Día 35: Cata y Marcos

252 38 15
                                    

-Fui al bar donde Berna me dijo que se juntaban... Los observé por un largo tiempo y créeme que han quedado muy complicados... Marcos decía que tal vez el intimar contigo la había quedado gustando y que por eso se acostó con su amigo. Aunque para ser sincera, ambos tenían cara de asqueados, como que no podían comprender que la verga del moreno le había roto el orto al crespo...-Me comentó Cata el otro día en el burdel. Una enorme sonrisa se apoderó de mi rostro. ¿Así que están asustados? Pues me alegro mucho con eso y es que ni se imaginan lo que están a punto de vivir.

-Al final Marcos se quedó solo y fue ahí cuando ataqué. Me acerqué sensualmente moviendo el trasero. Me senté al lado de él en la barra y sin más, le comenté lo guapo que era... "Me calientas tanto, que ya he mojado las bragas" le dije con sutileza, para que no se sintiera intimidado.- la pelirroja comentó tranquila, como si fuera de lo más normal andar acosando hombres.

En fin, la cosa es que el crespo cayó en la trampa de Cata y le siguió el coqueteo. Estuvieron toda la noche conversando y hasta intercambiaron teléfonos. Quedaron en juntarse mañana para "conversar".

-Dijo que iríamos hasta su departamento para mostrarme su colección de CDs, como si yo fuera tonta y no entendiera que solo quiere follarme... Ahí es cuando le daré su merecido... No sabes cómo trabaja mi Luchito...- Oh sí, cuando se refiere a ese sujeto en realidad hace alusión a su pene, porque así llama cariñosamente al único pedazo de hombría que le queda. ¡Prepárate Marcos! Tendrás tu merecido y pronto vendrá Leonardo, que pagará por sus fechorías también.

Diario de un Soltero GAYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora