Diario de un Soltero GAY

Día 42: Examen Falso

Tenía que hacer algo para separarlos, era imperativo y es que si yo no era feliz, ellos tampoco, pero ¿cómo?

-Déjalos, que sean felices y tú busca tu propio destino...- me aconsejó Cata, sólo que no la escuché, estaba invadido por la cólera.

No podía competir con Marcos, perdería en cualquier campo, obviamente lo prefería ante a mi y es que soy feo, loco y pobre como rata. ¡Por Gokú! Nunca antes había estado tan depresivo como ahora.

Debía inventar algo, una situación que los colocara en aprietos y que los hiciera separarse para siempre. La idea perfecta llegó a mi cabeza con la desgracia de una de las muchachas que trabaja en el burdel.

-No puedes seguir trabajando aquí, te dije que siempre te cuidaras, pero no me hiciste caso... Ahora estás infectada...- le dijo Berna a una de las putas. Resulta que constantemente la Madame les hace exámenes a las chicas para descartar que sean un peligro para los clientes. En la última revisión una de ellas dio Reactivo en el Test de Elisa, se había pegado el VIH.

¡Claro! Esa era la respuesta. Robé el examen de la desdichada, usé mi dotes artísticas y cambié su nombre por el mío. Ahora era yo quién se había contagiado.

-Uno de los reos que conocí en la cárcel tuvo que haberme hecho esto... Y quería decírtelo, porque quizás también te lo pasé a ti...- Fui nuevamente a la casa de Leo y aunque se resistió a abrirme la puerta, terminó cediendo. Así le conté entre lágrimas "mi desdicha".

¡Soy el mejor actor! Y es que el muy imbécil se creyó toda la historia. Quedó pálido y eso que es moreno como la noche. Ahí tienes desgraciado, ¿no querías rechazarme? Pues ahora veremos como Marcos sale corriendo de tu lado. Sólo me queda esperar. ¡Sufran putos!