DESUS. Daryl y Jesús

BLACKOUT

Capítulo 1

La noche es endemoniadamente caliente; es difícil saber qué día es, pero el pelinegro calcula que es finales de abril.

El puente que Rick y Eugene han estado planeando apenas está comenzando, no tiene forma, pero sí parece bastante a algo de lo que la gente ha garabateado en papeles entre un montón de números y cuentas. El campamento de los que se quedan está en la zona alta del cerro, un par de kilómetros al norte del puente.

—¡Cierra el hocico! —gritó Matt empujando a Connor—. ¡Nadie te pidió tu opinión! —y esto es lo que pasa cuando pones a los Salvadores atrabajar con la gente de Hilltop. Los turnos se cambian cada semana, sólo los Salvadores son permanentes, Rick dijo que como castigo, pero Dixon aún no resuelve si castigo contra ellos o contra el resto de las comunidades, y de todas las comunidades quienes menos soportan a los Salvadores son los Colonos, y Daryl no puede culparlos.

—Basta —se pone en medio Jesús estirando los brazos para mantenerlos separados—. No sé si no se han dado cuenta, pero estamos pisando un puente a medio caer.

Para cuando Dixon llega con ellos, montado en su motocicleta, ya se ha armado la campal. Jesús intenta desesperadamente separar a Matt y Connor, pero alrededor todos los demás ya están entre golpes y empujones.

El problema es que los Colonos no soportan a los Salvado y los Salvadores a menudo tampoco se soportan a sí mismo. Rick puso al arquero como vigilante de esta noche porque sabe que es el único que puede meter en cintura a los Salvadores. Paul podría, si en lugar de intentar hacerlos entender les diera un par de patadas, pero se niega a llegar a los golpes a menos que alguien intente golpearlo a él.

Fuera como fuere, la batalla está armada para cuando Daryl salta de su motocicleta y se mueve entre la gente apartándolos a empujones mandando a cada quién a su rincón.

Lo único que le alegra es que la noche refresca un poco mientras comienza a caer una suave llovizna, aunque sería mejor una lluvia, incluso una tormenta, así la gente se soltaría y correría al campamento para resguardarse, pero en fin; como puede, Daryl llega hasta donde Matt y Connor, y Jesús se ahorra las explicaciones, limitándose a hacerle una seña a Dixon para que sujete a Matt y él controla a Connor.

Están tirando de ellos para hacerlos pasar entre la gente, la llovizna arrecia hasta convertirse en una suave lluvia, y entonces algo sucede.

Los imbéciles que pelean y forcejean en la línea final del puente derrumbado, precisamente allí donde están las luces de bengala para casos urgentes o para distraer Caminantes, tiran las antorchas encendidas en medio de su forcejeo. Una antorcha cae en la caja y ocho segundos después la caja está explotando, y la gente sale corriendo.

Sólo es un parpadeo, el puente se estremece y enseguida la base improvisada se vence con el primer fuego. Jesús consigue la suficiente reacción para empujar a Matt hacia Daryl y Daryl pesca al muchacho de las ropas arrojándolo a un costado allá a donde también arroja a Connor, y Rovia cae por el puente hasta el río. Paul cae y entra al agua, alguien se asoma llamándolo con un grito.

Está demasiado oscuro para conseguir ver si sale o se hunde, alguien comienza a decir algo sobre rastrearlo por el lindero del río, de todos modos Dixon no se queda a escucharlo, tres parpadeos después de oír el ruido del cuerpo entrando al agua, Daryl Dixon salta.

Fue instinto, esa absurda necesidad de salvar a la gente, tal vez sólo porque Rick le encomendó el cuidado de este estúpido puente esta maldita noche. Saltó a pesar de estar consciente de que no es el mejor nadador del mundo, y a pesar de que la lluvia alborota el río.