Luchemos Por Esto - Fanfic (Rubelangel)

Capítulo 43

Narrado por Mangel

-¿Pero que ha pasáoh?- Cheeto me preguntó casi al inhtante. No sabía que ehtaba aún en casa.
-Que no ha pasáoh Cheeto- Le rehpondí sin ganah de mirarlo a la cara. Me saqué el abrigo, mientrah me revolvía el pelo pa’ tratáh de sacarme un poco de agua de encima.
-Me cago’n tóh Mahe, ¿Qué cojoneh pasó ahora?- Me comenzó a senguíh por tóah la casa, insihtente.
-Que me deje, coño. En serio…- Me di la vuelta pa’ mirahlo con cara de pocoh amigoh. Al inhtante reaccioné. Ehtoy siendo demasiáoh duro con Cheeto.
-Vale tío, pero no te dehquiteh conmigo- Se encogió de hombroh, haciendo una mueca de “Te dejo solo, ioputa”. Lo detuve al inhtante en el que vi que se dirigía a la puerta de entráh.
-Jen lo hizo elegíh… y el apohtó por ella. La prefirió- Le comenté sintiendo un dolor agudo en el pecho, al momento en el que bloqueaba mi mente pa’ olvidáh tóh lo que había pasáoh.
-Habéh, Mahe. ¿No créeh que lo hizo únicamente poh que Jen ehtaba ahí? ¿Ehtaba ahí, cierto?- Cheeto siempre trata de sacáh lah cosah buenah de lah situacioneh. Eh un gran amigo.
-Si, ella ehtaba ahí, pero aún así debería habéh dejáoh claro quién lo ha apoyáoh máh en su camino como Youtuber, quién ha síoh er gilipollah que ha ehtáoh en tóah. Él solamente se mantuvo en silencio… Dejó que Jen ehcupiera tóh lo que quisiese- Comenté adolorido poh la traición de quién se supone era mi mejor amigo. Nunca pensé que me hiciese argo así.
-Vamoh Mahe, no le deh tantah vueltah. De seguro Rubiuh lo ehtá pasando peor que tu. Mil veceh peor, ¿o ahora creeráh que tu no le interesah? Joder, pero si eh la persona máh preocupáh por tu bienehtar.- ¿Eh verdáh lo que me dice Cheeto? Quiero decih… NO, Rubiuh soprepuso a su novia anteh que a mi. Yo jamáh hubiese hecho eso, Jamáh.
-Cheeto… ehtoy cansáoh. Ehta situación me tiene totalmente agotáoh. No quiero seguíh llorando a loh piéh de Rubiuh si ni siquiera consigo algo mínimo. Pa’ mi ya eh suficiente- Comenté tragándome tóah lah ganah de mandar a la mierda a medio mundo, pa’ dirigirme a mi habitación.
-Vale… no se habla máh- Me siguió, pa’ luego poner una de su manoh en mi hombro. No pude evitáh caer en un sollozo silencioso. Ehto duele demasiáoh, máh de lo que imaginé.
     -Cheeto, ¿creeh que llegaré a algún láoh con tóh ehto?- Me di vuelta pa’ mirarlo con la cara mah sincera que podía. No quiero seguíh llorando como un chaval, pero jamáh me había sentíoh tan jodiamente atraído a alguien.
-Yo creo que si… el problema eh que no sé cuanto tieneh que pasáh pa’ llegáh. Pero de que llegas, llegas- Me dedicó una pequeña sonrisa que me hizo sentíh muy débil. Soy un jodido adulto, llorando por amor.

        Inhalé con fuerza, tratando de dehpejáh mi mente y salir de ese ahqueroso agujero de sentimentalihmo. Yo soy un tío alegre. Así debo seguir siendo.
-Bueno Mahe, creo que eh hora de empacáh. Si terminamoh de guardáh la cosah rápido, te hago uno espaguetih a la cherra- Chahqueó loh déoh alegre, lo que me entusiahmo muchísimo. No hay que miráh pa’ atráh Mahe… no hay que miráh pa’ atráh.
-Vale, pero tu cocinah y lavah loh platoh- Le dije dándole la ehpalda, pa’ inhpeccionáh con la mirada lah mierdah que me quedaban por recogéh. Al menoh el ordenadóh y tóh eso ya ehtaban en cajah, guardáoh.
-Pero seráh ioputa. ¿Quiereh que te cocine y que lave?... Vale tío, solo por ehta véh- Sentí una pequeña risa que no pude observáh puehto que seguía de ehpalda.

       Cheeto salió de la habitación, pa’ bajar algunah cajah y guardarla en su coche, mientrah yo me preocupaba de guardar chucheríah y cosah así en lah últimah cajah que me quedaban.
-¿Y ehto?- Tomé una bolsa de pláhtico que ehtaba debajo de mi cama. ¿Y ehto que éh?
-El gato…

“No olvides el gato de la suerte”

  Recuerdo como me gritó eso dehde el taxi que lo alejó de mí. Recuerdo ese jodido día que me cambió la vida. Lo recuerdo a él… como Rubiuh, no como ehte ioputa en el que se había convertíoh.
-El gato de la suerte… ¿Y si mi suerte solamente ehtá con Rubiuh?- Jodéh, porqué cojoneh me tengo que poner tan sentimental.