Capitulo 106

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MARATÓN 1/3

Zabdiel intentó volver a controlar el asunto, pero no pudo por mucho tiempo, ya que ellos continuaron en su pelea, pero no duró mucho nuevamente ya que los volvieron a separar... ¡Dios estaban todos golpeados! No puedo creer que Christopher perdiera el control y terminara por golpearse con Mateo de ese modo... el aún quería continuar peleando con Christopher pero esta vez me puse en medio, entonces el se detuvo....

— Basta, por lo que tú más quieras basta ya — dije suplicante, viéndolo y el me vio a los ojos... — Tu no eres así — le termine por decir y fue como si por un momento hubiera regresado el chico sencillo al que yo alguna vez conocí. Así que sin decir nada más, le dio un empujón a Zabdiel, quien lo tenía agarrado y luego de ello, salió de la sala de juntas.

— De todos modos acostúmbrate a verme porque si o si voy a trabajar aquí, así que en cuanto todo los papeles de ella se arreglen aquí me tendrás — dijo el saliendo y molestaba a Christopher con cada palabra que decía.!!

— ¡YAAAAA! — gritó Rodrigo una vez más... — cálmate o el que te va terminar por dar un golpe voy a ser yo — termino por decirle

— No voy a trabajar con ese maldito y si no estás de acuerdo entonces renuncio — dijo Christopher dejando admirado a su papá y a mi también por decir lo que le acababa de decir.

— ¿Que diablos es lo que estás diciendo? — preguntó su papá con asombro

— lo que escuchaste, que si me obligas a trabajar convivir con el yo renuncio — dijo nuevamente quitándose la sangre que tiene en el labio, Mateo le partió el labio literalmente y le dejo un ojo morado, lo peor de todo es que a Christopher se le nota muy rápido, pues es un hombre demasiado blanco.

— Que no voy a trabajar si tengo que compartir el piso de administración con ese tipo tan de agradable — término por decir molesto

—Explícame porque tanto odio, que es lo que te ha hecho... ¿De donde lo conoces? — preguntó su papá y el comenzó a balbucear, no sabía que decir entonces yo hice todo este lío entonces yo soy quien va dar la cara por las consecuencias, pero estaba dispuesto a decir las razones, Christopher me interrumpió.

— Es un tipo que me ha estado molestando desde ya hace un tiempo, pero ha llegado muy lejos — dijo viéndome.

— Vamos Christopher eres un hombre, tienes que aprender a dejar lo personal lejos de lo laboral y entonces no te va costar convivir con el. — dijo su papá

— ES QUE NO QUIERO — dijo como si fuera un niño pequeño y es algo que si tiene Christopher, cuando las cosas no salen como el quiere o espera, ves un dilema hacerlo que tome la decisión correcta.

— Ya, mira sabes que... quiero que te vayas a curar esa herida del labio porque sigue sangrando y que también te tomes un té, ya cuando estés más calmado hablaremos y no, no quiero que me discutas ahora, solo quiero que entiendas lo que te acabo de decir — dijo finalmente y entonces cuando estaba por salir me sonrió y dijo — ¡Te lo encargo! — me dijo Rodrigo en un suspiro.

— No hay ni que decirlo — dije y le pedí a Karla que me pasara el botiquín que había en la oficina, así que ella me lo avanzó y regrese nuevamente hacia donde estaba Christopher, donde nos quedamos a solas con el, así que volteo a verlo mientras sacaba un frasco de alcohol y un poco de algodón.

— No me digas absolutamente nada — dijo sentándose en una silla, aún estaba enojado. De todos modos a me acerqué a él para curarlo.

— Dime que fue lo qué pasó — dije mientras tomaba uno por de algodón con alcohol para limpiar la herida que le habían hecho en el labio.

— Nada, no pasó nada — dijo nada más y entonces coloque el algodón en su labio. — No, eso duele — dijo finalmente tratando de quitar la cara.

— claro que va doler, que pensabas... pero tienes que dejarte que te limpie o se puede infectar, además no me digas que no pasa nada, porque nadie se va a los golpes por nada, te partió el labio y tu definitivamente la nariz, ahora me dices que no pasó absolutamente nada, vamos Christopher no me quieres venir a tratar como si yo fuera una estupida — dije finalmente mientras continuaba limpiando su golpe.

— Perdón la interrupción, traje un poco de hielo para que te lo pongas en el ojo, tú eres muy blanco, ese moretón se te va notar mucho — dijo Karla preocupada.

— Lo va lucir con orgullo parece — dije y el vio de mala gana.

— Muchas gracias Karla, gracias por tu si te preocupes por mi — dijo y yo solo rodé los ojos, ella solo e vio y luego salió de ahí, mientras él tomó la bolsa de hielo que le habían llevado y la colocó en su ojo, entonces suspiró un momento.

— ¿Que carajos fue eso? — dije nada más viéndolo

— La realidad; ella se preocupa por mi; tu por el contrario, te viste muy linda diciéndole a Mateo que ese no era el tipo que conocías ¡Vaya! — dijo de mala gana, ¡Dios! Todo esto es un problema.

— ¡Dios! Las cosas no son como te las imaginas, fue lo único que supe decir en ese momento — dije

— Vaya, lindo pensamiento el que se vino a tu mente y hablo muy enserio cuando te digo que no quiero trabajar con ese tipo  — dijo y entonces solo me quedé callada, me quedé pensando en cómo se podían arreglar las cosas con ese tema.

— Christopher, ¿Tu confías en mi? — termine por decirle y el me vio de manera seria intentando descifrar la razón del porque yo le estaba preguntando ello.

— Si es por lo que me estoy imaginando, la respuesta es NO, no es porque no confíe en ti — dijo de mala gana.

— ¡Por Dios Christopher! — dije y entonces el se levantó de la silla.

— No, he dicho que no — dijo de mala gana — y sabes que ya no quiero hablar contigo — agregó por último y salió de oficina. *suspire*

Estos van a ser problemas, tras problemas.... no ahora mismo, porque se que va tomar un tiempo el cambio de ciertas cosas para Sabrina y para que Mateo entre aquí directamente pero cuando eso termine por realizarse esto se va poner mal.

Entre el Cielo y el Infierno (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora