Capitulo 54

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Nota de la autora.

¡¡Hay nuevo capítulo!!

Espero que les guste esta capítulo tanto como a mi, si son observadoras se darán cuenta que les di dos grandes spoilers, jajaja espero que puedan descubrirlos.

Este capitulo es súper importante para el futuro de la historia.

Así como dicen en mi país, a William se le junto el ganado....

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William

Debería llamar a la policía.

Pensó William en cuando se detuvo justo afuera de ese departamento. La puerta es grande, blanca y diferente a la antigua puerta del ático, no está destartalada y el edificio no parece de mala muerte, ni viven malvivientes en el, aun asi puede escuchar los balbuceos de su hija y eso lo pone tan furioso que le gustaría tumbar la maldita puerta y llevarse a su hija de las manos de esa mujer, pero como todo hombre educado se detuvo para tocar el timbre.

— ¿Florencia quieres pasar a conocer el departamento? ¡Te va a encantar!.... — Amelie abrió la puerta pensando que delante de ella tendría a una furiosa Florencia, pero a esa pelirroja puede contentarla con cualquier cosa, pero ese papa furioso quiere matarla, y ese rubio inglés no es Florencia — ¡¿Que haces tu aquí?! ¡Vete de mi departamento! ¿Ni siquiera en Londres me dejaras en paz? —

William negó con la cabeza y se recargó en el marco de la puerta. Le enseñaron a ser un caballero y a ni siquiera herir a una mujer con el pétalo de una rosa, asi que solo se detuvo un momento a mirar de soslayo a esa castaña a la que pone nerviosa en cuanto posa su mirada en ella. 

— Claro que te dejaría en paz, me interesa muy poco lo que hagas — William se pasó las manos por el cabello, solo quiere tomar a su hija e irse de aquí, pero esa mujer no lo deja pasar y lo fulmina con la mirada como si quisiera verlo muerto — Pero a ti, te interesa mucho lo que yo tengo, te llevaste a mi hija. ¿Que esperabas? ¿Que llegara sonriente y feliz? Oh no, tú esperabas atraer a Florencia hasta tu departamento, por supuesto que voy a molestarte ¿Donde esta Paris? 

— Solo le daré la bebé a Florencia, no a un animal como tú — Amelie de detuvo junto a la puerta y se cruzó de brazos .

— No te hagas ilusiones Amelie, Florencia no vendrá a tu departamento jamás y aunque te cause demasiada molestia, yo soy el papá de Paris y tu no eres su mamá, no puedes llevarte a mi hija como si fuera tuya — William ha sido demasiado paciente con esta castaña, pero en cuanto escuchó el llanto de su bebé, la alejó de la puerta y entró en el departamento sin pedir permiso. Ciertamente ya no botes de pintura como antes, ni cosas peligrosas y Paris no lloro porque le pasara algo malo, sino que al verlo levantó sus pequeñas manitas, como si entendiera que hizo algo malo, la tomó en brazos y dejo que recargara su cabecita en su hombro, pero un llamativo perfume en medio de la sala de estar, llamó su atención y lo hizo sentir furioso de nuevo, completamente celoso — Es una lástima que tus planes para atraer a Florencia a tu departamento se hayan ido a la basura, porque eso es lo que quieres, traerla aquí, envolverla con un par de palabras bonitas, ¿Dime, también esperar tener sexo con ella? Porque tienes juguetes en la sala para entretener a una bebe y tu departemento huele exactamente al perfume de Florencia, creo que aún no te ha quedado claro que su relación se terminó —

La Perfumista De París [Saga Las Perfumistas Parte 1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora