DESUS. Daryl y Jesús

WOOER

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Zascha Hillsnee permanece sentado tranquilamente tras la mesa que el staff le ha preparado, mirando a la distancia al hombre de seis mesas más allá. Zas está promocionando su nueva novela, One Kiss is all much. La cantidad de chicas que se arremolinan y forman para tener su autógrafo es impresionante en la plaza a pesar de que su turno de firma de autógrafos será hasta dentro de una hora aún.

Mientras tanto, el que firma autógrafo es Daryl Dixon.

Seis mesas más allá.

La gente que se forma para verlo es pequeña y ruidosa.

No son ni la mitad de personas que esperan a Zas.

El pelinegro no parece preocupado por lo que sucede alrededor.

Simplemente sonríe cuando un pequeño se pone en puntillas para conseguir mirar por encima de la mesa, dejando sobre de la misma el libro que su mamá le acaba de comprar, «Dulces sueños, señor Goliat», es una obra ilustrada en cuya portada de pasta dura se mira a una niña sentada con su impermeable amarillo y sujetando un paraguas cerrado acompañada de un gato azul. Poco más de 74 cuartillas con letras e ilustraciones.

—¿Me lo firmas, por favor? —dice el pequeño y—: Soy Tommy, Tommy Gill-Park, Tommy con dos emes y Gill con dos eles; eso dice mamá—, el niño le sonríe al moreno y el hombre abre el libro en la primera hoja.

"Hola, Tommy con dos emes; espero que que te hagas amigo de Ceci y si tú necesitas un amigo, aquí estoy yo, Daryl", una escritura rápida y una firma pequeña: le entrega el libro al pequeño y le acaricia la cabeza antes de que su mamá agradezca al moreno y se lleve a su pequeño de allí leyéndole lo que el escritor le escribió. Luego, cinco niños después, hay una pequeña fan de ocho años llamada Selene y le pregunta tímidamente si lo puede abrazar.

El pelinegro la deja venir y se abrazan un momento o dos antes de que le firme el libro a la niña también. Y un rato después se toma una fotografía con Yannick, una pequeñita de sólo dos años a quienes sus papás acaban de comprarle de regalo de cumpleaños los siete libros que ha escrito Daryl porque quieren leérselos y que la niña aprenda a amar leer.

Georgette acaba de irse de la mano de sus dos mamás presumiendo su libro nuevo, como si no hubieran sido ellas quienes se lo compraron, cuando de pronto su cuento se pone sobre de la mesa y la voz ya demasiado conocida de Negan resuena en sus oídos—: ¿Puedes ponerle una dedicatoria para mi pequeña? —Daryl lo mira y rueda los ojos, Negan no tiene hijos todavía, aunque no es un secreto que lo está intentando con todas las mujeres que se puedan querer dejar embarazar por él. De todos modos, toma el libro y escribe para él, "Hola Melody, todavía no naces, pero lo harás y tu papá prometió leer este cuento para ti. Daryl": Negan lo toma mirando la firma y se aparta para que pase la siguiente mujer con sus dos hijas.

—¿A qué hora terminas? —pregunta Negan guardando el cuento bajo su brazo.

—Seis y media.

—Genial, iré a dar una vuelta en la galería y te espero afuera para cenar.

Daryl asiente y sonríe al grupo de pequeños que vienen como patos pidiéndoles todos juntos si se pueden tomar una foto con él.

***

Hace una tarde nublada con una fina llovizna, Jesús está probando su cámara nueva tomando algunas fotografías urbanas; le gusta ir por las calles encontrando cosas para fotografiar y luego subirla a sus redes, las vende, las edita, tiene un par de blogs con suficiente popularidad.

La fotografía no lo va a sacar de pobre, eso es verdad. De todos modos le gusta y lo hace.

Las tardes lluviosas son sus favoritas.