La Perfumista De París [Saga Las Perfumistas Parte 1]

Capitulo 78

William

— ¿Papá como se hacen los bebés? — William alejó su mirada de un par de papeles y miró como Paris quiere ponerse de puntillas para alcanzar el escritorio, pero lo único que se ve es su  cabello rojo, tan rojo y brillante como él de su mamá — ¡Papi! ¿Tú como me hiciste? —

William casi suelta una carcajada cuando Paris rodeó el escritorio y caminó hasta él, entonces pudo verla y fue imposible no reírse, de verdad no quería reírse pero su pequeña pelirroja se mira adorable. Cuando su hijo James aún estaba vivo, le encantaba la playa, por eso casi prácticamente William vivía en una, en está misma playa, con la mejor vista de estas costas italianas, en medio de esas colinas está su lujosa casa, le hubiera encantando llevar a sus hijas y a Florencia ahí, pero esa casa está llena de cosas que eran de James y es muy difícil regresar ahí.

Pero tiene que aprender que su pelirroja no es James, qué a sus pequeñas hijas no les va a pasar nada porque Paris se ve llena de vida, William no pudo despegar la mirada de su hija porque Paris se ve demasiado graciosa en ese traje de baño que la hace ver como una muñeca, pero soltó más carcajadas cuando su hija se puso las manos en la cintura y se acomodó sus lentes de sol.

William tomó aire y tuvo esa conversación difícil con su hija.

— Bueno Paris, los bebés llegan a las puertas de las casas de los papás cuando una cigüeña los pone ahí....—

Paris soltó una carcajada infantil, al parecer hoy está de muy buen humor

— Las cigueñas de los bebés no existen, papi — Paris se acomodó sus gafas — Tía Celine siempre dice la verdad, ella dice que los bebes se hacen cuando los papás tiene sexo ¿Qué es eso, papi? —

William negó con la cabeza y tomó a su hija en brazos, tendrá que alejar a su hija de la hermana loca de su perfumista.

— Él sexo solo es un par de besos y abrazos, pero lo que dice tú tía es mentira, los bebés siempre llegan a la puerta de tú casa —

A Paris se le iluminaron los ojos, su bebé no tiene porque saber cosas de adultos y William siempre va estar ahí para proteger la inocencia de su hija.

— ¡Entonces debemos quedarnos toda esta noche esperando junto a la puerta, quizá nos dejen otra bebé cómo London! —

William negó con la cabeza.

— Las cigüeñas viajan nueve meses, eso tenemos que esperar para que aparezca un nuevo bebé —

Paris se recargó en su pecho, desde que llegaron a la playa ha estado así, demasiado apegada a él y para William eso es fabuloso, su hija sólo quiere estar con su papi y con nadie más.

— ¿Papi, las mamás siempre lloran
cuando saben que van a tener un bebé? — Paris lo miró directamente a los ojos — Es que mami y Lodon están llorando en el baño — Paris bajó la voz como si dijera un secreto — Creo que London y yo vamos a tener un nuevo bebé —

— Y creo que yo voy a volver a ser papá — William le dio un beso a su hija en la frente y comenzó a caminar hasta ese baño de donde salen esos llantos que invaden su habitación, tomó un gran respiró y habló en voz baja — Creo cariño que tenemos que hacer feliz a tu mamá ¿No crees? —