Christopher un chico mujeriego dispuesto a hacerle la vida imposible a la mujer con la que lo obligan a casarse solo para llevarle la contraria a sus padres . (Tn) la chica que le tocó tomar el lugar de su hermana quien se escapó con alguien más, un...
Última noche en Japón 🇯🇵 Templo Sensoji en Tokio. (Tn)...
No puedo creer que hoy ya cumplimos 6 días de estar aquí, hoy es nuestra última noche en Japón peque mañana tenemos unas cuantas horas y ya por la noche volvemos a Miami. Siento que estos días se fueron volando y por mi fuera me quedaría aquí toda la vida. Un lugar en el que se trasmite realmente pasa y nadie me está molestando en mi casa.
Con Christopher decidimos ir a dar un paseo por el templo de Sensoji. Cuando llegas lo primero que vez es la puerta Kaminarimon es una hermosa puerta, es algo que te deja admirándola por completo.
Una vez que cruzamos la puerta te vas a topar con varias pequeñas tienditas en las que suelen vender diferentes cosas, pero sobre todo recuerdos para que todos los turistas puedan llegar a comprar. Así que como parece que e vez de un hombre adulto estoy aquí en Tokio con un niño pequeño, Christopher se acercó a una de las tiendas para comprarse algo típico de aquí, además de un abanico.
— Christopher para que compras eso — dije nada más cruzada de brazos
— Porque me gustan, ya tengo uno en color negro y aquella vez que vine me quede con ganas de comprar una en color rojo, así que no le puedes culpar, además este lugar es perfecto, pero a todo ello le agregamos que mi color favorito es el rojo — dijo y como ya lo había dicho al principio, parece un niño pequeño viendo que más poder llevar, así que le tocó esperarlo, pero una vez terminó por comprar todo lo que le llamó la atención, continuamos caminado hasta llegar a la pagoda de cinco pisos.
— ¡Wooou! He venido tantas veces pero no deja de ser espectacular para mi estar aquí — dije viendo el lugar. La padoga especialmente es aquella torre de cinco pisos que no se encuentra abierta al público la razón es porque para ellos ese lugar funciona como si fuera un cementerio además de contar con algunas de las reliquias de Buda. ¿No les parece eso impresionante?.
— Hey tu que parece que eres experta en las fotos, puedes por favor aquí si tomarme una fotografía. — terminó por decir Christopher y después de rodar los ojos termine por sacar mi cámara y tomar la foto.
Bueno, de hecho tome un par de fotografías, por que siempre soy así, para que después de pueda escoger la que más guste.
— Quedó bastante bien — dije mostrándole las fotografías a Christopher quien escogió finalmente esta.
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— Oye realmente eres buena para tomar las fotografías — dijo Christopher admirando que había salido bastante bien en la fotografía que le había tomado.
— Bueno, creo que si funcionar los tutoriales — dije y ambos reímos.
Nos quedamos por el lugar casi todo el día, salimos de ahí a comer ya tomar algo, pasemos por las calles, para visualizar bien todo y recordar cada lugar que se volvió a pisar, me encanta eso, porque me fascina después volver a recordar cada uno de estos recuerdos y hacer de cuenta que estoy en el lugar una vez más.
Cuando nos dieron más o menos las 6:40 de la tarde, nos sentamos en alguna banqueta y nos pudimos a pensar donde es que pasaríamos la noche, el efectivo que llevamos comenzaba a caer y no queríamos utilizar las tarjetas porque era evidente con ello nuestros padres podrán saber donde estamos y eso es lo menos que queremos.
— bien, hay un lugar que es precioso pero pues tampoco es que es barato, pero si lo piensas, podemos utilizar todo el efectivo hoy y ya mañana si podremos usar las tarjetas, total ya vamos de vuelta a Miami — agregó y le sonríe
— ¡Diablos Christopher! En verdad que cada día me sorprendes más al saber que nos eres tan tonto — dije y el me dio un golpe en la frente. — ¡Oye! — grite
— Tu comienzas el bullying psicológico yo tengo derecho a comenzar el bullying físico — dijo
— Eres un igualado — agregue
— Lo mismo digo, me comenzabas a caer bien pero ahora ya no tanto agregó — dijo
— Lo mismo digo — agregue y entonces salimos de ahí, en busca del lugar donde pasaríamos la noche, el hotel que había visto Christopher estaba completamente lleno y no hubo oportunidad de que nos dieran un espacio.
Lo único que habían era un hotel lujoso de Ryokan, ese tipo de habitaciones tradicionales de este país. No era realmente lo que esperábamos pero era ello o dormir en la calle y no porque no nos guste, es porque el lugar es realmente caro.! Pero al momento que nos dieron la habitación nos dimos cuenta que había valido la pena.
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Pedimos la cena y estuvimos platicando y bebiendo durante todo ese tiempo. Hubo un momento en el que nos quedamos callados, creo que pensando en todo o porque simplemente el alcohol ya nos había comenzado a hacer efecto.
— Está vez pido por lo menos el lado izquierdo de la cama — dijo Christopher corriendo a lanzare en ella y no pude evitar reír al ver su reacción.
— bien — dije nada más y me senté en la orilla, pensando en tantas cosas; entonces el se sentó delante de mi.
— Dime, que es lo qué pasa contigo — dijo viéndome
— Nada fuera de lo normal, es que todo esto sigue siendo mi extraño no te parece — dije viéndolo y el acepto ello.
— De lo que más me doy cuenta es que no somos tan diferentes el uno del otro — agregó y en ello tiene la razón, creo que compartimos las mismas desgracias de la vida. Me quede callada, viéndolo y el hizo lo mismo, por primera vez en todo el viaje verlo de este modo no me causo incomodidad y lo primero que paso por mi cabeza fue ¿Como besara Christopher Vélez? La duda me entro porque me recordé del pequeño beso que me dio en la iglesia, entonces me hizo querer imaginar cómo sería un buen beso. Seguido de ello, lo que pensé fue.. será ahora o nunca que lo pueda averiguar, así que.. como la curiosidad terminó por matar al gato, pues sin pensarlo mucho más me acerqué a él y lo besé.
Al principio se quedó estético, definitivamente lo tome por sorpresa, pero unos segundos después, respondió mi beso, pero así mismo por unos segundos después se separó.
— ¿Que fue eso? — terminó por preguntar con cara de confusión.
— No se, quizás curiosidad, quizás fue el alcohol, no lo se con exactitud — dije viéndolo y el sonrió — Ok, perdón, no lo vuelvo hacer — dije levantándome de la cama, para ir a colocarme la pijama — tampoco es que creas que me moria por un buen bes... — no me dejo terminar mi frase, por que ahora la sorprendida fue yo, en el momento que me tomó por la cintura y junto sus labios con los míos en un buen beso.
🔥🔥🔥🔥 Ahora es que viene lo shido ¡Ok no! Jajaja Aquí les dejo un capituló más para que les pique la curiosidad por saber que viene en el próximo capituló pero...
