Capitulo 14

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MARATÓN 4/5
Tn...

Se fue como un tipo completamente mal educado, él nada más vino literalmente a dejar el anillo, como si fuera un vendedor o algo así, lo que realmente no me importa, porque no me cayó bien.

Trate de subir las gradas de mi casa de manera silenciosa, mi plan era llegar a mi habitación, tomar mi abrigo, bajar e irme sin que mis madres de dieran cuenta, logre llegar y tomar mi abrigo pero todo fracasó en el momento que debía volver a a bajar, ya que mi mamá me encontró en medio de las escaleras.

— ¿Que pasó con Christopher? — pregunto

— ¡Ohhh! Déjame ver si lo tengo en algún lado de mi cabello — dijo burlonamente.

— No seas igualada (Tn) y deja tus estupideces para alguien más quieres, hablo enserio — agregó molesta

— Se fue mamá es algo obvio, si se hubiera quedado en la casa, lo estarías viendo y no, no soy grosera, solo digo lo que es real — dije mientras continuaba subiendo las escaleras.

— ¿Y tu a donde piensas que vas? — pregunto cruzándose de brazos.

— tengo un compromiso y antes que me tires el discurso que me voy a casar y que debo respetar a mi futuro esposo, déjame decirte que no va pasar, además si ya me obligaron a contraer matrimonio con ese tipo tan nefasto, entonces déjame por lo menos disfrutar de mis últimos días de gloria antes de tener que estar casada — agregué

— *suspiro* esta noche no quiero discutir contigo, me siento preocupada por tu hermana, pero fuera de ello, te dio el anillo al final — agregó

— Si — dije sacando la cajita y abriéndola, no había visto el anillo desde que me lo entregó, así que me mato la curiosidad, cuando lo vi, me sorprendió ya que el que le habían dado a mi hermana era grande y muy tosco para ser un anillo de compromiso, pero por el contrario este era muy delicado, además era no se como explicarlo específicamente pero es un anillo muy bonito vaya.

— (Tn) está precioso — dijo mi mamá

— Si, es algo que si acepto, este está mejor que el que le habían dado a Sabrina — dije poniéndolo en mi dedo para ver cómo me quedaba.

— Sabrina, donde es que estaré mi hija, me tiene preocupada, quiero saber sus razones en general para saber porque me hizo esto a mi, yo que la amo mucho — dijo mi mamá con nostalgia.

— No quiero sonar a una persona sin sentimientos pero por ahora no quiero saber de ella, porque sin duda ella es la principal culpable de que yo esté en esta situación y no dudo mucho que donde quiera que esté lo esté disfrutando y mucho. — dije con enojo. Se que soy rebelde pero también se que yo no merecía esto, menos porque ella no tuvo el valor de decirles a mi padres lo que sentía realmente.

Pero como tampoco quiero continuar discutiendo con mi madre, ya no la deje decir nada más, solo tome mis llaves del auto y salí de la casa, me había quedó de ver con Mateo en nuestra casita del árbol.

¿Suena tonto no? Pero en la casa donde vive Mateo, hay un árbol enorme, a sus papas ya hace muchos años se les ocurrió hacer una casita del árbol, pero como el árbol es enorme y firme, la casita terminó por ser una casa bastante grande y amplia en la que el y si hermana jugaban mucho cuando eran pequeños, pero ahora que están grandes ya no, por eso nosotros la usamos para pasar el rato, ver al cielo, convivir, claro que no es el único lugar que tenemos, pero ahora es donde nos veremos.

Al estar en la parte trasera de la casa, siempre que voy entro por una escalera colgante para que sus padres no me vean, creo que no les grado del todo, porque dicen que la diferencia social nos traerá mil problemas pero no nos importa eso.

— Hola — dije una ves subí y el me vio de pies a cabeza y sonrió.

— Vaya, have cuanto tiempo que yo no te veía en un vestido — dijo el dándome un abrazo y un beso en la frente.

— hace demasiado tiempo, de hecho la última vez fue para nuestro aniversario — agregué sonriendo

— ¡El anillo más grande de compromiso que te pudo dar! — me termino por decir con asombro y es que había olvidado quitarme el anillo. ¡Vaya memoria la mía y vaya problema ello! — estamos de acuerdo en que jamás en la vida yo te podría dar un anillo como ese — terminó por decirme

— Y cuantas veces he tendido que decirte que eso es algo que no me importa, este anillo es una joya más, algo que no tiene valor para mi, es una obligación, es eso lo que me representa este anillo. — dije y el negó con la cabeza.

— Todo esto es una locura, te vas a casar y yo me voy a quedar aquí como si nada, como si todo esto fuera el fin de todo, no se, es lo que siento, siento que lo nuestro se va acabar — dijo con nostalgia

— No, no se va acabar, o es que acaso tú ya no me amas — termine por preguntarle

— No, no es ello, es solo que no me gusta esta situación, entiéndeme, no es algo que me haga sentir para nada bien, eso es todo — agregó

— ¡Amor! Solo será un par de meses, te lo prometo, no llevará mucho tiempo, voy hacer que el no tenga más opciones que querer dejarme y verás como todo esto se acaba más rápido que nada, solo te pido que me des tiempo y que confíes en mi, te lo dije antes y te lo vuelvo a repetir, sería incapaz de serte infiel con ese tipo, yo solo quiero estar contigo y con nadie más. — agregue y entonces se acercó a mi y me beso.

Pasamos la noche en la casita del árbol, me costo mucho mantenerlo en calma, el tema del dinero y de que me vaya a casar con un chico bien, lo tiene con todos los sentimientos revueltos, lo entiendo claro que si, pero no quiero dejarlo ir, menos por que me toco un destino fan feo. Mateo es lo más lindo que me ha pasado en la vida, es quien me hace sentir bien, quien me da felicidad y no quiero perderlo, realmente lo amo y perderlo me rompería completamente el corazón y no, no quiero eso, yo solo quiero cumplir con lo pedido de mis padres y ya luego unos dos o cuatro meses después, recuperar mi libertad e irme a ser feliz con el hombre que en verdad yo amo.

Entre el Cielo y el Infierno (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora