Esta historia es un fanfic de la novela turca El Secreto de Feriha.
...
¿Qué ocurrió en los diez días previos a la boda de Emir y Feriha? ¿Cómo fue que realmente...
Prohibido su copia total, parcial o adaptación (seamos respetuosos del trabajo ajeno)
AMOR SIN FINAL
Autora: Daiana Mibrani
Al día siguiente, Feriha estaba muy feliz arreglándose frente al enorme espejo de su habitación.
Su cabello recién peinado lucia perfecto, unas gráciles ondas caían delicadamente sobre sus pequeños hombros mientras que una sutil trenza recogía parte de sus hebras castañas enmarcando su bello rostro.
Luego de colocarse un poco de brillo labial, la joven observó con indecisión tres vestidos que descansaban sobre su cama.
¿Cuál sería el indicado?
— ¡Por Allah! —suspiró mordiéndose el labio.
¡De dónde surgía tanta inseguridad a la hora de elegir una prenda, si nunca en su vida había tardado más de media hora en vestirse!
Feriha sonrió con ilusión pensando en Emir. ¡Parecía como una adolescente de quince años en su primera cita!
—Será mejor que me de prisa —susurró mirando la hora en el teléfono. Emir le había dicho que la recogería al medio día y solo faltaban treinta minutos.
Dándose un último vistazo en el espejo, Feriha optó por un delicado vestido rosa y unos tacones de color natural.
Cuando finalmente se sintió conforme con su apariencia, bajó al lobby del hotel para decirle a la recepcionista que en breve alguien preguntaría por ella y que debía informarle de inmediato.
—Descuide señorita, le avisaremos cuando pregunten por usted.
Feriha asintió con la cabeza y se dio la vuelta topándose con Levent.
—Levent... ¿Te irás? —preguntó con sorpresa al ver que su amigo llevaba una maleta en la mano.
—Pienso pasar unos días en Esmirna. Bülent me llamó y me dijo que estaría allí por un tiempo.
—Me alegra que la relación con tu hermano esté mejorando —dijo sin percatarse que una persona ajena a la conversación acababa de llegar y escuchaba con interés cada palabra que salía de su boca.
—A mi también —aceptó con una pequeña sonrisa—. Feriha... he pensado en regresar a Estados Unidos luego de Esmirna. Seguramente tú querrás permanecer un tiempo más por aquí —agregó con cierta resignación. Ya no tenía motivos para permanecer en Estambul—. Confío en ti para los negocios del hotel, sé que entre Cansu y tú harán un buen trabajo. De cualquier forma, estaré en contacto por si necesitas algo.
Feriha no se atrevió a pedirle a Levent que se quedara. No se sentía con el derecho a hacerlo y además pensó que alejarse un tiempo de ella quizás le haría bien.
—Entiendo —dijo con la mirada gacha—. Creo que será lo mejor para ti.
El capitán la observó con tranquilidad durante unos segundos.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
