esas de películas, quiero una relación de verdad, con buenas y malas- quitó mis manos de mi pecho y comenzó a jugar con mi collar -Quiero que si algo no te gusta, me digas y ayudes a hacer algo para mejorarlo- me abrazó -Seamos realmente sinceras, con todo, no solo de sentimientos-
Rodee su cintura con mis manos
-He sido sincera contigo todo este tiempo- hizo una pausa
-Pero en realidad, sí había cosas que no me gustaban pero, no sabía como decirlo-Se alejó para verme -Bien, pues ahora lo haremos- sonrió.
-Pero de manera respetuosa- agregué.
-Eso es obvio- se acercó y dejó un pequeño beso en mis labios.
-Ven acá- la jalé con cuidado y la besé nuevamente.
POV. Jennifer.
Los días iban tranquilos y demasiado extraños a la vez, en dos días media universidad sabía que Mariel y yo eramos novias y en ese lapso de tiempo yo había recibido más de seis amenaza, la mayoría de las de primer ingreso y taller de arte, que al parecer, todas estaban enamoradas de ella.-¿Y esa cara?- Salma preguntó al verme.
-Hoy, una niña del taller de arte, me dijo que si le hacía daño a Mariel, se las vería con ella- dije mientras sacaba mi almuerzo.
-Eso sí es para tener miedo, según mis cuentas...- pensó -Es la segunda del día y no pasa de las doce- me miró -¿Qué te dijo la primera?--Que la cuidara, porque en cualquier momento me la podría quitar- rodee los ojos -Es molesto-
-Lo imagino- miró a lo lejos -Allá viene la raíz de tus amenazas-
Seguí su mirada y vi que Mariel venía a lo lejos -Hola- dije con una amplia sonrisa.
-Hola- imitó mi gesto y dejó un pequeño beso en mis labios.
-Si, hola, Mariel- Salma dijo burlona.
Se sentó a mi lado -Ah, hola Salma- sonrió y me miró nuevamente -Estás realmente hermosa hoy- susurró cerca de mi oído.
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Entre mis letras
RandomElla era excesivamente ordenada, yo en cambio era el desastre mismo. Lo único que nos unía, era la pasión por la literatura, ¿Qué pasa cuando dos tipos de caos colisionan?, ¿Se mueren, o se unen para crear algo nuevo?